Nos volveremos a ver. | •KTH & ___|•

Capítulo 8: "¿Aún la amas?".

Poco a poco mis ojos comenzaron a abrirse, alguien intentaba despertarme, lograba escuchar su voz la cuál se me hace muy conocida.

—___—me empujaba—¡despierta de una vez!

Logré despertar completamente y veo a la dueña de esa voz tan irritante.

Eunbi.

—¿Qu-e? —miró a Taehyung, el aún no despierta—¿que sucede contigo? —finalmente me pongo de pie.

—No puedes dormir en el trabajo—cruzó sus brazos algo enojada.

Ruedo los ojos, sé que lo hace a propósito—¿por qué estas aquí? Taehyung es mi paciente, no el tuyo... No tienes nada que hacer aquí.

—¿Disculpa? —actuó ofendida.

—Disculpada—sonreí sarcástica—ahora sal de aquí, por favor. —Apunté la puerta.

—Oye, madura de una vez ¿si? —deja unos papeles a los pies de la camilla y se dirigió a la puerta, pero antes de salir me dice—me mandaron a entregarte esos papeles, si no, no estaría aquí... No soporto estar cerca de ti. —fue lo último que salió de su boca y salió de la habitación.

Perra.

Suelto un suspiro y comienzo a leer los papeles que dejó. Son los resultados de los exámenes de Taehyung.

Leo cuidadosamente cada palabra que hay en las hojas y me sorprende saber que Taehyung esta bien. No tiene Neumonía...

—¿Que es lo que hice? —mando un pequeño brinco.

Me asusté.

Me agarro el pecho por el susto y me acerco a Taehyung con el ceño fruncido, le doy un pequeño golpe con las hojas que mi mano sostenía.

—¡Auch!—se queja dramáticamente—¿a que viene eso?

—No vuelvas a hacer eso—arrugo las cejas—si no recibirás otro golpe más fuerte—le advierto.

—Esta bien, esta bien—levanta sus manos como muestra de paz.

—Le diré a tus padres que acabas de despert—me di media vuelta pero el me agarro de mi delantal impidiendome avanzar.

—No acabo de despertar—sonrió y yo lo miré con algo de confusión—desperté un poco antes de que esa chica entrará a la habitación, me estaba haciendo el dormido... Te vi sacar las garras, grrr.

—¿Y por qué no me despertaste? —hago una pausa—no puedo dormirme en el trabajo...

—Lo siento, es que—suelta un suspiro—te veías tan tierna durmiendo y sostenido mi mano. —Me muestra una sonrisa.

¿Qué?

Me agarra de la mano nuevamente y logro sentir como mi ritmo cardíaco se eleva cada vez más.

De seguro es por el susto ¿no? ¿De qué demonios hablas ___? Eso no puede ser posible, se supone que debería disminuir no aumentar.

—Yo...—¿que se supone que deba responder? ¿Gracias? Solo no lo arruines ___. —no lo vuelvas a hacer.

La sonrisa de su rostro desaparece poco a poco y aparece una expresión ¿triste? ¿Molesto? Eres difícil de leer Kim...