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Una semana había pasado,una semana en la que Temo no dejaba en paz a Ari,llevándolo de un lado a otro con la excusa de que quería conocer más sobre Oaxaca.
Aristóteles ahora se arrepentía el haberse propuesto como guía,no fue una de sus mejores ideas,claro que no.
En estos momentos se encontraban jugando en unos pequeños puestos,Temo alardeaba de que su puntería era la mejor,que claramente era una total mentira porque había fallado todos los tiros sin siquiera acercarse un poco a su objetivo.

—Si, efectivamente,tu puntería es genial— Ari no iba a desaprovechar la oportunidad de burlarse,justicia divina,claro que sí.

—No es mi culpa,está truqueado esta cosa—El menor infló sus mejillas,que vergüenza sentía en esos momentos,tierra tragalo y escupelo en Toluca,oh bueno,mejor no.

Ari empezó a echarse a reír.
Temo lo fulminó con la mirada.

—50 pesos a que yo sí le atino—guiño su ojo,los ojos de Temo se abrieron de sorpresa,aunque rápidamente le siguió el juego.

—Trato,pero no llores cuando pierdas, Aristocles— le sonrió divertido.

Y¿Adivinen qué pasó?

El Córcega no había fallado ninguno de sus tiros.

—Agh—el López lo miró con odio.
Estaba por darle el dinero,pero Ari se había negado,le dijo que daba igual,además le regaló la alcancía que había ganado.

Cuauhtémoc debía de admitir que ese había sido un gesto lindo,apesar de que quizá Ari se lo daba para que recordara su derrota.

Una parte de él le decía que lanzará el obsequio,pero otra le decía que lo aceptara.

Se estaba llevando bien con el Córcega,tal vez no era tan malo pasar tiempo juntos.
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Habían perdido la noción del tiempo,ambos hablaban de todo un poco,casi parecía que eran grandes amigos.
Cuauhtémoc,parecía dejar a un lado esa actitud que tanto molestaba a Ari,aunque claro que no duraba mucho,porque cuando se daba cuenta,volvía a ser el de siempre.

El de rizos no comprendía nada,a veces parecía que podían llevarse bien,pero en otras no dejaba de coquetearle para molestarlo,y aún así no es que le molestara del todo, solía ser gracioso cuando te acostumbras.

Una semana y ya estaban tan revueltos en sus emociones.

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Llegar a casa y encontrarse un pancho furioso eso sí que no se lo esperaba,no sabía que aquel hombre que parecía muy amable pudiese estar tan enojado.
Por otra parte,su hijo parecía de lo más calmado ante eso,supuso que quizá no era la primera vez que lo regañaban.

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Ya en su departamento,Pancho le dió  una plática sobre no llegar tan tarde a casa,Temo rodó los ojos,estaba fastidiado,antes había días en los que ni siquiera llegaba a casa a dormir,pero claro,su padre ni enterado estaba,desde que había asumido la presidencia de Avon,y Rebeca había llegado a su vida muchas cosas habían cambiado,su padre estaba siempre ocupado con el trabajo,además de estar perdidamente enamorado,que ya no pasaba tanto tiempo con su hijo menor,y el resto de su familia se había ido del nido,dejándolo solo.
Sus esperanzas se esfumaron cuando dos integrantes más se unieron a la familia,si antes no tenía tanta atención,ahora tenía menos por culpa de ellos.
Se acostumbró a volverse independiente,nadie le ponía reglas,todo era a su conveniencia,ponía una cara de niño bueno ante su familia,si es que quería algo se lo daban,recibió una tarjeta de crédito para que pudiera comprar lo que quisiera(gracias a Rebe),se escapaba en las noches para ir de fiesta con Diego,su padre no se dió cuenta nunca,el trabajo no le daba tiempo,siempre llegaba cansado a casa.
Él estaba bien así,le encantaba eso, ahí se refugiaba de la soledad que sentía,pero las cosas no duran para siempre.
La muerte de Rebeca había puesto más alerta a Pancho,cuidando más que nunca a sus hijos,tanto así que  descubrió más de una ocasión cuando temo intentaba salir, ahí fue cuando la máscara de niño bueno se esfumó,las peleas no tardaron mucho.

Y ahora su padre se creía con el derecho de reclamarle.

Ojalá Rebeca no hubiese muerto.

Ojalá él hubiera muerto,así podría estar con su madre.

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El primer capítulo lo publiqué un diciembre,y ahora vuelvo a escribir en otro diciembre,que cosas)?

Niño mimado|AristemoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora