Un después ...

Capítulo Diez

Naruto estaba sentado en una esquina de la sala mientras sus amigos jugaban a las cartas. Era la típica noche de viernes, donde todos se reunían en casa de Shikamaru para beber, fumar y pasar un buen rato.

No era que él estuviera de ganas, pero
Estar rodeado de sus amigos era mejor que estar  encerrado en las paredes de su habitación. Aún después de lo
Que había sucedido esa tarde.

La policía había aparecido en su casa para entregarle una orden de arresto domiciliario. Toneri había puesto una denuncia alegando que Naruto le agredió y no lo dejaba en paz. Además de ser la segunda vez que lo golpeaba.

Aquello posiblemente no terminaría muy bien, y a pesar de que quizás su relación con Hinata no estaba en buenos términos, tenía la certeza de que ella no lo abandonaría y mucho menos se iría en su contra.

O eso esperaba...

–¿Cuando será el juicio?– pregunto Sasuke mientras se acercaba.

–Mañana.

–¿Que piensas que pasara?

–Espero que nada. Confío en que Hinata no declare en mi contra.

Sasuke lo miró sin ninguna expresión. A pesar del mal entendido con Sakura, agradecía no haber perdido su amistad. ¡Que diferentes eran los hombres de las mujeres! No había nada que no se pudiera solucionar con algunos puños y algunas copas.

–Sera mejor que me vaya. Mañana tengo que levantarme muy temprano.– Naruto se puso de pie dispuesto a marcharse cuando Sasuke puso su mano en su hombro.

–Suerte amigo.

Naruto asintió y luego se marchó. Necesitaba descansar y esperar lo mejor. Si aquello salía mal podría terminar en la correccional al menos unos tres meses, lo cual empeoraría su currículum universitario. Ya había descuidado demasiado sus estudios como para que eso también lo jodiera.

Entro a su casa tratando de no hacer ruido, pero fue inútil. Su madre estaba sentada en el comedor frente a su computador.

–¿Donde Estabas?– pregunto mientras aún miraba la pantalla.

Naruto se acercó esperando que no le proporcionara otra cachetada como lo había hecho el día anterior. Su Madre dejó ver su decepción cuando los guardias le entregaban la orden.

–Solo estaba en casa de Shikamaru.

Kushina levantó su rostro y lo fulminó con la mirada.

–Sabes que todo lo qué pase en el día de mañana habrá sido a consecuencia de tu insensatez. Espero y puedas aprender a controlar esos impulsos.

Naruto no tenía deseos de ponerse a discutir con su madre, así que se despidió dándole las buenas noches y se marchó a dormir.

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Maldita aquella decisión de Toneri de recurrir a la justicia e involucrarla a ella.

Lo que  menos deseaba en aquellos momentos era ser partícipe de asuntos que involucrarán a Naruto.

Pero allí  estaba, en la  espera a que la llamara. No estaba muy segura de que le preguntarían pero esperaba sinceramente no perjudicar a Naruto.

El guardia que estaba detrás e la puerta la llamó y le indicó hacia donde
Tenía que ir.

Entro a la sala donde se encontraba el juez, los jurados y victima-atacante. Se paralizó al ver a Naruto sentado detrás de ese escritorio. Lucia tan guapo con aquella camisa formal.