Momo lo tiene todo, una chica muy ambiciosa e impotente, manipuladora que hace lo que se le antoje con sólo tener poder económico y por ser hija de uno de los Ceos más importantes de Japón se siente superior a todos
Dahyun una chica que lo tiene t...
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El fin de semana había llegado, Momo decidió salir un rato a hacer ejercicio, ya habían pasado unos días desde que Dahyun había estado muy mal, sus condiciones habían mejorado gracias a que Momo fue la que estuvo al pendiente para que se recuperará
Al principio Dahyun se le hizo muy extraño que la japonesa fuese de esa forma, no entendía por que lo hacia pero aún así dejó que ella cuidara de ella
Momo salio de la habitación ya puesta con su ropa de ejercicio y lista para así irse, fue al pequeño gimnasio del hotel en el que estaba, había un gran amplio salón para ejercitarse. Comenzó en la caminadora, a una velocidad suave y lenta luego de unos minutos comenzó a aumentar la velocidad y correr un poco más rápido
Descanso un poco y fue hacer un poco de cardio para brazos y piernas, cada vez comenzaba a sudar mientras hacía su ejercicio
Descanso otros unos minutos más para beber agua y luego elevó su vista hacia una persona en particular que la observaba, llevaba un suéter negro y su cabeza estaba cubierta por el gorro del mismo suéter también llevaba unos lentes negros
A la japonesa se le hizo muy curioso que aquella persona se le quedará viendo a cada momento
Momo dejó aún lado su botella con agua y fue hacer otros tipos de ejercicio, De reojo observaba como la misma persona aún la veía, para ella era algo extraño nunca antes le había pasado algo así, cuando dio por finalizado sus ejercicios observo a la persona donde había estado sentada pero ya no se encontraba, La busco con la mirada pero no la vio en ninguna parte, tomó sus cosas y salió de aquel lugar para dirigirse a su habitación, debía tomar un baño y poder desayunar que ya se estaba muriendo de hambre pero cuando estuvo apunto de tomar el ascensor de lejos vio a una persona exactamente igual a la que la estaba observando minutos atrás, cuidadosamente se acercó a esta y la hizo voltearse
—¿Que hacías observándome?—pregunto Momo alzando una ceja
—Mm...lo siento sólo fui y te vi ahí, no te estaba observando—se defendió la chica
—Pues no me convence, dime la verdad, me querías ver haciendo ejercicio ¿no es así Dahyun?—sonrió Momo al saber que se trataba de la peligris
—N-no...no era eso—negó rápidamente la menor sonrojándose
—¿Así? ¿Y por que debías estar bien encubierta como si no quisiera que te reconociera?—le hacia gracia ver como la menor se sonrojaba cada vez más
—E-es mejor v-volver a la habitación—dijo Dahyun evitando por completo a la japonesa
Ambas caminaron al ascensor y Momo sólo sonreía, no entendía la razón pero ella sonreía
