Momo lo tiene todo, una chica muy ambiciosa e impotente, manipuladora que hace lo que se le antoje con sólo tener poder económico y por ser hija de uno de los Ceos más importantes de Japón se siente superior a todos
Dahyun una chica que lo tiene t...
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El fin de semana había llegado, Momo se levantó temprano para ir al gimnasio que tenía el hotel
Salió de su habitación ya con su pequeña maleta con algunas cosas que necesitaría, iba a ir por su botella de agua cuando vio a la peligris dormida en el sofá muy cómodamente, se le hizo extraño en que no durmiera en su habitación y durmiera en el sofá
Momo se acercó lentamente a la chica y la vio por un par de segundos, se sorprendió un poco al notar que se estaba quejando, tal ves algún mal sueño la estaba atormentando
—No por Favor—la peligris se quejaba— ¡no!
En ese instante ella despertó agitada y con una pequeña capa de sudor, se asustó un poco al encontrar a Momo viéndola y retrocedió un poco
—Oye tranquila soy yo— hablo Momo
Dahyun trataba de respirar profundo para así tranquilizarse pero luego se levantó del sofá
—L-lo siento—dijo cabizbaja la menor
—¿Por que lo sientes?—pregunto Momo confundida
—Por nada—negó con su cabeza— p-pero por que me veías mientras dormía—alzó su vista hacia la japonesa
La japonesa desvió su mirada y río nerviosa
—Bueno sólo pasaba por aquí y te escuche hablar se me hizo extraño pensé que hablabas sola pero al parecer era algún sueño—dijo Momo sin mucha importancia
—¿Por que eres así?— Dahyun fruncio el ceño
—¿Ser como?—dijo la japonesa dirigiendo su vista a la menor
—Te expresas con poca a amabilidad, eres grosera y aparte te ves ridícula con los lentes—dijo Dahyun aún con su ceño fruncido
Momo abrió ligeramente su boca luego de escuchar eso y luego frunció el ceño
—Luego vienes a mi por que finjes estar preocupada por que hablo entre sueños—dijo Dahyun—que irónico ¿no?—sonrió
—Sólo trataba de llevar bien las cosas, vivimos aquí al menos sólo será por un tiempo no pienso quedarme por siempre en Corea— dijo la japonesa
—Así que lo haces para llevarnos bien— bufo la peligris y se cruzó de brazos—que bueno de tu parte me agradas sólo tal vez una micro parte por que tu actitud molesta a cualquiera—dicho eso se adentró a su habitación sin esperar a que la japonesa respondiera o dijera algo
Momo se acercó a la puerta y la golpeó dando una patada sobre la madera
—Para que quede claro ya no uso los lentes oscuros— dicho eso bufo y camino hacía la puerta y salio de ahí
Al menos el ejercicio la mantendría distraída un poco, al llegar al gimnasio empezó a dar vueltas por todo el lugar y a pesar de que ya se encontraba cansada ella seguía, al terminar su quinta vuelta se detuvo para beber un montón de agua y aunque su cuerpo doliera ella siguió, paso de correr por todo el lugar a golpear el saco de box, lo golpeaba con fuerza desahogando su enojo, le molestaba que la peligris le llamara ridícula ya que en varias ocasiones la había llamado de esa manera
