Soul art

Arte monocromático(Prólogo)

Una nueva y resplandeciente mañana hace presencia en la ciudad de Camden en Londres, donde se encuentra viviendo la familia más grande y alocada que podrías encontrar en esta o en cualquier otra ciudad, en la Calle Dálmatas 101 se encuentran estos 101 canes viviendo sin mayores preocupaciones.

Al apenas estar amaneciendo son los hermanos mayores los primeros en abrir los ojos, o en este caso el hermano mayor. Dylan como siempre es uno de los primeros en levantarse, asearse como es debido y proseguir a preparar la comida para sus 97 hermanos y hermanas, Delilah y Doug ya han salido ha trabajar en sus respectivas áreas, por lo que él estaría a cargo junto con su alocada hermana Dolly. Pero por desgracia esta última no se ha despegado de su cama aún, por ello Dylan decide ir a despertarla para que le eche una pata con el desayuno del resto de los cachorros.
- Oye Dolly, despierta hermanita, ya es de mañana y debemos servir el desayuno de los cachorros- dice Dylan con un tono suave y calmado, pues no quiere que su hermana se sobresalte y despierte agitada.
- Sólo.... 5 minutos más si?- dice la cachorra agotada, como si no hubiera dormido en toda la noche.
- Ay no, otra vez te quedaste hasta tarde practicando tus trucos con skateboard? Ya te había dicho que necesitabas dejar de hacer eso hasta la madrugada, o no tendrás una buena noche de sueño- dice su hermano algo decepcionado de la actitud inmadura de la dálmata, pero sin retirar ese tono calmado con el que se lo dice.
- Si si, hice mal.... Pero dame unos minutos más.... Dile a Dawkins que te ayude- responde la dálmata sugiriendo que su hermanastro solicite la ayuda del can más inteligente de la familia.
-Agh, bien, pero vendré a despertarte en 10 minutos- dice Dylan algo disgustado, pero igual aceptando la idea de su hermana.

Después de ir a buscar a Dawkins para que le diera una pata con el desayuno de sus hermanos, estuvieron listos en unos 10 minutos aproximadamente, con todos los platos servidos en la mesa, era el momento de decir la palabra clave.
- ¡DESAYUNO!- gritó Dylan, a lo que respondió una avalancha de cachorro en blanco y negro descendiendo las escaleras, y de un momento a otro todos los cachorros estaban comiendo, incluida Dolly, quien también respondió a la palabra clave.

Al estar todos disfrutando de un buen plato de croquetas, Dylan aprovechó el momento para pasar lista de todos sus hermanos, aunque no le tomó mucho tiempo sólo logró contar 96 cachorros, por seguridad volvió a contar otra vez, y otra vez, pero seguía dando la misma cantidad. Así que luego de analizar un rato se dió cuenta de quién faltaba, porque al mirar a la mesa se dió cuenta que faltaba cierta dálmata con manchas variocolor.
- Oigan, ¿alguien ha visto a Da Vinci?- ninguno de los dálmatas supo qué responder, pues ellos tampoco habían visto a la pequeña artista perruna en el rato de mañana que había transcurrido, por lo que Dylan decidió ir con Dolly, a buscar en cada rincón de la casa,  mientras Dawkins se quedaba a cargo del resto de los cachorros.

Dylan y Dolly se dividieron las partes de la casa para buscar a Da Vinci, estuvieron un largo rato buscando hasta debajo de las piedras del patio, en la casa del árbol de Dylan, el sótano, y cada uno de los cuartos de la casa sin resultado alguno.
- ¿Pudiste encontrar algo Dolly?- preguntó Dylan tomando aires de preocupación por la desaparición misteriosa de su hermana.
- Nada Dylan, esto es muy extraño, Da Vinci no suele desaparecer así- responde Dolly también preocupada.
- Nada hermano- responde la dálmata.

Ambos dálmatas estaban por decidir salir a buscar a su hermana al exterior, pero justo al descender por las escaleras , escucharon música proveniente del ático, lo que atrajo la curiosidad de los hermanastros.

- Qué raro, ¿habías escuchado esa música antes Dolly?- preguntó Dylan.
- No, ¿crees que sea DJ?- pregunta Dolly.
- Pues yo vi a DJ comiendo con el resto de los cachorros- responde el hermano- tal vez debamos ir a revisar.

Ambos canes suben al ático siguiendo el volumen de la música con su agudo sentido auditivo, tras unas cajas es donde el ruido era más fuerte, por lo que sin dudarlo van a investigar, al pasar a través de las cajas encontraron a Da Vinci, pintando en un lienzo enorme y la música provenía del teclado de DJ, los dos hermanos se impresionaron por el tamaño del lienzo, pero salieron del estado de shock para preguntar a Da Vinci si bajaría a desayunar.

- Hola Da Vinci,¿cómo estás hermanita?- preguntó Dolly.

Al no percatarse de la presencia de sus hermanos, Da Vinci se sobresaltó y se asustó considerablemente, por esto saltó del susto y se tropezó con uno de sus botes de pintura, de forma que terminó con el rostro contra el lienzo con pintura húmeda, ante esto sus hermanos se acercaron rápidamente a la cachorra para auxiliarla, cuando la ayudaron a levantarse notaron que la pequeña dálmata artista estaba agotada, con unas enormes ojeras que señalan que no durmió en toda la noche, y por estas razones el cansancio se hacía notar en su cuerpo, pues apenas podía mantenerse en pie.
- Da Vinci,¿por qué estás aquí?- preguntó Dylan sumamente preocupado al notar el aspecto deplorable de su hermana, mientras tomaba un paño para limpiar la pintura húmeda en el rostro se la artista.
- Lo siento Dylan *bosteza* estuve pintando.... Toda la noche- respondió la artista manchada.
- Da Vinci, en qué rayos estabas pensando, eres muy joven para estar despierta toda la noche- regaña Dolly a su hermana.
- Lo lamento..... Tuve que hacerlo- responde la dálmata tratando de no sucumbir al sueño y mantener los ojos abiertos.
- Muy bien Da Vinci, te vas a ir directo a la cama y después hablamos con mamá y papá sobre esto- dice firmemente Dylan.

Da Vinci sin rechistar se dirije a su habitación para dormir, claro que tuvo que ser llevada por Dolly en su espalda, pues no pudo ni caminar debido a todo el sueño. Antes de irse detrás de sus hermanas, Dylan admira un momento la pintura de Da Vinci, pero le resulta extraño, pues es lugar de tener colores vivos y llamativos es una pintura gris, negra e incluso le resulta deprimente, y en la esquina inferior derecha del lienzo está la huella de Da Vinci junto a un escrito.

"Sólo pinta por ellos"

Espero les haya gustado este prólogo, se vienen cosas muy interesantes a lo largo de la historia, y nos vemos pronto.

Gracias a loa integrantes del amino de Calle Dálmatas 101 por definir de quién sería la historia, y al integrante del amino Dante por las imágenes para la portada, los quiero y nos vemos pronto, byeee :3