Capítulo 1: No hay nada mejor

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¿Esto es un diario?
Espero que no, eso es de niñas. Mamá me regaló esto y dijo que en este cuaderno debía escribir todo lo que yo pensaba y todos mis sentimientos, lo que hay en mi corazón y claro, lo que pasó en mi día, pero... ¿Qué sentimientos puede tener un niño de 10 años? Lo único que me importa en estas fechas es comer, jugar con todo lo que Santa Claus me trajo, aunque... tal cosa me parece un poco tonta porque no sé como hacer para jugar con unos calcetines.
También me gusta mucho ir a las posadas, las cuales ya terminaron, pero solo voy para ganar muchos dulces en la piñata y a ver si puedo lograr que mi velita no se apague mientras voy caminando detrás de esos dos niñitos que cargan con esfuerzos dos muñequitos y un bebito de juguete, ¡qué tontos! Seguramente Ross y yo ya estaríamos jugando luchitas con ellos y tal vez ya les abríamos arrancado la cabeza.
Ross es mi mejor amigo, lo conozco desde que tengo 5 años, tiene mi edad y aveces no le gustan las mismas cosas que a mi, ¡pero los 2 juntos nos divertimos mucho!
Me encanta ir a su casa, ¡su mamá prepara las mejores galletas del mundo! Ella dice que Ross es muy lindo, pero cuando se enoja me da miedo, grita como si no pudiera volver a hacerlo, ella dice:
-¡Ross Shor Lynch, ven aquí en este momento!
Y regaña a Ross cuando hacemos algo malo. Aveces lo regañan por mi culpa, porque no recojo sus juguetes cuando me los presta o cosas por el estilo, en ese momento los dos corremos a nuestro escondite secreto, ¡es nuestra guarida! Pero la señora Lynch logra traspasar los fuertes muros de nuestra fortaleza y nos hace recoger el tiradero que hicimos.
Yo quiero mucho a Ross porque es el único que no me molesta en la escuela, y a pesar de que va en otro grupo, en el receso podemos estar juntos. A la hora de la salida me lleva a mi casa porque mi ya mamá confía en él.
Bueno nos vemos después diario mi mamá me está llamando para que valla a cenar.
Ya decidí como te llamarás: Ross, ese será tu nombre, porque mi mamá me dijo que te contara lo que sentía y lo que me pasaba, así que te llamarás Ross, así como a él le cuento todo, te lo contaré a ti.
Bueno pues es fin de año, ¿adivina quien está conmigo? Sí, es él, Ross está aquí conmigo porque nuestras familias se juntaron para la cena de fin de año, que está deliciosa. Hay bacalao, romeritos, pierna, pavo... ¡Deliciosa dije!. En fin, le conté que estoy haciendo un diario, me dijo que lleva unos meses escribiendo uno, ahora somos más unidos porque estamos compartiendo ideas para hacer que ustedes duren mucho. Él también puso nombre a su diario, ¡y se llama Austin! ¡Le puso mi nombre!
Sentí algo hermoso cuando me lo dijo, creo que de verdad le importo. Antes creía que sólo se juntaba conmigo por lástima o algo así, pero no, incluso, ayer me acompañó a sacar una copia a su candado y a su llave, yo no sabía que eso se podía hacer, me dijo que eso era algo muy especial para él, y que esperaba también lo fuera para mí, después de eso me ayudo a ponerte el candadito con unos clavos que sacó de una pequeña caja que tenía debajo de su cama, y ahora puedo tener guardados todos mis secretos bajo llave.
Me voy, diario.( ¡ya son las doce! Nos espera un largo año de aventuras al lado de Ross ¡Feliz año nuevo!

No sólo soy tu fanWhere stories live. Discover now