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Narradora:

Mitsuri Kanroji, es una chica de 25 años cuya profesión es psicología, ha tenido un pasado difícil, pero lo ha podido superar y desde muy joven a dado charlas ya sea de temas muy populares en las etapas de la adolescencia, busca ayudar al resto al saber que se siente no tener a nadie para ti o al sentirse vacío.

Eran las 5:30 pm, un miércoles en la escuela Kimetsu, era hora de psicología.

-Buenas tardes, pequeños~- dijo Kanroji con una voz dulce dirigiendose a sus estudiantes.

-¡Buenas tardes!- dijeron a coro los estudiantes.

-Yo seré su profesora de psicología Kanroji Mitsuri- Zenitsu se quedo pensativo, ese nombre se le hacia conocido.

-Daremos una charla, sobre un tema muy conocido entre los adolescentes como ustedes, hablaremos sobre la depresión, muchos hemos pasado por esa etapa, incluso yo, pero lo he podido superar, los síntomas de esta son la tristeza, ansiedad, irritación, algunos llegan a tener pensamientos sobre la muerte y el suicidio e incluso dormir mucho o la perdida del sueño-.

-¿Cómo se puede curar?- pregunto el Kamado alzando la mano.

-Se puede tratar, una persona así mecesita ayuda de un profesional, un psicólogo, nosotros nos encargamos de ayudar a las personas a ver la otra cara de la moneda- dijo la pelirosa mostrando una sonrisa, pero esta vez mirando a Zenitsu.

Narra Zenitsu:

La hora de psicología ya había terminado, era hora de irnos todos a nuestras casas, yo también iría sino fuera por que Mitsuri-sensei me llamó.

-Agatsuma Zenitsu, mucho gusto soy Mitsuri Kanroji, psicologa, seré yo quien te ayudará a ver el otro lado de la moneda, te enseñaré a ber la bueno de lo que tú vez malo- dijo con una voz suave y dulce.

-Mucho gusto, Mitsuri-sensei- tome asiento enfrente de ella, ya me había despedido de los chicos, baje la cabeza, me sentía un poco ansioso.

-¿Podrías hablarme del porqué de tu estado?- preginto ella, yo le conte todo de mi pasado y de mi, le conte que habia sido abandonado y sobre el bullyng que había pasado en mi escuela anterior, le hablé sobre el desprecio que me tengo, de mi baja autoestima, ella escuchaba todo en silencio y con una mirada firme.

-Vaya, sabes, me sorprende que haigas podido afrontarlo hasta ahora, creo saber el por que, es algo bastante duro y difícil, pero aun así lo hiciste- dijo ella.

-Usted por que cree que lo he podido afrontar hasta ahora- dije.

-Piensas que todo podría ser diferente en el futuro, tienes esa pequeña esperanza de que todo iba a cambiar- dijo ella agarrando mi mano.

-Yo...- las lagrimas comenzaban a salir de mis ojos- si-siempre he tenido esa esperanza, y no me arrepiento... He conocido a personas maravillosas, a unos buenos amigos, hacen que el infierno en el que me siento deje de arder.

-Hay personas que pueden hacerte tocar el cielo, siempre y cuando sean las personas indicadas, no estas solo, ya te diste cuenta de eso, ya no estas solo, pero si te ves a un espejo y empiezas a menospreciarte, harás que empeore tu estado, se felíz contigo mismo, eres muy lindo tal y como eres, te lo repetiría miles de veces- esta vez estaba llorando siendo abrazado por ella, sentí calidez, me sentí seguro, sentí un gran alivio al poder hablar con alguien sobre como me siento.

-Te has comenzado a sentir bien, ¿Verdad? Hablar con alguien sobre como te sientes no está mal, decir que estas triste no es malo, al contrario, es bueno- dijo con una sonrisa.

-¿Qué comes que adivinas?- dije secandome las lagrimas de mis ojos.

-Sabiduría, venga, esta ha sido nuestra sesión por hoy, ire a verte cuatro días a la semana, comenzaremos haciendo unos pequeños ejercios para que empieces a apreciarte a ti mismo- dijo dandome un fuerte abrazo, si que tenía fuerza.

-Hasta luego Mitsuri-sensei- dije en despedida.

-Solo llámame Mitsuri, nosotros tambien somos amigos- dijo esta vez yéndose a paso rapido hacia un chico de cabello negro largo, tal vez su novio, pero al recordar el anillo en su dedo anular deduje que era su esposo, se ven lindos juntos.

-¿Y tú que haces aún por aquí?- conocía esa voz grave a donde sea que vaya.

-Uzui-sensei...- dije en un susurro.

-Mmm.. ¿Me dirás que haces tan tarde aquí?- dijo un poco serio y curioso a la vez.

-Tenía una charla con la psicologa..- susurre, mi corazon latía muy rapido y sentía mis mejillas un poco rojas.

-Venga, ¿Te llevo?- dijo con una sonrisa un poco seductora.

-Con tal de que no tenga otras intenciones, acepto- dije con una pequeña sonrisa.

-¿Qué? ¡Claro que no!, ¿Qué cosas piensas mocoso?- dijo un poco nervioso.

-S-Se diferenciar los so-sonidos de su voz y adivinar lo q-que siente- dije un poco nervioso.

-No haría algo que no quisieras, ¿Vamos?- dijo mientras jugaba con las llavez de su carro.

-¿Acaba de confensar de que le atraigo?- dije en mi mente- Tonterías- susurre y comencé a caminar a su lado, sentía calidez siempre que estaba a su lado, tal vez... No, él es mi profesor, solo eso y nada más, ¿Verdad?.

"A veces nos enamoramos de personas que ni siquiera lo esperamos, sentir amor no está mal, como tampoco esta mal sentirse triste, siempre puedes contar con alguien".

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➡Ara, el primer día de nuestro rayito con la psicologa, nuestro bebé ya se siente, no mejor, pero si un poco aliviado de poder hablar con alguien y poder expresar lo que siente, no te impidas decir como te sientes a alguien, pero no es bueno mantenerlo guardado solo para ti.

➡Se vienen mas momentos entre Uzui y Zenitsu uwur, me dan ganas de darles un spoiler... Pero nell, mejor sigan leyendo.

➡G R A C I A S.

-Z.

▶D E P R E S S I O N◀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora