Cap4: La Venganza... Es Dulce... Y Fría... (Parte 4/8)

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Notando las plumas negras, Issei abrió ampliamente los ojos, casi aterrado, mientras retrocedía de un salto por instinto, alejándose varios metros de la chica de cabello rubio, quien miró a su alrededor confundida.

"Maldito! Responde! Que mierdas le hiciste a Raynare?!"
Una voz masculina, cargada de odio y furia, exclamó en un fuerte grito, e Issei alzó la vista, viendo que, encima de donde estaba antes, a varios metros del suelo, se encontraba un solitario hombre, vestido con una gabardina.

"R-Raynare?"
Issei preguntó confundido, y entonces, recordó a la asesina de sus padres, aquella mujer de cabello negruzco.

"Oh.... Mierda..."
Tras decir aquellas palabras, Issei tuvo que saltar nuevamente, para esquivar una lanza de luz, que se clavó donde él estaba de pie antes, para luego deshacerse, y desaparecer.

Alzando la vista hacia el hombre, y viendo cómo éste empezaba a crear una segunda lanza de luz, Issei empezó a considerar sus opciones.

Decir la verdad de lo que sucedió lo llevaría a una muerte segura, cosa que prefería evitar.

Decir que la mató, también lo llevaría a morir irremediablemente.

No podía inculpar a Rias, era su ama y él le debía como mínimo su lealtad real por lo que ella hizo por él.

Resignado, Issei entendió que sólo le quedaba luchar e intentar sobrevivir.

Viendo de reojo a la chica de cabello rubio, Issei le hizo una seña rápida de que escapase, y luego se impulsó a un lado, esquivando una segunda lanza de luz, que tampoco tardó en deshacerse.

Riendo de forma nerviosa, Issei miró al hombre, que furioso, ya estaba creando una tercera lanza.

Viendo ésto, Issei supo que tenía que actuar, pero no tenía nada a mano.

Frustrado, Issei se limitó a saltar, esquivando nuevamente la lanza. Sin embargo, un recuerdo, borroso y rápido, llegó a su mente.

Él había sido atravesado no por una, sino que por cinco de éstas lanzas de luz, y, de alguna forma, había sobrevivido...

No, el había revivido. Sabía que había muerto por ese ataque, pero aún así estaba con vida.

Una pequeña teoría se formó en la mente del joven de cabello castaño, y éste decidió quedarse quieto, y recibir la próxima lanza, dejando que ésta se clave directamente en su cabeza, literalmente partiéndola a la mitad.

Issei cayó al suelo por el impulso de la lanza, y salpicó el mismo con su sangre, mientras que su materia cerebral lentamente salía de su cráneo, como una extraña masa viscosa.

El hombre se acercó a Issei, y escupió sobre su rostro partido, antes de pisar su torso, sintiendo el quebrar de las costillas ante su golpe.

"Jum! Si murió tan fácil Raynare no debió haber tenido problemas con él. Entonces, cómo logró asesinarla?"
El hombre preguntó al aire, dándose la vuelta, dispuesto a irse, cuando de repente, sintió un firme agarre sobre su tobillo.

Girando su cabeza para contemplar al suelo, el hombre pudo ver, con horror y confusión, como lentamente una masa negra salía desde el cráneo de Issei, juntando los trozos de su materia cerebral y dejándolos en su lugar, mientras que su cabeza lentamente volvía a estar en un estado perfecto, y su mano sostenía con una fuerza abrumadora su tobillo, impidiendo que huya.

"Vaya.... Eso dolió... Mucho..."
Issei comentó, más para si mismo que para el hombre, que sólo podía ver con horror como el chico, tras decir esas palabras, le dedicaba una sonrisa, antes de usar su tobillo para empujarse, casi saltando, mientras empujaba al hombre al suelo, rompiendo su tobillo en el proceso, al mismo tiempo que conectaba un rodillazo en la boca del hombre, haciéndolo morder su lengua, y sacándole un par de dientes en el golpe.

El Dragón de la Ceniza [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora