Llegué hasta de nuevo con Levi.
-Oí mocosa, ¿y ahora que tramas?-. Me preguntó.
-Vamos a tu apartamento, yo... olvide algo ahí-.
-Sabes que no te creo nada-.
-Solo quiero ir a un lugar para charlar a solas y tienes razón, a estas horas de la madrugada es muy riesgoso estar fuera-. Ya no dejé que contestara, me subí al Uber, él solo suspiro y subió a un lado mio.
-Estas actuando raro ya enserio ¿que planeas?-.
-Levi, por favor, confía en mi-. Puse mi mano encima de la suya.
-Tch, como sea-. Él solo giro su cabeza a la ventana.
Llegamos al edificio y subimos a su apartamento.
-¿Ahora si me vas a decir que tramas?-. Se volvió a dirigir a mi con una mirada sumamente seria.
-Ve a tomar una ducha, ponte tu pijama y ve a recostarte-.
-De qué estas hablando mocosa ¿estas segura que no intentas violarme?-.
-Jajaja que gracioso-. Me acerqué a el. -No logras engañarme Levi, se que estas lastimado así que me encargaré de cuidarte.
-No necesito una niñera y ya te dije por décima vez que no es nada-. Me dio la espalda. Me acerqué y con mi pie lo empuje de la parte de arriba de su rodilla haciéndolo caer y que se quejara del dolor.
-Te dije-.
-Tch, enserio eres testaruda-.
-Mira quien habla-.
Narra Levi
Maldita mocosa, no es tan fácil de convencer, ella se agachó a mi lado y puso mi brazo encima de su hombro para ayudarme a parar, y comenzar a caminar y subir las escaleras.
-Te duele cuando apoyas tu pie ¿no es así?-. Me pregunto. -Ya no tiene caso de que me mientas-.
Suspire con pesadez. -Debí haberme lastimado el pie cuando te empuje, mocosa tonta, por tu culpa es que estoy así, no esperes un gracias por esto al contrario me lo debes-.
-Entonces soy yo la que debería dar las gracias-.
-Olvídalo, no quiero quedar viudo al primer día de comprometernos-.
-Aun o estamos casados-.
-Pero para tu suerte lo estaremos-.
-Si como no-. Dijo sarcástica.
Llegamos a mi habitación.
-No me digas, que también te vas a ofrecer a ayudarme en la ducha-. Le dije burlón.
-En tus sueños-. Mikasa se dio la vuelta, salió del cuarto y cerro la puerta.
Entré a mi baño para darme dicha "ducha", esa mocosa se preocupa demasiado, no has cambiado nada desde que eras una niña Mikasa, siempre preocupándote por los demás. Terminé de ducharme, y cambiarme, me acerqué a la puerta de mi habitación y la abrí para salir, pero al momento de abrirla Mikasa cayó de espaldas frente a mi, no fue un golpe como tal, estaba sentada frente a la puerta, tonta.
-Auch-. Dijo Mikasa al momento de caer.
-Tu tienes la culpa-.
Ella se levantó y salió por algo fuera de la habitación, regresó con una taza con un liquido cafe crema, no tenía idea de lo que era.
-Más te vale no haber desordenado mi cocina-.
-Tranquila cenicienta, dejé todo como estaba-. Contestó mientra ponía la taza en la mesita a lado de mi cama.
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Miradas Frías
FanficMikasa es una nueva estudiante junto con su hermano adoptivo y su mejor amigo en el instituto de Sina. La joven no creía que un cambio de escuela fuera a ser de mucha importancia en su vida y que un simple chico engreído y odioso para ella le fuera...