Sleep Next To Me 💫 »MinJoong«

Cap 14: 다 끝났어

🐱

HongJoong decidió, después de llorar en silencio algunos minutos frente a la escuela, que era hora de regresar a casa, pues Mingi no aparecería para consolarlo tal cual un príncipe azul lo haría.

Agarró el primer taxi que cruzo por la calle y se subió rápidamente, pues empezaba a hacer bastante frío y quería llegar lo más pronto posible a su hogar para poder llorar allí tranquilamente.

Por otro lado, Mingi empujó con fuerza el cuerpo de Jisoo, quien casi cae al suelo, sin embargo, la sonrisa malvada que apareció en su rostro no se borró en ningún momento. Yuna, quien había estado observando la escena desde lejos, se acercó a pasos largos y se abalanzó sobre Jisoo, golpeándola con todas sus fuerzas.

—¡¿Que mierda esperas, Mingi?! ¡Ve y búscalo! —Grito Yuna sin parar de golpear a la chica.

Mingi reaccionó y empezó a correr hasta la salida de la escuela, donde se detuvo para buscar con la mirada a HongJoong, a el cual logro ver cuándo se montaba en un taxi. Corrió hasta donde estaba estacionado su auto y se montó en el para intentar perseguir a el taxi, pero a mitad de camino se dio cuenta de que HongJoong simplemente se dirigía a casa, por lo que bajo la velocidad para evitarse una multa.

Al llegar a su hogar, entró rápidamente, encontrándose con HongJoong, quien lloraba desconsoladamente sobre el hombro de su madre mientras esté le abrazaba.

—HongJoong...—Murmuro Mingi mientras se acercaba. El mencionado se separó lentamente de su madre y seco su rostro con la manga de su traje

.—No quiero que vuelvas a dirigirme la palabra en toda tu puta vida, Song Mingi. —Dijo con sus últimas fuerzas, intentando no llorar ni mostrarse débil. El más alto no contestó, solo agarró su brazo y lo arrastró por las escaleras hasta lograr encerrarlo en su cuarto, donde hizo que el cuerpo de el más bajo chocara contra la puerta para acorralarlo y no permitirle escapar.

—No es lo que crees. —Dijo Mingi.

—Claro que es lo que creo, te besaste con la zorra de Jisoo en mi maldita cara después de haber estado bailando con ella en una posición bastante comprometedora. —Escupió con rabia mientras movía sus extremidades buscando su libertad.

—Quédate quieto. —Ordenó con aquel tono demandante que enloquecía a HongJoong, por lo que se detuvo y agachó su cabeza, pues no quería ver su rostro y acabar cediendo ante los encantos de el pelirrojo. 

—Jisoo me dijo que si bailábamos así, te daría celos y...—Se detuvo al ver que el castaño no lo miraba, por lo que tomó su barbilla y levantó la cabeza contraria. —...Jamás quise besar a Jisoo, en estos momentos, solo estoy rezándole a todos los dioses existentes para que me dejes besarte y olvidarme de esa chica.—Dijo en un tono suave que acabó por derretir a HongJoong, quien no pudo evitar sonrojarse ante sus palabras.

—Todo es mi culpa. —Murmuro el castaño, dejando su orgullo atrás y, al fin, cediendo ante el menor.

—Lo siento. —Contesto Mingi, uniendo sus labios para poder besar a HongJoong y olvidarse de una vez por todas de el recuerdo de Jisoo. El beso rápidamente se tornó más salvaje de lo que ambos esperaban, y las manos de Mingi no tardaron en bajar a el trasero de el castaño, donde lo acarició suavemente, deleitándose con la sensación que tocar a su adorable novio le producía.

Bajo sus malos hasta los muslos de el contrario, y con un poco de fuerza lo alzó, haciendo que este rodera su cintura con sus piernas, permitiendo que las erecciones que empezaban a crecer en sus entrepiernas, hicieran fricción. Apoyo la espalda de el mayor contra una de las paredes que se encontraba junto a la puerta y sin separar en ningún momento sus labios, empezó a mover sus caderas, simulando embestidas contra el miembro contrario en busca de más fricción. Sin embargo, aquel apasionado momento se vio interrumpido cuando alguien abrió la puerta, sorprendiendo a los dos adolescentes en aquella situación muy prometedora.