Siete.

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Déjalos decir que son señales de advertencia. Deben estar ciegos.

Balanceando sus manos entrelazadas, Luda y Eunseo salieron juntas a punto de cruzar las puertas de la escuela, rumbo a otra de sus salidas.

_ Hola Luda, ¿Podemos hablar por un segundo? _ Oyeron una voz suave a sus espaldas.

A punto de detenerce, Eunseo fue empujada a seguir caminando, mientras Luda le susurraba _ No te des la vuela, sigue caminando.

_ Luda por favor _ Suplicó la niña detrás de ellas.

Suspirando, Eunseo tomo el brazo de Luda, haciendola detenerse, mientras decía débilmente _ Deberías ir con ella. Está bien, te esperare allí _ Eunseo tomó el rostro de Luda y la tranquilizó, antes de darle un poco de espacio y caminar hacía su motocicleta.

_ ¿A dónde van chicas? _ Preguntó Bona, preocupada por su mejor amiga.

_ No es asunto tuyo _ Espetó molesta Luda.

_ Ya casi no me hablas, ¿No crees que es injusto?

_ ¿Qué? Tu eres la que continúa intentando separarme de ella, yendo con mis padres y diciéndome que no es buena para mi cuando ni siquiera la conoces _ Argumentó aún más frustrada Luda.

_ Solo estoy preocupada por ti, Luda _ Afirmó Bona, intentando comunicarse con la niña obstinada.

Al escuchar su confesión, Luda se burlo, preguntándose si había algo de verdad en sus palabras.

Enferma de gente que no la dejaba tener su espacio, Luda admitió _ Ya no necesito que te preocupes por mi. Soy mi propia persona, capaz de tomar mis propias decisiones y consciente de lo que es o no bueno para mí.

_ Te digo que esto no va a terminar bien, Luda _ Advirtió Bona, cambiando a un tono más serio.

_ ¿Qué se supone que significa eso? _ Preguntó Luda frunciendo las cejas.

_ Quiero decir, no puedes tener a las dos _ Aclaró Bona, por más que doliera continúo _ Solo puedes tenerme a mi o a ella, no a ambas.

_ Bona, por favor dime que en realidad no estas haciendo esto ahora _ Dijo Luda tomada por sorpresa al escuchar la petición de su mejor amiga.

_ Lo hice. Entonces, elige. Ella o yo.

Sintiéndose cohibida, Luda miró a su alrededor, notando que la gente había empezado a mirarlas. Ella trató de ignorarlos, pero habían atraído a una multitud grande, que ahora estaban enviando mensajes y tomando fotos del enfrentamiento de las mejores amigas populares de la escuela.

Luda pensó por un segundo.

Realmente nunca creyó que este día en el que tendría que tendría que tomar una desición como esa llegaría alguna vez.

Pero desafortunadamente llegó. Y su mundo entero parecía derrumbarse.

Ella consideró sus opciones. Su mejor amiga desde siempre, que siempre había estado a su lado, exepto ahora cuando más la necesitaba. Y su novia, que parecía ser un problema, pero que en realidad fue la persona que la ayudo a encontrarse a si misma y la que le dio la oportunidad de vivir verdaderamente.

Luda se dió cuenta que, en última instancia, elegiría a Eunseo.

Mientras que Bona era su mejor amiga, también era una de las personas en su vida que la detuvo de ser su verdadero yo, aunque no fue intencional.

Sintiéndose culpable, pero sabiendo que su elección era la correcta, Luda respondió _ Lo siento, Bona, pero sin duda... ella. En cualquier momento.

Cuando Luda se dió la vuelta para escapar hacía Eunseo antes de que las lágrimas cayeran por su rostro, Bona la detuvo y exclamó _ No puedo entenderte ¿Por qué te gusta tanto?

Llegando a su punto de ruptura, Luda espetó _ No lo se, ¿Está bien? Solo hay algo en ella que no entenderías, me hace sentir tan... viva.

Con las lágrimas rodando por sus mejillas, Bona presionó _ ¿Por qué yo no? ¿Qué tiene ella que yo no? ¿Qué puede darte ella que yo no pueda?

_ Algo diferente, emoción, felicidad _ Admitió.

Luda observó a su amiga, con quién creció llorando, dándose cuenta que la niña a la que consideraba su hermana, realmente sentía algo por ella.

Bona hizo una pausa y se limpió las lágrimas de las mejillas mientras luchaba por apartar los ojos del suelo _ ¿Qué le paso a la Luda que conocía? ¿Con la que crecí? ¿De la que me enamoré? _ Preguntó débilmente, sintiéndose totalmente expuesta ante los ojos de buitre de las personas a su alrededor.

Luda hizo una mueca cuando se confirmaron sus sospechas. Sin embargo, eso no cambió nada y siguió firme con su desición.

Intentando presentar una actitud valiente, respondió fríamente _ Ella creció... y cambió.

Con las lágrimas cayendo por sus mejillas Bona pregunto por última vez _ Después de todo lo que hemos pasado, ¿Realmente te estas rindiendo y la eliges a ella?

Dejando escapar unas lágrimas, Luda se disculpó mientras le dolía el corazón _ Lo siento, te mereces una mejor amiga, pero ya no puedo seguir haciendo esto, siendo la chica perfecta, fingiendo que no odio mi vida. No quiero perderte así, pero...

_ No, vete _ Dijo Bona por última vez _ Ve con ella, pero ten cuidado. Y no digas que no te lo advertí.

Sintiéndose culpable, Luda asintió débilmente, disculpándose una vez más _ Lo siento por todo _ Quería desesperadamente abrazarla por última vez, pero se contuvo, sintiendo que no estaba bien.

Dando una última mirada de disculpa a su mejor amiga, Luda se dió la vuelta y salió corriendo por las puertas de la escuela hacía su novia, que la esperaba en si motocicleta.

_ Oye, ¿Está todo bien? _ Preguntó Eunseo mientras acunaba la cara de Luda y acariciaba suavemente su mejilla, sintiendo las lágrimas.

Haciendo todo lo posible por dejar de llorar, Luda dijo _  Vamonos, simplemente salgamos de aquí.

Sintiendo que algo estaba mal, Eunseo obedeció y las dos chicas se alejaron, mientras Luda escondía su rostro en el cabello de Eunseo, aferrándose a su cuerpo.

Y entonces, Bona se paró allí entre los demás estudiantes, viendo como su mejor amiga, su primer amor, la dejaba atrás.

Dangerous; eunluDonde viven las historias. Descúbrelo ahora