𝐁𝐋𝐎𝐎𝐃𝐘 𝐇𝐄𝐋𝐋 ⸺ 𝗕𝗜𝗟𝗟𝗬 𝗟𝗢𝗢𝗠𝗜𝗦

2 ━ friends.

AMIGOS.

. . .

La castaña abrió la puerta de los baños de manera cuidadosa fijando primero el rostro sin hacer tanto ruido de su parte pues desde el lugar donde estaba se escuchaban unas acusaciones por parte de dos compañeras de instituto hacía lo sucedido anteriormente con su hermana y Sidney.

— ¿Así que creen que ella lo hizo? — preguntó entrando finalmente con cinismo notorio en su tono y sus gestos, la rubia giró hasta su amiga viéndose entre sí para después rescatar y sentirse en confianza con Becker, asistieron explicando su teoría hasta que Rose se acercó hasta ellas soltando un golpe en su mejilla de manera desprevenida.

Ambas se quejaron saliendo rápidamente de los baños mientras que la castaña sonreía victoriosa viéndose al espejo y después su mano la cual tenía los nudillos rojizos. Abrió la llave del agua para después respirar fuertemente y lavar su rostro con un poco de líquido.

La puerta del baño se abrió haciéndola ver por el retrovisor notando que Sidney salió con los labios apretados intentando sonreír incómoda pues estaba escuchando toda la conversación que las tres habían tenido hace unos cuantos minutos atrás.

— ¿Cuál es tu plan? — preguntó la morena dejando de sonreír haciéndo a Rose sonreír con medio rostro y cerrar la llave girando hasta ella recargando su cuerpo en la fría pared que estaba detrás de ella.

— La casa de Casey tenía cámaras, de precaución sin que nadie supiera. — respondió alzando los hombros dejando de sonreír al igual que la otra castaña, rápidamente colocó su rostro de confusión ante el supuesto ‘ plan ’ que tenía la menor de los Becker. Preguntó el porqué de sus cámaras sacando ahora una confusión ante Rose haciéndo la misma mueca. — Cuando supe que se quedaría sola, las usé de precaución.

— ¿Por qué no dejas que la policía se encargue, y listo. No tendrías que regresar allá. — se acercó hasta ella aún confusa recargando sus manos en el lugar donde estaban los lavaderos viéndose directamente a el espejo, Rose hizo lo mismo pero en vez de verse a sí misma se centró en su compañera de baño.

— Porque quiero justicia, al igual que la ubiese querido tu madre. — finalizó tomando su mochila que estaba tirada en el suelo lista para salir definitivamente de los baños. Sabía que el truco usado con la castaña era sucio pero también podía ser útil.

— ¡Mi madre ya tiene justicia! — el comentario que hizo la castaña detuvo en seco que Rose pudiera salir de la habitación, se dió la vuelta viendo que Sidney ahora la veía directamente y muy molesta. Becker pintó una sonrisa en su rostro cerrando la puerta que había abierto.

— Pero ahora no estás segura, ¿cierto? — dijo Rose arrancando el papel que estaba de muestras cerca de las llaves finales, se dió media vuelta abriendo la puerta.

— Acepto.

Esta vez, la castaña solo asintió para ella misma saliendo definitivamente de los baños dejando sola a su nueva compañera de crimen. Caminó hasta las escaleras saliendo por fin de el campus de la preparatoria, topando con la reportera que hace poco había sido golpeada.

La rubia se acercó hasta ella con un micrófono en sus manos mientras que la castaña intentaba salir de las calles definitivamente. Para cuando se dió cuenta una cámara y la chica estaba al frente de ella preguntanfo cosas.

Rodó los ojos lamiendo sus labios regresando de nuevo a la preparatoria deteniendo a los medio pues era la barrera que no podían pasar, el sondio que se hacía de abriéndose la puerta se escuchó desesperado haciéndo salir de prisa a Sidney deteniéndose al topar con el cuerpo de Becker.

— Está aquí, Rose. — tomó del brazo a la castaña volviendo a correr con desesperación en sus gestos y palabras, por más que la chica intentó detener a su compañera no pudo hasta que salieron por la parte trasera del Instituto.

— No sé, tal vez fue un estudiante. — respondió Becker alzando los hombros caminando a un lado de Sidney después que le había contado su pequeño encuentro con el ‘ asesino ’ en los baños después que ella salió de ahí. Patterson hizo una mueca de no creer lo que decía y aclarar que esa teoría no le parecía concreta. — Piensa, el asesino sabía que ni yo ni mis padres estaríamos en casa.

— No tienen lo necesario para matar, para hacerlo sé necesitan agallas. — al fin se pudo tranquilizar por unos momento caminando al igual que Rose, respiró profundo soltando fuertemente el aire que sus pulmones habían guardado.

— Sí era el verdadero debes cuidarte, sabe que tenemos grabaciones. — tomó de el agua que tenía en su bolso deteniéndose al caminar dejando que la otra siguiera su camino por unos paso adelante.

— Tu también, Rose. Deberías venir conmigo y los Riley — propuso Sidney volteando a un lado notando que su compañera no estaba haciéndola girar viendo como tomaba agua y negaba acercándose nuevamente a un lado de ella.

La rubia amiga de Sidney se acercó preocupada preguntando más cosas que una reportera buscando una historia, nunca había tratado con ella pero se veía la preocupación que le tenía a su amiga cuando propuso que seguro irían hasta a el baño juntas.

— No sé lo que hicieron, pero gracias. — un rubio tirando al castaño se acercó dando tres flores a cada una, sin importar que a Rose ni siquiera la conocía en ningún sentido, pintó una leve risa en ambas. — ¡Fiesta en mi casa para celebrar!

— Hey, Tatum — Sidney detuvo ambos rubios, incluyendo a la castaña con su llamado de atención hacía ellos. — ¿Rose se podría quedar por unos días en casa? Por si acaso. — preguntó aumentando el color de la chica, ty le dió una mirada y después sonrió asintiendo con la cabeza, definitivamente le caía bien la chica.

Sin que Rose pudiera hablar y protestar que no era necesario quedarse en su casa, ya tenía una invitación a una fiesta de noche y las dos chicas se habían subido al coche despidiéndose con las manos y una sonrisa amable.

— ¿Vamos juntos? — Rose dió un leve salto al voltearse para seguir su camino y escuchar la ruda voz de lo que parecía ser, Billy Loomis.