Wooseok escuchó al camarero, sin poder creer que su vida se hubiera simplificado tan dramáticamente.
—Cuándo llamó?
—Hace unos minutos. No le traje el teléfono por que no lo vi por acá.
Wooseok sintió un gran alivio. El chico no iba a ir. Ya no era una amenaza. Había decidido dejar correr el asunto. Sonrió mientras sacaba un billete de su billetera y se lo entregaba al camarero.
—Che pibe, gracias por transmitirme el recado.
Mientras guardaba el billete en su bolsillo, el camarero sonrió.
—Al parecer son buenas noticias.
—Muy buenas.
—Me alegro —replicó el camarero, alzando el pulgar antes de irse.
Wooseok apenas tuvo tiempo de asimilar el giro de los acontecimientos antes de que el teléfono móvil que llevaba en el bolsillo empezara a soñar. Lo sacó y lo abrió.
—¿Sí? —preguntó, tapándose un oído con la mano para tratar de escuchar por encima de la música.
—Me acaba de llegar el mensaje de Lee.
Se tensó de inmediato al oír a su secretaria, Doyeon.
—¿Qué mierda quiere ahora?
—Me pidió que te diga que tuvo que irse y no va a volver hasta el día de Navidad. Parece un problema familiar.aLee estaba jugando, y Wooseok lo sabía. Por una parte, admiraba el valor del hombre al dejar que la fusión se retrasara un par de días, pero por otra, no le gustaba nada qu tratara de manipularlo.
—Mira vos che.
—Me dijo que lo verá en la fiesta de Navidad.
—Buenísimo —murmuró Wooseok—. Llamalo ya mismo y decile que no. No me importa dónde este, pero decile que no voy a esperar hasta navidad.
—Pero me dijo...
—No me importa lo que te dijo —dijo Wooseok firmeza —. No te dejes chamuyar.
—Esta bien. ¿Pudo hacer algo con el lío de su hermano?
—Vine a encontrarme con el hombre para tratar las cosas.
—¿Utilizaste con él el famoso poder de persuasión de los Yang?
—Sólo pretendo hacerle entrar en razón, Doyeon.
—Si podes manejar las cosas con Lee, podes con el azafato.
—Ese problema con el azafato ya está arreglado.
—Nisiquiera le voy a preguntar como lo hizo. No quiero saber los detalles. Pero son buenas noticias, desde luego.
Wooseok vio por el espejo que Jinho se acercaba.
—Sí, muy buenas noticias —contestó—. Ahora ponete en contacto con Lee y trasmile mi mensaje.
—Sí, señor.
Wooseok cerró el teléfono y se lo guardó en un bolsillo, pensando en esta persona que no había conocido y que nunca llegaría a conocer acababa de hacerle un auténtico favor esa noche. Por que debido a el había acudido a aquel lugar. Y ahora, debido a los juegos de Hui, tenía algo de tiempo para pasar el rato.Mientras seguía los movimientos de Jinho, comprendió que hacía mucho que no pensaba en tener algo más con un hombre que lo evidente. Mucho tiempo. Pero ahora se sentía casi como un adolescente con las hormonas en plena acción. No recordaba haberse sentido así desde que estudiaba en la universidad.
La sonrisa que le dedicó Jinho al volver a ocupar su taburete lo alentó aún más.
—Se nota que este lugar es re conocido —dijo Jinho, mirando a su alrededor.
—¿Querés bailar? —preguntó Wooseok.
El nombrado echó una mirada a la pista de baile, donde las parejas se movían frenéticamente al ritmo del potente sonido de la batería y las chillonas tarras eléctricas.
—Nunca me había llamado la atención baliar canciones como esa. Este ruido puede matar a las plantas seguro.
Wooseok sonrió y sintió que la tensión acumulada a lo largo del día empezaba a desaparecer. Pero cuando Jinho le devolvió la sonrisa una tensión más sutil empezó a crecer en su interior.
—¿Te parece si nos vamos a un lugar en el que podamos hablar y escucharnos? — preguntó impulsivamente.
Jinho se encogió los hombros.
—No sé.
Sintió que Jinho dudaba y de pronto se encontró tratando de de conocerlo. Allí estaba él un hombre acostumbrado a cerrar tratos de millones de dólares a base de presión y amenazas de abandonar las negociaciones, tratando de convencer a una hombre para que lo acompañara.
—Mira, yo se que no es bueno salir con un desconocido, pero podemos ir a un lugar público dónde la música sea mejor y donde podamos charlar un poco para conocernos.
—Pero tu amigo va a venir...
Wooseok hizo un gesto con la mano, como quitándole importancia al asunto.
—No va a venir.
La música se interrumpió justo cuando Jinho dijo:
—Es una lástima.
—Yo se lo agradezco — dijo con sinceridad—. No era un encuentro que quería hacer.
—¿ Y eso es todo? —preguntó entrecerrando los ojos.
—Eso espero.
—Eso es todo —repitió Jinho.
Bebió el resto del trago mientras Wooseok comprobaba que empezaba a ponerse nervioso. Quería que Jinho fuera con él a un lugar en el que pudieran estar más tranquilos. Y sabía que estaba violando una verdad básica en toda negociación: nunca había que implicarse emocionalmente con el resultado. De lo contrario, se negociaba desde un plano de debilidad. Mientras miraba a Jinho, la curva de su cuello, los delicado mechones de pelo que acariciaban la blanca piel de sus sienes, supo que su implicación era un hecho.
Y aquella admisión hizo que se sintiera aun mas nervioso.------------
AAAAAAAAHSHDURIFBDIWOEEVE PERDÓN POSTA NO QUE DECIR POSTA PERDÓN POR ATRASARME PERO LES QUIERO DECIR QUE TENEMOS COME BACKKKK DE PEBTAGOKMNNNNDNDNDNDKDNENEK.
POR FA DENLE MUCHO AMOR, JUNTEN MÁS VOTOS EN IDOL CHAMP YA QUE TV SHOW NO ESTÁ TRANSMITIENDO, JUNTEN SU PLATITA PARA COMPRAR ESTE FULL ÁLBUM POR DIOSSSSSS.
STAN TALENT, STAN PENTAGON.
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' meramente personal ' ; wooho
FanfictionCuando un fax de ruptura llegó a casa de su amigo Changgu, Cho Jinho apenas fue capaz de creer lo que leyó en él. Pero no estaba dispuesto que Mister Alto, Rico y Encantador destrozara la vida de su amigo así como así. Antes pensaba darle algunas le...