9

2 0 0
                                    

2012,  29 de septiembre - EL PASADO

Faltaba cada vez menos para tener que volver a París junto a Thomas y para alejarme de Marina. Ella volvería a España también junto a su madre. No quería separarme de ella, hacía poco que habíamos iniciado algo hermoso y ya tenía que dejarlo ir hasta no sé cuánto tiempo. Ahora me encontraba con Marina desnuda en mi pecho mientras jugaba con mis dedos y yo observaba ese juego de pequeños toqueteos y enredos. Sé que ella recuerda que tengo que marcharme al igual que ella, que tenemos que apartarnos, pero ambos sabemos que no queremos que sea así. La ventana se abría y se cerraba por el viento fresco que entraba a través de ella lo que con un pequeño golpe sobre la pared me trajo a la realidad a la vez que Marina me llamaba.

—¿Sí, Rin? —Me gusta llamarla por ese apodo que había inventado para ella.

—No quiero separarme de ti. No quiero irme a Extremadura otra vez, quiero quedarme contigo.

—Lo sé. Yo tampoco quiero irme a París nuevamente, y solo quedan pocos días para que eso suceda.

—Lo sé, solo que simplemente lo odio.

Hay un silencio entre los dos, no era incómodo, más bien necesario. Necesito organizar mi cabeza y mis ideas, quiero solucionar todo esto o hacer algún tipo de magia para poder quedarme. Ella tiene la mirada ida, como si también estuviera pensando al igual que yo o tal vez solo es mi imaginación. Entonces, ese silencio se rompió rápido.

—¡Ya sé! —Expresó Rin saltando de la cama dejando que sus intimidades estén a la vista nuevamente para mí.

—¿Qué sabes?

—Ya sé qué hacer para que eso no pase.

—No sé a qué te refieres, Rin —Realmente estaba confundido.

—Puedes quedarte a vivir aquí conmigo, le pediré un departamento a un amigo y problema solucionado, ¿qué piensas?

—¿Estás hablando de irnos a vivir juntos?

—¿Por qué no? Después de todo yo te amo y tú me amas, ¿no es cierto?

No sé qué responderle, mi cabeza está procesando mil cosas en este momento. ¿Qué pensará Thomas de esto? Pero... Después de todo, yo la amo con todo mi corazón. Tiene razón. Además, no quiero separarme de ella.

—¡Vamos a hacerlo! Vayámonos a vivir juntos, Rin.

Ahora ella se dirigiría a hablar con su amigo para arreglar las cosas. Mientras yo, por supuesto, debería comunicárselo a Thomas. No sé cómo se lo va a tomar pero sé que debo decírselo. Él espera a que yo regrese de Florencia y además es mi mejor amigo, no puedo ocultarle esto.

—¿Oui?

—¡Thomas, mon amie!

—Ían, amigo ¿cómo has estado? Ya falta poco para volver a verte y celebrar tu cumpleaños.

—Yo bien, gracias. Y sí, sobre eso... —pausa.

—¿Qué pasa?

—Es que creo que voy a quedarme un poco más, ¿sabes?

—¿Más tiempo dices, cuánto? ¿Unos días más?

—No, más que eso —Vuelvo a hacer una pausa, mi voz cambió—. Me quedaré a vivir aquí.

Una pausa se produjo del otro lado del celular. Thomas no respondía y sabía que no iba a esperar un festejo como reacción de su parte luego de esto. Suspiró y al fin habló.

—¿Hace cuánto que tenías pensado esto?

—Realmente hace unos minutos. Con Marina lo hablamos y...

—Espera, ¿vivirás con Marina? Ían, apenas se conocen.

—Sí, viviré con ella. Sé que apenas empezamos a salir pero siento que la amo, Thomas. Demasiado, y no necesito conocerla más porque ya la conozco.

—¿Con estos pocos meses ya la conoces?

—Así es. Pero no creo que lo entiendas.

—Realmente no, quiero decir, sé que te gusta, bueno, la amas y demás pero... No creo que la conozcas en todas las facetas en realidad, Ían. No puedo creer que te haya convencido de eso. Entonces, ¿ quiere decir que dejarás tu excelente trabajo aquí en París también, solo por alguien que estás hace poco tiempo y poco conoces a pesar de amar?

—La conozco, Thomas, ¿está bien? Solo porque no la conoces como lo hago yo no puedo decir esas cosas, y sí, también lo dejaré, al igual que todo —ya me estaba molestando esa actitud suya.

—Bien, bien. Solo... Espero equivocarme en lo que digo —pausa larga—. Bueno, adiós amigo. Sé feliz.

—Gracias, Th... 


Ya había cortado. Pero no podía sentirme mal y a la vez enojado por sus palabras hacia ella, después de todo no la conocía como yo, ella es alguien genial y hermosa. Pero bueno, si mi amigo realmente no me apoya al diablo. La tengo a ella y no me falta nada más. 
Rin me contó finalmente que mañana veremos el departamento para poder mudarnos, me siento feliz de poder estar junto a ella ahora más que antes. Ahora daremos un paso más como pareja, y sí sé que estamos hace poco tiempo pero el amor fue más fuerte que todo y ganó la jugada. El amor me ganó de mano y lo respeto, sé que Thomas se equivoca con respecto a lo que dice sobre esto. Sé que tengo que encontrar empleo aquí y demás pero no me será difícil, además gracias a la ayuda de los amigos de Marina será más fácil todo. Comenzaré a acomodar toda mi ropa y las maletas que traje así ya estará todo más pronto y ella cuando regrese de su padre haría lo mismo pues estaba feliz bailando al rededor de la habitación celebrando a su manera de este paso nuestro. Ahora inicio una vida nueva al lado de una hermosa chica, ahora siento que mi verano será eterno y estoy en la verdadera ciudad del amor con ella.

La ciudad de mi amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora