Ya que me tocaba el primer turno subí corriendo las escaleras que me llevaban a la terraza en donde próximamente me dirigí al bosque, estuve vagando sin rumbo por horas, iban a ser las 11 de la noche si no es que mas, así que decidí regresarme al internado, iba cerca hasta que comencé a sentir un aroma que hace tiempo no sentía tan cercano, humanos, mis ojos se abrieron como platos y comencé a correr hasta el internado.
Hasta que sentí que una daga atravesaba mi espalda.
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Chica Autoestima -PAUSADA EN EDICIÓN-
Teen FictionA veces solo me gustaría ser hermosa y libre como una mariposa. Estamos entre ustedes simplemente no se dan cuenta