CAPÍTULA IV

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¿No les a pasado, que día con día solo se despiertan porque saben que verán a su persona?
A esa persona que con solo una mirada cambia tu día entero, a esa persona que te hace vibrar con su voz, esa persona en la que podrías sumergirte en su perfume...

Pues a mi me está pasando, lo único que quiero todos los días es ver a Salomé, ella, ella, es mi persona.

Los cinco días de la semana me toca darle clase al grupo de Salomé; pero cada tarde que termino de trabajar, se pasan los segundos como horas y lo único en lo que pienso es volverla a ver.

Pues hoy por fin, ya es el día de volverla a ver. Hoy conoceré un poco de sus habilidades en la música.
Muero de curiosidad, por saber que me presentará, si tocará alguna pieza en un instrumento, si solo cantará, si bailará, o no lo sé.

Estoy caminando por los pasillos de la Institución, dirigiéndome al aula de 3ro B...

Cuando por fin entró al salón, me encuentro con Salomé, ella se encontraba tranquila, y se veía algo segura de sí misma, y al parecer estaba memorizando algo, se veía tan tierna, que tenía ganas de devorar sus labios a besos

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Cuando por fin entró al salón, me encuentro con Salomé, ella se encontraba tranquila, y se veía algo segura de sí misma, y al parecer estaba memorizando algo, se veía tan tierna, que tenía ganas de devorar sus labios a besos.

Cuando por fin entró al salón, me encuentro con Salomé, ella se encontraba tranquila, y se veía algo segura de sí misma, y al parecer estaba memorizando algo, se veía tan tierna, que tenía ganas de devorar sus labios a besos

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-Buenos días, nos dirigimos al aula de practica musical, por favor- dije cortante. Todos mis alumnos se veían tímidos, vergonzosos o serios, pero Salomé, Salomé se veía emocionada, monstrando la sonrisa ladina que ya había visto antes.
Yo veía como todos los alumnos salían, hasta que solo quedó Salomé, ella buscaba algo en su mochila, o eso creo.

-Date prisa Salomé...- dije frío, en verdad no quiero que sospeche mi amor por ella.

-Si- ella dejó de hacer lo que hacía y apresuradamente ella salió del aula.
Caminábamos ella y yo, por los pasillos, yo caminaba firmemente y con la cabeza en alto, ella también pero con la cabeza gacha. Quería preguntarle que tenía pero no me salían las palabras, ella se veía tan triste, que quería abrazarla.

        ¿Qué tienes Salomé?- Pensé

-Estoy nerviosa profesor. Realmente espero que le guste- ella respondió sin verme a la cara. Y sin dejarme responder entró al salón de prácticas.

¿Cómo es posible que ella leyó mi mente así? Estoy seguro de que yo lo pensé, no había formulado ninguna palabra... y solo... ella me respondió.

Entré al aula. Aquel salón tenía diferentes tipos de instrumentos, algunas butacas y banquitas, un escritorio hasta en frente y un pizarrón blanco.
Busqué con la mirada a Salomé, ella me observaba, a lo que me dió mucho gusto.

Iban pasando los minutos, se presentaron varios estudiantes, incluso ya se había presentado Han Bin, quien realizó un acto impecable tocando el piano, que por cierto me sorprendió mucho, pero yo solo esperaba por Salomé. Debo admitir que tengo muchos alumnos talentosos y que ya tengo una idea de como trabajaremos este ciclo escolar.

-¿Quién será el siguiente?- Salomé se levantó y con tanta seguridad dijo sin despegar la mirada de mis ojos - Es mi turno Profesor-
Ella se dirigió al frente, tomó una bocina, conecto una USB y dijo sin ninguna expresión en su rostro...

-Esta canción es de Meghan Trinor, y se llama Kindly calm me down, realmente espero que les gusta- y eso último lo dijo mirandome fijamente a los ojos.
Dios Mio Salomé! ¿Qué me haz hecho, me tienes completamente hechizado?

Ella comenzó a cantar, su voz era aterciopelada, capaz de ser tanto grave como aguda, ella hacia gestos capaces de tocar tu corazón, se veía triste y es lógico ya que la canción es triste. Ella canta como si cada una de sus palabras fueran dedicadas, como si cada una de sus palabras tuvieran un porqué de su existencia.
Yo solo disfruto esto. Encerio, sí me sorprendió mucho su actuación.
En tan solo segundos nuestras miradas se conectaron, pude observar algo en ella que esta ahora nunca había visto. Ella... ella lo esta disfrutando, está viviendo cada una de las palabras que transmite, ella en verdad lo esta viviendo.
Empiezo a sentir más cálida su mirada y yo... yo lo único que fui capaz de hacer fue sonreir...

No hice tan amplia mi sonrisa, ya que no quería que mi atracción hacia Salomé se notara

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No hice tan amplia mi sonrisa, ya que no quería que mi atracción hacia Salomé se notara.
Ella no devolvió la sonrisa, solo seguía cantando. Pero su mirada de mí no se desviaba.
Todos los alumnos la miraban asombrados, incluso Han Bin.

Yo sé ingles, y claramente sé lo que significa las palabras que canta, y ella está triste, y se que se desahoga cantando, pero necesita a alguien que esté ahí, alguien que la ame. Y ese soy yo, de alguna manera lograré que ella se enamore de mi.
Se que no soy nadie (aún) para determinar que es lo que necesita, pero es real, yo quiero que me ame y quiero hacerla feliz.

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⏰ Última actualización: Jan 28, 2020 ⏰

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LA MIRADA DE SALOMÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora