Beast - kookv (COMPLETA)

quatre.

Taehyung logra salir del bosque, pero no para. Sigue corriendo hasta que llega a la casa de los Min, llama a la puerta pero nadie responde. Suelta un sollozo y siente el terror consumirlo cuando el aullido de la Bestia se hace presente. Se gira y los ojos dorados de la criatura, que brillan bajo la luz de la Luna, se topan con sus ojos azules. Suelta un grito cuando ve que la criatura se prepara para correr hacia él y con rápidez empieza a correr por la aldea. Varias voces se escuchan venir de la plaza principal.

Jimin se encuentra sentado en un banco junto a Yoongi, que tiene el brazo vendado, su primo Hoseok, Seokjin y Namjoon. Los cinco chicos miran a los niños jugar cuando escuchan los gritos del rubio y ven un punto rojo correr hacia la plaza.

—Mierda, es Taehyung —habla Yoongi mientras se levanta con rápidez siendo seguido por los otros cuatro. Empiezan a correr hacia el rubio sin poder ver a la criatura oscura que lo persigue a paso lento.

—¡Ayuda, por favor! ¡No quiero morir! —Taehyung mueve sus brazos consiguiendo llamar la atención de todos los aldeanos que se encuentran en la plaza y sorprendidos de que el joven haya sobrevivido hasta tan tarde, se miran entre ellos intentando pensar que hacer.

Yoongi, Jimin, Hoseok, Seokjin y Namjoon siguen corriendo hacia Taehyung hasta que logran alcanzarlo. La Bestia mira a los seis chicos con sus intimidantes ojos dorados y suelta un fuerte aullido a la vez que saca sus garras y abre su boca de forma intimidante. Su gran cola se mueve de lado a lado al compás de sus gran pasos.

—¡Deja a mi hijo en paz! —la señora Kim aparece con lo que parece ser una escopeta y dispara a la criatura, impactando la bala en el estómago de esta.

La Bestia suelta un quejido acompañado de un lloriqueo. Y Taehyung se gira a ver a su madre.

—¡No le dispares! —exclama mientras se intenta zafar del agarre de sus amigos.

La señora Kim vuelve a disparar, pero esta vez la bala impacta en el pecho de la criatura. Taehyung suelta un sollozo al sentir como su pecho se hunde y su estómago empieza a doler.

Otro disparo en la pata derecha.

Taehyung cae el suelo sujetando su pierna.

Los cinco chicos que lo sostenían, lo miran preocupados pero el rubio empieza a arrastrarse hacia la criatura que se encuentra como él en el suelo herida. El alcalde Park aparece con su mujer y ambos corren hasta donde están los jóvenes.

—Mi Jiminnie, ¿estás bien? —la señora Park mira preocupada a su hija mientras acaricia las mejillas de este pero todos los demás se encuentran mirando la peculiar escena que hay delante de ellos.

Taehyung se encuentra abrazando a la criatura que se encuentra en el suelo desangrándose mientras acaricia la cabeza de esta.

—Señora Kim, traiga algo para sanar heridas —dice Yoongi mientras sigue observando a su joven amigo de cabellos dorados junto a la criatura de pelaje azabache.

Namjoon, Seokjin y Hoseok empiezan a hablar con el alcalde Park para explicarle que no tenían ni idea de lo que estaba pasando y solo vieron que Taehyung seguía con vida.

Cuando la señora Kim regresa con un botiquín con vendajes y alcohol, la Bestia y Taehyung han desaparecido.

—¿Dónde está mi hijo? —la mujer con el rostro cubierto por lágrimas mira a su alrededor buscando con la mirada a Taehyung.

—Se ha ido —responde Hoseok mientras dirige su mirada hacia el bosque—. Dijo que si la Bestia estaba tranquilo teniéndolo a él allí, se sacrificaría por todos...

—¡¿Por qué habéis dejado que se vaya?! —exclama la señora mientras lanza el botiquín al suelo. Jimin intenta acercarse para calmarla pero esta se aleja de un manotazo—. ¡Se supone que tú eres su mejor amigo y deberías habérselo impedido! ¡Es mi único hijo!

—Señora Kim, yo lo he intentado... Pero Taehyung se ha levantado y se ha ido junto a la criatura mientras hablaba con esta y acariciaba su pelaje —responde Jimin soltando un sollozo y cubriendo con sus manos su rostro.

El señor Park se acercó a la señora Kim y la miró con preocupación: —¿Usted sabía que Taehyung se comunicaba con la Bestia?

El rostro de la señora Kim se convirtió en una mueca mientras negaba con su cabeza.

—No, no lo sabía. Lo único que sé y que toda la aldea sabe es que Taehyung siempre ha odiado la situación en la que vivimos, encarcelados dentro de este lugar... —murmura la señora Kim.

—Señora Kim, nunca nos ha contado sobre los ojos de Taehyung —habla Yoongi mientras se acerca a la mujer—. Quiero decir, todos en la aldea tenemos los ojos oscuros menos él, que los tiene azules.

—Es algo que yo tampoco entiendo y mucho menos su cabello rubio... —responde la señora Kim mientras mira a Yoongi—. Tenemos que ir a por él —habla mientras mira a todos los presentes y el alcalde Park se quita su sombrero de copa para agachar su mirada mientras se acerca a la señora Kim.

—Lamento decirle que no podemos hacer eso... —algo nervioso mueve su sombrero. Siente la mirada acusadora de la señora Kim sobre él—. Debe entender que no podemos poner en peligro más vidas. Su hijo ha sido muy valiente al sacrificarse por todos nosotros —alza su mirada y mira a la señora Kim a los ojos—. Si hubieran posibilidades de sobrevivir, no negaría el ir y acabar con la Bestia, pero las probabilidades de que sobrevivamos son mínimas.

—Papá, debe haber algo que podamos hacer para salvar a Tae —Jimin se acerca a su padre pero la señora Park toma el brazo del pelirrojo.

—Tú no vas a ir a ninguna parte, Park Jimin —le advierte su madre—. Te vas a quedar aquí conmigo a salvo.

—¡Mamá, mi mejor amigo se encuentra secuestrado por una criatura milenaria a la cual no habéis querido enfrentaros porque sois unos cobardes! —exclama zafándose del agarre de su madre mientras mira a los adultos presentes—. ¡Si esto ha pasado es porque Taehyung tenía razón! ¡Esto se debería haber solucionado y la única persona que lo intentó debe estar al borde de la muerte! —Yoongi toma a Jimin de los hombros intentándolo calmar mientras Hoseok se encarga de Seokjin y Namjoon que siguen mirando hacia el bosque como si estuvieran hechizados.

—Jimin, cálmate, por favor —le susurra Yoongi. Acaricia los brazos del pelirrojo mientras mira a los adultos—. Hoseok y yo nos encargamos —murmura y el señor Park asiente para luego indicarle a su mujer que lo ayude con la señora Kim, quien aún se encuentra con el rostro repleto de lágrimas y mirando hacia el bosque.