Te gustaba caminar bajo la lluvia. Sin paraguas. Decías que era solo agua, no necesitabas protegerte del agua.
Usabas ropa negra. Porque era tu color favorito. Y no te arreglabas el cabello. Porque te parecía una perdida de tiempo.
Me arrastraste hasta la lluvia. Porque dijiste que tenía que sentirlo.
Y lo hice, Wint. Lo sentí. Sentí las pesadas gotas de lluvia cayendo con fuerza sobre mi cara. Y me susurraste, Wint, cariño.
Me susurraste que me amabas.
Y me di cuenta que yo también lo hacia.
Y en eso se convirtió nuestra relación. Nuestro pequeño mundo. Se hallaba bajo la lluvia.
Y fue bajo la lluvia, a medianoche mientras bailábamos y nos besábamos. Mientras enredabas tus delgados dedos de uñas negras en mi largo cabello rubio y yo me perdía en la inmensidad de tus ojos azules.
Fue en ese momento cuando tomamos la decisión. Y ninguna se arrepiente. Porque nuestros únicos testigos fueron la luna, radiante sobre el cielo haciendo brillar tu pálida piel desnuda ante mi. Y las estrellas, mostrándole a mis dedos que caminos seguir. Caminos que ningunos otros dedos habían trazado. Y la lluvia dándonos su bendición.
Me enamore de ti, Winter.
Te amo, pequeña. Perdón por dejarte. Pero ya no toleraba mas mantenernos ocultas.
Perdón, por garabatear tu nombre en mis muñecas. No fue justo acabarlo todo con tu nombre. No quiero imaginar lo que sentiste, lo que pensaste.
Te amo mi pequeña Winter.
S. xx
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Pensamientos de medianoche.
Teen Fiction"Pensamientos inconclusos, momentos oscuros, el corazón oprimido y las lagrimas atoradas en la garganta. Un nudo constante en el pecho, el aire asfixiante y el calor sofocante. La oscuridad absorbente. Historias sin sentido. Comienzos a medio acabar...
