•El escape•

56 3 0
                                    

Estaba encerrada nuevamente en esa pequeña habitacion blanca, con poca luz, sin comida y sin agua.
Ya no resistía en ese espantoso lugar, y lo único que me daba esperanzas de salir era Once, mi hermana, que por suerte pudo huir y hacer su vida.

Yo soy 012, y tengo 3 poderes: Telepatía, transportación y telekinesis.
Por suerte pude obtener telekinesis al igual que Once.

Nacimos el mismo día y a la misma hora, casi como gemelas, por lo que por una extraña razón obtuvimos ese poder compartido.

- Niña, ven, te tengo una sorpresa. - me llamó el señor Brenner, mi papá.

El era un hombre malo,Decia que él era mi padre pero ya lo estoy empezando a dudar.
Desde que se fue mi hermana, él a comenzado a hacer muchos más esperimentos conmigo, y si me resistía, me daba electricidad por un collar que él me había puesto.

-Ya voy, papá. - dije con calma, saliendo de esa horrible habitación con tres guardias atrás y dos adelante.

Estaba dispuesta a salir y hacer mi propia vida con Once. Vengo hace meses planeando mi huida pero aún no logró hacer nada, ya que siempre me tienen completamente vijilada, más de lo normal.

- Bueno doce, siéntate en esa silla. - Me ordenó Brenner, por lo que lo hice y él se fue a mirarme desde una especie de ventanal, enserrandome en una nueva habitación, donde siempre hacia esperimentos conmigo.

Puso una botella de agua en la mesa, desde el otro lado del vidrio me miro fijamente, y desde el micrófono que estaba a su lado me habló.

- Transporta la botella hasta mi, pero sin agua. - Ordenó nuevamente. Yo lo mire extrañada.

¿Como haría eso? Apenas se transportar algunas cosas, ni siquiera me sale perfectamente transportar personas ya que pueden terminar lastimadas, o algo puede salir mal.

Mi nariz sangra más de lo normal cuando hago una transportación muy complicada, por suerte como esta vez es un objeto pequeño, no me sangra tanto.

Mire la botella fijamente, me concentre hasta más no poder, y solo logre un pequeño templar en esta.

- Rayos. - Reproche al no lograrlo.

- Vamos pequeña, ¿O quiere una pequeña electrocutacion? - me habló Brenner con una sonrisa en su rostro, ya con el pequeño control con el que mandaba esos terribles rayos en la mano.

Negué con la cabeza.

- Yo puedo, papá. - Le dije sería, para volver a mirar la botella y dar todo de mi.

De un momento a otro la botella desaparecido, haciendo caer un gran charco de agua al piso.
Mire sorprendida, ¡Lo había logrado!, al fin no sufriría por ese maldito collar.

Una leve sonrisa se formó en mi rostro.

Brenner salió de detrás del Gran ventanal y vino hacia mi, para sentarse al lado mío.

- Bien echo niña, vas avanzando. - me acarició mi corto cabello, que ahora llegaba hasta mis hombros y sonrió.

Era mi momento, podía escapar de acá si le sacaba el control con mis poderes.

Empeze a concentrarme hasta lograr desaparecer el control de su bolsillo. No sabía en donde quedó, pero salí corriendo del lugar.

- ¡TRAS ELLA! ¡AHORA! - Grito Brenner furioso.

Cada Guardia que se me cruzaba lo mataba, ya no tenía tiempo para solo correrlo a un costado y que me vuelvan a seguir.

Al ver la puerta de salida la abri con toda mi energía, ya que estaba forzada para que no se abriera ni con mis poderes.

La logre abrir, una gran cantidad de sangre salía de mi nariz.

Los Guardias me siguieron con todo, en auto, en moto, a pie, con una gran cantidad de armas.

Me quité el collar por fin, no podía seguir resistiendo a esas descargas eléctricas que me mandaba mi supuesto papá.

Al cabo de unos minutos perdí de vista a todos los guardias, perdiendome en el bosque.

Era de noche, hacia frío, y yo apenas tenía una bata médica que cubría todo mi cuerpo hasta las rodillas, con una tela tan fina que no podía aguantar el frío viento que pasaba a mi alrededor.

Ví una pequeña casita construida con madera, no era una casa como las otras, parecía más para un niño que quería jugar en su patio. Decia en la parte superior "Castillo Byers", solo supuse que nadie vendría con este frío, por lo que me podía refugiar ahí.

- Es lindo... - Dije en mi mente, mirando el lugar para despues sentarme en la cama.

Al cabo de una hora escuche unos pasos que corrían hacia mi, ¿Me habrán visto?, mire fijamente a la puerta de la mini casa por si tenía que usar mis poderes contra alguien malo.

••••••••••••••••••••••••
                                    •••••••••••••••••••••••••

¡Y hasta acá! Espero que les haya gustado, ¿Quien será esa persona que viene hacia ti?

Los Leo❤

•Will Byers y tú•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora