🍓 u n o

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Nuevo día de clases en la escuela y Kuanlin no iba a faltar a clases ninguno de estos días ya que estarían cerca los examenes y debía tener bien en mente las materias que daban ahora en clases sobre todo en donde los profesores más que escribir, hablaban en clases donde todos los estudiantes debían poner atención aunque realmente eso no pasara, el mejor amigo de Kuanlin, Park Jihoon, la mayoría de las veces llegaba tarde, aún así al menor no le importaba, muchas de las veces se volteaban para ver al angel que estaba en la última parte del salón, así es, estamos hablando de Yoo Seonho, durmiendo se veía tan angelical y sólo faltarían sus pequeñas alas, realmente era un ser muy lindo y se daba cuenta de eso, a pesar de que nadie le tomara en cuenta, de que nadie viera lo lindo que era Seonho con sus brazos cruzados sobre la mesa, sin embargo, no sabía cómo hacercarse a él, incluso si tenía novia, se atrevería a darle siquiera una palabra. Entonces, veía sus lindas manos, salía del salón con una mochila apegada a la espalda, su cabello negro lucía bien en su rostro, en el bolsillo de su chaquetón estaba el labial sabor fresa del cual muchos hablaban.

Para Kuanlin... Seonho era un niño agradable.

— Seonho... Es alguien que parece merecer mucho más de lo que hace —Musitó casi en un susurro Kuanlin, su mochila colgaba de un solo brazo y las ganas de seguir acercandose a Seonho no paraban.

— ¿Aún te gusta ese niño insignificante? —Preguntó Jihoon cerca de Kuanlin, otra vez.— Seonho no se fijará en nadie —Añadió.

— Aún me gusta... El niño insignificante de las fresas, sigue gustandome —Entonces, Kuanlin se dio cuenta, que Seonho nunca le miraba, su mundo era individualista, pensaba la gente. O que jamás hablaría con alguien de la escuela.

El chico seguía esparciendo su labial sabor fresa sobre sus labios, Kuanlin quería acercarse, Kuanlin quería sentir su aroma, él era un chico lindo al cual realmente quería cerca y no alejado como muchos estudiantes que también lo apartaban y dejaban solo. Sólo quería un poco de él, en un cerrar y abrir de ojos le podía ver solo todos los días y hasta meses completos antes. En uno de los recreos nuevamente, ahí estaba el chico de ojos adormilados, los amigos de Kuanlin estaban lejos fuera del salón, caminó, dio unos pasos, él en su último puesto bastante distraído hojeando sus cuadernos.

Si tan sólo un poco, pudiese estar cerca.

Entonces Kuanlin esta vez se quería atrever más, ir más allá de mirarlo, vio como el chico sacaba su labial para colocarselos en sus labios y luego volverlo a tapar y dejarlo en el bolsillo de su chaquetón, no importaba lo que dijera Jihoon, lo que hablara la gente acerca de los rumores que tenía Seonho. Entonces Kuanlin ya estaba más cerca de él, a como uno o dos metros de distancia, pero el chico aún no se percataba de su presencia, o mejor dicho, lo ignoraba, algo que Kuanlin no quería pensar, le disgustaba la idea de que sería ignorado en su primer intento.

— Seonho... ¿T-Te gustan las fresas?  —Preguntó algo curioso, pero más que nada para saber si le respondería, Seonho quitó la mirada seria del cuaderno para ahora dirigirla a Kuanlin.

— Sí, me gustan las fresas —Respondió en seco, frío por lo demás.— ¿Y qué?

— E-Es que... —Kuanlin vio su dibujo, el dibujo que estaba haciendo sobre una canasta de fresas, Seonho era un niño que dibujaba bien.— ¡Me gusta tu dibujo! —Se escuchó nervioso, estaba apenas improvisando, se sintió un asco.

— Agh, no sé qué te pasa, no sé qué carajos quieres —La voz de Seonho sonó en desprecio.— Puedes decirlo.

— Se-Seonho —Juraría que estaba algo sonrosado y jugando con sus manos por el nerviosismo, era un poco vergonzoso pero sólo tenía que improvisar ¡Improvisar! Nunca había hecho eso, y pensaba que debería haber hecho algo mejor, algo planeado.— ¿E-Es verdad que tus labios saben a fresa?

— Pero qué te importa —Le dijo aún distanciando su conversación, no sonó antipático por la pequeña risa que había soltado.— A que eres de esos que habla mal de mi todos los recreos, bah... Nada raro que vengas a molestarme.

— ¿Molestarte? ¿Debo de molestarte? —Kuanlin se acercó más a él, estaba más cerca, Seonho tenía que mirarle desde abajo ahora que estaba sentado con sus manos sobre la mesa, su cuaderno seguía abierto.— No he dicho nada —La voz del más alto era un poco más seguea.— Aunque si veo esos labios... —Miraba su rostro, era tan lindo, sus labios estaban algo rosaditos, ¿Sabor fresa?

— ¿Ah sí? Já —Soltó con un poco de sarcasmo.— Estás bien raro, no eres normal, no debes ser así ¡Iugh! ¿No eres normal? —Seonho parecía burlarse, sin embargo, sus burlas parecían tan inocentes y sin intenciones.

— Seonho... —Si tan sólo el chico pudiese entender los sentimientos de Kuanlin, quizá sería distinto... Quizá.— Déjame probar tus labios —No podía controlar las palabras de su lengua ahora.

— ¡¿Qué?! ¡Loco! ¡¡LOCO!! —Le gritó casi sin entender la situación, no podía ser que un chico le estuviese diciendo eso, al menos Seonho no se lo creía.— Insisto que estás rar...

Las palabras del chico fueron calladas por un beso del mayor, Kuanlin finalmente le había besado, besado en los labios, esos labios cuales le encantaban porque se veían bien, porque los rumores estaban por todas partes de la escuela, porque quería y tenía tantas ganas de hacerlo, de atreverse y probar, de también poder acercarse al chico, había bajado su cabeza para poder besarle y sus manos estaban sostenidas en el borde de la mesa del chico, ¡Estaba confirmado! Seonho tenía labios sabor a fresa, usaba un balsamo labial de fresa.

— ¡Aléjate maldito loco! —Empujó fuerte a Kuanlin, el mayor no se pudo sentir peor y retrocedió resbalando por el empujón, pero él no sabía ni de daba cuenta lo frustrado que estaba Seonho, quien pensaba que se querían aprovechar de él.— Ya no es divertido... Ahora da asco.

— N-No, Seonho, no digas eso... —Kuanlin hizo una mueca ¿Se sentía así de mal eso? Jihoon tenía razón, "No le gustan las personas, no te le acerques" decía, y parecía ser peor ya que le había besado.— Pero si... —Dijo algo decepcionado de sí mismo y sin terminar la frase salió del salón, no quería pensar en nada.

Seonho, el chico que tiene labios sabor fresa.

Seonho, el rompecorazones.

「※」

Holaaa, espero les este gustando, Seonho es un chico algo difícil, ¿Pero podría aceptar los sentimientos de Kuanlin? :')
Podrán saberlo en los próximos capítulos, mis dulzuras. 💘

—Monshi.

Strawberry Flavor 🍓 GuanHoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora