En el inicio de la tercera semana, Ruby y Weiss volvieron a clases, la cicatriz de la peli blanca volvía a su color rosa pálido y no había riesgo de abertura. Blake por otro lado se quedaba con la rubia que se fustraba frecuentemente por la impotencia de no poder hacer las cosas por sí sola
—calma Yang... — murmura la fauno del gato a su compañera que parece a punto de romper sus pantalones al no ser capaz de abotonarlos
—Agh!!!! — exasperada la rubia abre la ventana de la habitación y saca la cabeza sintiendo el viento en su rostro, el aumento de su temperatura no había sido cosa de un día, se había elevado y así se había quedado —m... me ayudas...? — Yang tapa su cara con su mano, una de las cosas que más odia la robusta es que alguien hagan las cosas por ella, aunque no es tan malo cuando esa persona es cierta pelinegra
—ves? No es tan difícil pedir algo de vez en cuando — rodando los ojos, la de ojos color ámbar se acerca a la más alta y ocultando el sonrojo en su rostro apunta los pantalones, se obliga a apartar la mirada del abdomen descubierto de la rubia, aún no entiende porque su compañera ha dejado de usar su ropa de combate, seguramente es una etapa y también ha dejado de lado sus guanteletes
—bueno... No sería tan difícil si lo que te pidiera fuera algo que nunca pude hacer!! Es un botón Blake!!! No puedo apuntar un botón!!! — la nombrada coloca sus manos sobre los hombros de su compañera mirándola a los ojos, no habían vuelto a la normalidad desde el incidente, ahora el morado claro permanece oscuro y ante el mínimo sentimiento negativo se torna rojos, un rojo más intenso que antes
—quieres salir y caminar? — pregunta Blake mirando por la ventana el jardín y escuchando el sonido tan relajador de la fuente
—quiero quedarme acá... — murmura la rubia apartando la mirada, aunque lo estaba intentado no se siente lista aún para salir y mostrarle al mundo su nuevo yo
—Yang, no es bueno para ti que te quedes — la fauno del gato mira con seriedad a su compañera
—no quiero salir — repite Yang frunciendo el ceño, su necedad es una de las cosas más reprochables de su personalidad
—tienes que tomar aire — insiste la peligra sin darse cuenta del tono rojo que los ojos de su compañera estaban tomando
—no quiero ir... — masculla entre dientes la mayor intentando controlar el calor que sube por su cuerpo, siempre ha tenido problemas con su ira pero nunca nada como esto, está fuera de control, cada vez es más difícil mantenerse calmada
—Yang... — la nombrada mira a su compañera dejando ver sus ojos rojos, la peli negra suspira, para nada asustada, cualquier otra persona hubiera sido gritada por la rubia, pero dicha nunca le había hecho nada a Blake, simplemente le mostraba sus ojos para darle a entender su estado de ánimo —mira, voy a dar una caminata, mientras tanto por favor piensa en que no es bueno para ti estar encerrada —
Y así la mayor queda sola y se queda mirando por la ventana hasta que cierta peli negra se hace visible, Yang deja escapar una sonrisa observando como su compañera disimuladamente comienza a perseguir un pajaro que salta al rededor de la fuente
Mientras la observa, otras dos cabezas familiares aparecen en el jardín, Ruby y Weiss, estas se acercan a la fauno del gato y comienzan a hablar, conversación que la rubia no puede escuchar y está demasiado lejos como para leer sus labios
—Blake!!! — Ruby corre hasta su amiga y la abraza sonriendo —donde esta Yang? — pregunta sintiendo la mano de la peli negra revolviendo su cabello
—en la habitación — responde saludando con una sonrisa a la heredera que le responde con el mismo gesto
—eso es bueno... — dice la peli blanca haciendo una pausa y ganando la atención de la ojiambar —han pasado casi 3 semanas Blake, y se que ella lo está intentando pero no puede quedarse en el intento por tanto tiempo — dice sacando su scroll y mostrando una foto del general ironwood
—no entiendo— dice confundida la más alta inclinando sus orejas levemente hacia un solo lado
—él, lo recuerdas verdad? — Blake asiente —cuando era joven perdió la totalidad de su brazo y parte de su costado derecho — añade la peli blanca ahora pasando a una foto de su hermana —he llamado a Winter, me contó lo del general y como reemplazó su parte faltante con una robótica—
Ruby sonríe al ver la expresión de sorpresa de la de ropas negras, era de esperarse, la menor había puesto esa misma cara cuando Weiss le había contado su plan en horas de clases
—ironwood está agradecido con nosotros por haber unido a los clanes así que... Bueno, le he pedido un pequeño favor — cuando la ojiazul termina de hablar dos brazos la envuelven y levantan del suelo
—eres la mejor!!! — exclama Blake a su compañera que está a punto de asfixiarse
—Bl... Blake... N... No... Puedo... RESPIRAR... — la nombrada deja en el suelo a su amiga sonriendo algo apenada
Blake no había sobrereaccionado, es la mejor noticia que ha recibido en varias semanas, espera que a Yang le guste
—según Winter llegará el viernes y es lunes así que... A mantenerla ocupada... Y fría... — añade la heredera recordando cuando la semana pasada Yang no pudo peinarse el pelo, rompió el cepillo y aumentó tanto su temperatura corporal que casi estaba envuelta en llamas, las chicas habían internado calmarla y le lanzaron sus cobijas que de alguna forma se incendiaron. Un escalofrío recorre la espada de la peli blanca
—te lo dije Blake, Weiss es más que una cara bonita — Ruby sonríe y después llora al recibir un Zape por parte de la heredera, golpe que tenía como función evitar que la de capa roja viera la cara sonrojada de la ojiazul, cara que por cierto no pasó desapercibida por la fauno del gato que de ahora en adelante tendría la forma perfecta de molestar a su amiga
Saben, esto fue hermoso de escribir :') saben porqué? Porque me imagino que hubiera pasado si Blake se hubiera quedado al lado de Yang en vez de irse, Yang lo hubiera superado más rápido y no se hubiera deprimido, es una posibilidad XD
ESTÁS LEYENDO
Una Nueva Vida Tras La Guerra (parte II)
FanficTras que la guerra entre la milicia, cazadores, bandidos y faunos terminara, todo vuelve a ser pacífico o al menos lo suficiente como para que la antigua Academia Beacon se vuelva a levantar y con ella una nueva generación de cazadores. Ruby, Weiss...