Capítulo 1

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Alec llamaba desesperadamente al número de Magnus que como siempre le llevaba al buzón. Aventó el celular a la cama y tiro de sus cabellos con lagrimas en su cara.

—  Quédate tranquilo hermano. Espera que se calme y él te hablara. Está dolido por lo que hiciste.- trataba de calmar su hermana al verlo tan desesperado en su cuarto, que por cierto era un desastre.

Tenía dos semanas en esta situación, dos semanas que Magnus lo había terminado en su casa. Alexander regresó al instituto hecho pedazos y por primera vez sus hermanos lo vieron llorar,ahora era costumbre verle los ojos así .

— ¿Cuándo lo hará,Izzy? ¡Estoy llamándole para arreglar las cosas y él no responde! ¿que más tiempo quiere ?.- gritó desesperado. Empezó a buscar su chaqueta, al encontrarla se la puso.

— Alec ¿A donde crees que vas?- preguntó Issabelle un tanto preocupada por la prisa que se cargaba,tenía una breve pista de adonde iría pero ya tenía retenerlo, lo estuvo haciendo por muchos días.-¿ No saldremos a cazar?- preguntó tratando de persuadirlo a cometer una estupidez. Él se giró a carearla.

— Yo iré a la casa de Magnus, me tiene que escuchar.- al terminar busco su celular y lo metió en su bolsillo, también lo mismo con su arco haciéndolo invisible, se notaba muy decidido a lo que iba y cómo suponía esta vez no podía detenerlo, él ya había tomado su decisión a pesar de ella.

— Alec déjalo que piense. Ahora solo irás a atormentarlo más de lo que debe estar.- dijo Issabelle sabiendo que se había equivocado al instante que la cara de Alec roja se tornó de enojo hacia ella .

— ¿Y según tu que sugieres?
¡dime! ¿Que le deje ir a si sin darle las explicaciones? creo que dos semanas fue suficiente para pensar.- sin dejar que ella respondiera salió del cuarto dejándola dentro. Ella corrió con sus tacones de 15cm, solo llegó a ver como el cuerpo de Alec salía por la puerta, Jace se acercó a ella quien acababa de terminar el entrenamiento con Clary, estaba sudado y cansado.

— ¿A donde va con tanta prisa?- Issabelle le miro.- ¿irá donde Magnus, verdad?.- ella solo asintió sin saber que hacer, en estos momentos desearía tener el poder de arreglar las cosas entre su hermano y Magnus, pero ambos  sabían que era solamente decisión del mismísimo Magnus.

Alec no le importó la escandalosa lluvia que caía.
Caminó  así mismo sin su runa de invisibilidad hacia el edificio rojo que hace dos semanas era su casa. Al llegar subió ya que los vecinos lo conocían y pensaron que su llave había quedado arriba, por primera vez agradeció mucho a los mundanos, tocó la puerta de Magnus tan fuerte.

Él estaba sentado en su sillón precisamente pensando en su cazador, le extrañaba tanto pero él no había confiado en él.

El solo oír tocar de la puerta supo que era él, no sabía si tenía una forma peculiar de hacerlo o él lo conocía tan bien para saber cómo lo hacía. Quedó estático donde estaba mientras Alec llevaba más de cinco minutos tocando la puerta.

— !Magnus! abre la puerta, por favor. Se que estás ahí.- gritó como loco y los nervios de Magnus subieron aún más, llevaba tiempo sin sentirse así, sin saber que hacer, se levantó y se paró detrás de la puerta con el oído pegado a ella.

—¡Magnus!- gritó Alec aún tocando la puerta, se asustó y pegó un brinco, suspiró y con su mano en su corazón se trató de calmar. Se preocupó por los nudillos del cazador, debían dolerles, mucho tiempo golpeando la puerta.
Decidió abrir por fin la puerta cuando Alec estaba listo para seguir tocando.

— Magnus. - le susurro Alec viendo sus ojos, solamente centrándose en ellos.- yo ...- se quedó en blanco, solo con ver la hermosa cara de su amado le puso la mente en blanco. El corazón de Magnus brincaba emocionado reconociendo a su dueño, quien no le había visto la cara por dos largas semanas. Trató de evitar que Alec lo notara fallando en el intento, el nefilim lo conocía de pies a cabeza y sabía que le extrañaba pero también sabía que estaba enojado con él, muy enojado diría él.

— Alec ¿que es lo que quieres? te dije que no quiero tener que ver nada contigo. Por favor déjame la vida tranquila.- habló rápido queriendo ponerle fin a la conversación lo antes posible y trató de cerrar la puerta, pero Alec con su bota negra del pie izquierdo se lo impidió.

— ¿Por qué tienes que hablar así de rápido ?- preguntó sabiendo la razón de esa acción. Empujó la puerta y el cuerpo de Magnus se movió a la fuerza dándole paso a Alec para entrar, al ver el departamento creyó que estaba viendo su cuarto del instituto, igual o peor desordenado cosa que jamás había visto, Magnus era desordenado pero no a tal punto, eso parecía un basurero.

— Alec ¿qué haces? ¡sal de mi casa ahora!- gritó Magnus alterado,  Alec no se inmutó, siguió inspeccionando la casa, de echo la casa estaba idéntica al dueño a pensamiento de Alec ya que  al girarse a verle de frente las ojeras eran tan pronunciadas, tenía cara de no haber dormido en días.
En la mesa había una copa y dos botellas , "estuvo bebiendo" al verle mejor pudo ver lagrimas secas en el rostro de su amado .— ¡Alec ¿qué no entiendes de que quiero que salgas de aquí ?! - volvió a gritar enojado y también porque sabía que dos palabras de Alec podían hacerlo caer, y no era lo que quería, por lo menos no así de fácil, pero con él no podía tomar la decisión correcta y Alec le tenía claro.

El nefilim se acercó y sutilmente acarició la mejilla de él moreno — Magnus, mi amor.- Magnus sintió un escalofrío por el apodo que Alec le había llamado, asombrado porque pocas veces la usaba y más era cuando hacían el amor.
Magnus dio un paso atrás cortando todo contacto .— Debes escucharme .-Alec se acercaba y Magnus se alejaba .

—¡No me llames así! Por favor vete, no te quiero oír, creo que tuve suficiente.- Alec volvió a hacer un intento de acercarse lográndolo esta vez; hizo un movimiento rápido y atrapó la boca del menor (en tamaño ) Magnus apretó los ojos y unas lagrimas salieron por sus ojos, muy enojado reunió un poco de magia y saco a Alec del apartamento quien había logrado robarle según Magnus su último beso entre ellos.

Alec frustrado le tocó ir a casa luego de quedarse de pie en la puerta del principio sin la suerte de que nadie le abriera por segunda vez.

Cuando llegó al instituto su hermano, Jace , le salió de repente con cara de preocupación.

— ¿Pudiste arreglar las cosas con Magnus ?.- preguntó tocando el hombro tenso de Alec. Por su conexión parabatai sabía que Alec no había logrado nada, solo era pregunta de protocolo. Alec pasaba sus manos rudamente por su rostro y suspiró pesadamente.

— No. Él está muy molesto, no sé qué mierda voy a hacer. No tengo el control esta vez.- gruñó Alec no acostumbrado a no saber que hacer ya que toda su vida prácticamente dominó todo.


Magnus después de que el espectáculo con su ex pareja acabara se sentó con la copa llena hasta el tope de licor, recordando como su cazador traicionó su confianza con la reina Seelie y él que pensaba que iba a ser diferente con él; enfureció tanto como cuando se dio cuenta, pensó que él no podría fallarle, confió en él ciegamente.

Sin darse cuenta quedó dormido ahí mismo. 

A la mañana siguiente apenas abrió los ojos sintió unas arcadas y corrió a su baño a dejar todo lo de su estómago, al terminar y salir limpiándose la boca oyó su celular sonar y pensó que era Alec de nuevo, el celular iba a explotar por tantas llamadas que dejaba el nefilim, ninguna respondía pero tampoco se sentía capaz de rechazarla, solo lo dejaba sonar.

Quiso estar seguro de que era él, pero se había equivocado esta vez fue Isabelle, al dejarla seguir llamando ella dejó un buzón de voz.

hola Magnus ¿cómo estás? Se que no debería meterme en esto pero... Alec de verdad lo siente, mi hermano esta mal ¿Sabes ?estábamos cazando demonios y ver con la rabia que él lo hacía me dio tristeza por ellos.- Issabelle dio un suspiro.— solo, habla con él por favor, vuelve con mi hermano. Está devastado.

El buzón finalizó ahí, Magnus se mantuvo estático por momentos, al moverse un pequeño mareo le dio el cual creyó que fue por tanto alcohol que su sistema tenía dentro.


KJ ♒️🔮

30 enero.

El lazo que nos une ( Gay .Malec ) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora