Phoenix

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Phoenix está sobrevolando el Océano Atlántico, siente una gran atracción mientras lo sobrevuela y comienza a preguntarse qué ocurre para sentirse tan atraída, hasta que, de pronto, comienza a sentir una gran presión en la cabeza y por desgracia para ella, comienza a perder el control sobre sus alas hasta caer en picado sobre un poblado, de momento desconocido...

Al despertar, y recuperarse de la caída, comienza a recordar pequeños fragmentos del lugar. Recordó algo poco frecuente, por no decir imposible, empiezan a aparecerle pequeñas imágenes del poblado, donde se ve a ella misma de pequeña, cogida de la mano de un señor mayor, pero, por desgracia, no le pone rostro, por que de haber muerto y renacido de entre sus cenizas por tantas veces ya una se olvida de donde y por qué, pero ese lugar le resulta muy familiar, como si tuviera algo pendiente por cumplir, algo que todavía a ella la daña, y quiere resolver su misterio.

Cuando al fin se adentra en el poblado, empieza a tener pequeños flashes de recuerdos rotos, sin su otra mitad, como si una parte de ella no quisiera volver a sentir ese dolor... Pero no es ella quien no quiere recordar, es su otra mitad, la peor parte de si misma, la que ha ido mejorando a lo largo y ancho de su vida:

           [Pocos conoceréis a la otra mitad de Phoenix, ya que pocas veces la ven, se hace llamar Frost Phoenix, protege a su otra mitad, a su hermana, a Phoenix of Fire.
¿Qué ironía, verdad? Que el fuego tenga como hermana al hielo, pero así es, el fuego protege al hielo y viceversa, al fin y al cabo, son hermanas, por muy diferentes que sean, tienen el mismo propósito, protegerse la una a la otra y así lo hacen desde aquel instante en que decidieron ser una, uniendo sus cuerpos y almas en una sola.]

Después de aventurarse en el poblado, y tener al fin la respuesta que necesitaba, pudo afrontar sus recuerdos, a pesar de su dolor. Por desgracia para ambas, llegaron a recordar el rostro de aquel hombre, ya que era su protector, la que crió a la pequeña e indefensa Phoenix, como si fuera su propia hija, su legado. También Phoenix a tenido que recordar como moría entre sus brazos, y como dejaba la vida segundo a segundo mientras le sostenía la mirada, hasta ver como cada ápice de luz se apagaba en sus ojos y los dejaba sin vida, sin color, solo una mancha apagada... Cómo su familia la abandonaba, como la culpabilizaban de lo sucedido, que por supuesto, después de ser culpada durante tantos años, llegó a responsabilizarse de algo que ella nunca había cometido, pero aún así, aquellas personas que antes eran su familia, habían conseguido su proposito, hundirla en lo más profundo de aquellos lares llamados también Las Cumbres de la Desgracia, es un lugar donde solo el dolor es quien reina la oscuridad, y pocos pudieron afrontarla...

Ahora que Phoenix recuerda y siente su dolor, deberá afrontar ese pesar, por que no podría llevar una carga así a cuestas y más si es del pasado, tendrá que pelear y deberá ganar si quiere volver a sentir su libertad entre sus alas.

Entre tanto, Frost Phoenix decide transformarse, ya que su fin es ser la guerrera que batalla en cualquier guerra, y por propia elección a decidido batallarla.

La transformación de Frost Phoenix es realmente magnífica, al mismo tiempo en que Phoenix of Fire se encierra en ella, una luz blanca ciega el lugar, mientras el rojo del fuego se va apagando, aparece el blanco de la nieve en las plumas de Phoenix, cubriendola como un manto, a la vez que ella sigue cubriéndose con sus alas. Cuando comienza a abrir sus alas de par en par, se puede distinguir sus ojos, como dejan de estar llenos de vida mientras cambian de color, su transformación continua con su pico, volviéndose azul con rayas blancas, demostrando que su cuerpo, al igual que su alma son la muerte. Frost Phoenix ya esta preparada para la batalla. Cualquiera que tenga el valor de mirarla a los ojos morirá congelandose en la eternidad, ya que sus ojos no albergan ni un ápice de vida y eso congela cualquier alma, por muy diferente que sea, siempre congela el alma de cualquier ser viviente.

Al finalizar su transformación, Frost Phoenix decide comenzar el trayecto hasta las Cumbres de la Desgracia. Pero de pronto, a lo lejos, ve a un ser saliendo de aquellas mismas Cumbres, lo extraño es que saliera con vida, en lo único en que se pudo fijar fueron en sus grandes escamas, negras como el carbón, llegó a formularse una sola pregunta en sus pensamientos: ¿quién es?...

Al llegar a la entrada de las Cumbres, empezó a dudar, pero no podía permitir que el miedo la atrapara, pues, debía hacerla más fuerte, y así fue. Cerrando los puños con fuerza, comenzó a adentrarse, en aquel lúgubre lugar. Por suerte, que Frost no tuviera alma era una ventaja, ya que en las Cumbres, quien sea de alma pura saldría con el alma destruida, o lo que es peor, muerto y atrapado en los laberintos de la desgracia que aguardan en estas Cumbres.

Frost empieza a fijarse en los muros del lugar, ve recuerdos dolorosos de todas aquellas almas atrapadas, pero debe encontrar el recuerdo de Phoenix para rescatar a aquella ave de su infancia, aquella que esta aquí atrapada, atormentada por la culpa... Mientras prosigue con la búsqueda sobre los muros, se da cuenta de que han llegado a uno de los laberintos, con tres entradas, ninguna es la correcta, en ellas hay tres desgracias que pueden corroer el alma de Phoenix y pueden llegar a atraparla en estos mismos muros de Desgracia. Por suerte para ambas, quien esta al mando es Frost, pero quien elige la entrada es Fire, y tiene que escoger la entrada con el corazón, no debe equivocarse...

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⏰ Última actualización: Jan 21, 2020 ⏰

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