Finca mariposa (Kanjiro) (Giyunobu)

Extra 2

Narra Shinobu

Nos retiramos de la estación para tener que caminar unos cuantos pocos kilómetros al puerto, todo era bastante tranquilo al punto que olvidaba que estaba Giyu a mi lado el cual sabía que no hablaría durante todo el viaje como en el tren hace unos momentos, era divertido molestarlo al ver como poco a poco iba perdiendo los estribos con un rostro que desprendía su molestia hasta que de un gran suspiro volvía a retomar su rostro inexpresivo de siempre mientras ignoraba lo que hablaba con demasiada facilidad pero se le olvida que yo no voy a perder, si yo quiero el va a terminar hablando.

-Tomioka-san~ mira un puesto de comida- El de los ojos azules mantuvo su silencio y sin siquiera mover los ojos para ver a donde apuntaba.- ¡Oh Oh! ¿Podemos ir a ver esa tienda? Venden plantas y medicina- otra vez sin responder.- Tomioka vamos, al demos di que podemos ir a descansar-

-Si digo que si te callarás ¿no?- Lo logré.

-No prometo nada así que vamos- Busqué con la mirada algún hotel cualquiera hasta ver uno.- Por aquí- No me fijé si Tomioka me seguía pero me dirigí al lugar sin más.- Hola buenas, ¿Tiene habitación con 2 camas?-

-Claro, si quiere por 200 yenes incluso podemos darle de comer a usted y a su...- El señor miro a Tomioka confundido, como si esperara a que el le dijera si éramos pareja o algo parecido.

-No, no voy con ella, ¿a cuanto una habitación?- Tomé su mano con fuerza y la apreté escuchando como esta sonó.

-Vaya vaya Tomioka-san~, ni que pudiera matarte- Creo que se notaba que estaba un poco molesta, primero no me deja ver la tienda de plantas que yo quería en verdad ver, yo no voy a dejar que disfrute esta noche.

-...¿Usted quien es?- Le di un fuerte golpe en el estómago soltando todo el aíre en sus pulmones, que sea la pilar más débil por no cortar una cabeza no significa que mis golpes sean débiles, mato por estocadas.

-Deme las llaves por famor, una habitación con 2 camas por favor- El señor me entregó las llaves tiritando mientras me veía algo aterrado, tome a Giyu por su haori y lo empecé a jalar para ir a nuestra habitación.

-....- Me miraba con un rostro de odio hacia mí como si planteara mil maneras de matarme en ese momento.

-¿Que? ¿Acaso no te gustó mi pequeño regalo Tomioka-san?-

-Haz lo que quieras- Dejó las cosas a un lado de su cama y comenzó a desvestirse delante mío, aunque varias veces e visto a Giyu sin parte de su ropa no dejaba de ser algo incomodo.

-¡Oye oye! ¡¿Acaso soy un fantasma?¡-

-Diría una migrañana con patas- Estaba teniendo sentimientos encontrados en aquel momento, por un lado quería inyectar veneno en sus bolas para que aprenda a contestar y por el otro al menos ya me estaba hablando.

-Bien, yo voy a salir un momento-

Me retiré del lugar dejando las llaves en manos de Tomioka para ir a ver aquella tienda de antes, pude ver algunos nombres de plantas que siempre había deseado tener para mis experimentos por lo que comprando unas semillas para estos 2 meses me tendrán distraida de sus respuestas o de paso hago una pócima para que se le quite esa costumbre por lo que apenas llegué compré varias semillas de distintas plantas para tener con que hacer por un muy largo rato. Me dirigí a la otra tienda para poder comer algo estando bastante hambrienta y quería aprovechar de poder comer algo bueno antes de ir a aquella isla donde tendríamos que cazar algunos animales para seguir, pedí un tazón de ramen para comer en ese momento hasta que una voz conocida me detuvo de mi comida, era Tomioka el cual había pedido su típico salmón con rábano que a todas partes que iba pedía para comer, aveces en algunas misiones lo pedía todos los días de almuerzo, lo miraba de reojo mientras comía hasta que lo vi sonriendo mientras comía lo cual hizo que quitara mi vista de aquel hambriento hombre que era algo repulsivo mientras hacía eso de comer sonriendo aunque si tan solo sonriera en sus momentos libres sería más llevadero estar con el, no al extremo de Rengoku pero si que sonría un poco, cuando terminé de comer escuché la voz de Tomioka hablando tras de mi.