-𝒀𝒐𝒖 𝒘𝒊𝒕𝒉 𝒎𝒆-Kylo Ren-

•3•

—Este es Finn, Finn esta es Maia—Me doy la mano con una chico de piel oscura—

—Encantada—sonreí—

—lo mismo digo—me guilla el ojo—

Me río por dentro

—Queremos saber si estás preparada para estar aquí, aunque seas mayor de edad y-...-

—Tengo 15 años—interrumpí—

Los dos se me quedan mirando con los ojos como platos, y después me miraron de arriba abajo

—¿¡Qué!?—gritaron al unísono—

Reí

—Si?—Reí—

—Poe ten cuidado, es ilegal—susurro Finn en el oído de Poe—

Este rodó los ojos y le dio un golpe en el brazo, haciéndome reír

—Vamos—suspiro y le seguimos—tienes que aprender a usar un arma para defenderte o atacar—desde lejos me lanzo una pistola—

—Se pelea cuerpo a cuerpo Poe—mire el arma con una ceja levantada—

—Pero ellos van a tener sables y armas, no creo que les importe que sepas golpear cuerpo a cuerpo—sonrió burlón—

—Gracias—le devolví la sonrisa sarcástica—

—De nada, vamos a ver como sabes usar un arma—

Nos dirigimos hacia una sala con dianas extrañas para disparar.

Las típicas

—Okey poneros esto—nos dio unos cascos para los oídos especiales—

—Cuando quieres Maia—

Asentí, me concentré y dispare.

Di en la cabeza a todas las dianas de personas humanas.

Me di la vuelta y estaban los dos sonriendo

—Poe que te pensabas, ¿que solo se pelea cuerpo a cuerpo?—reí, y el negó sonriendo—

*Tiene bella sonrisa*pensé

*es preciosa* pensó él

—¿Como es que sabes todo eso?—me preguntó Finn después de que Poe y yo nos dejásemos de mirar—

—Tuve una infancia dificil—empecé a andar y me siguieron—mi padre era el típico que se creía el mejor, el Rey de la casa, me decía que una mujer no podía ser una Jedi algún día, que no tenía fuerzas, nunca iba a poder conseguir nada, y yo como una niña me lo creí, me creía todo lo que me decía, y nunca le reproche.
Me daba clases de pelea todos los días, al principio lo hacía bien, después fui empeorando, mi cuerpo no soportaba todos esos golpes a si que todos los días me hacía algo.Un día me enfadé mucho, y de repente sin tocarlo pude estrecharlo contra la pared, obviamente después hubo consecuencias.
Mi madre era la típica que quería ayudar pero no podía por que tenía miedo a q él la pegase, todas las noches me decía que todo estaba bien, que íbamos a escarpar de esa casa, pero nunca pasó.Cuando Kylo Ren entró en mi cabeza no vio todo, bloquee media historia.
Estaba con una espada laser, justo iba a atacar a mi madre pero grité y salí corriendo, después posó la espada en mi estómago, obviamente sin atravesarme entera.
Después vi el cuerpo de mi madre en el suelo, sin vida, sin alma, sin nada.
Desde ese día veía a mi madre todos los días en la casa, como un espíritu, me sonreía y se iba.Mi padre no estaba normalmente en casa, estaba robando piezas de gente para venderla y conseguir comida, obviamente solo para él.Hasta que apareció Kylo Ren, y ahora estoy aquí.—me quite una lagrima que resbala por mi mejilla recordando todo, lo había soltado aún sabiendo que no tengo la confianza necesaria para decirlo, pero lo escondí tanto tiempo que necesitaba decirlo—

—Lo siento chicos no tendría que haber dicho nada ahora es incómodo—reí un poco amargada—

—No, no, no pasa nada, al revés, me gusta que nos des tu confianza—dijo Poe, haciéndome sonreír y a la vez sonrojarme—

Nunca hable con un chico de tal forma, mi padre me lo impedía.

Por eso me sonrojaba tan fácilmente.