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Después de varios minutos largos de caminar en silencio, la llegada a las puertas cerradas de la estación de tren dibuja una tenue angustia en la actitud de JeongHan, quien con una cierta preocupación busca con la mirada un lugar en el cual pueda saber la hora, terminando por tomar la muñeca izquierda de Hong, levantarle la manga del saco del traje y mirar su reloj plateado. Han pasado ya cuarenta minutos de la medianoche, por lo que es evidente la razón de que las vías del tren se encuentren cerradas y que él ya no pueda tomar aquella vía directa para llegar relativamente pronto a su casa.

Joshua hace una mueca arrepentida y estando frente al portón metálico cerrado lo toma de la cintura, atrayéndolo de frente suavemente hacia su cuerpo. — Lo siento, se nos pasó el tiempo y ahora claramente no puedes regresar.

—. No te preocupes, puedo tomar un bus. — Yoon le resta importancia, le deja una suave caricia sobre la mejilla y se deshace de su agarre tan solo para acercarse hasta el panel en el que se encuentra el mapa de rutas de la ciudad.

El pelirrojo analiza la situación en voz alta, con su dedo traza lentamente el recorrido y cuenta al menos cuatro buses diferentes de la ruta de veinticuatro horas para poder ser dejado cerca de su casa, teniendo que caminar al menos quince minutos antes de poder considerarse en casa. A Hong eso no le parece realmente agradable, hace una mueca inseguro y de inmediato se niega a que el muchacho pase por aquella atroz travesía solo para llegar a casa, a fin de cuentas, no solo es un largo viaje, sino que es peligroso dada la hora en la que lo estaría haciendo, encima pretendiendo ir solo.

—. Vives demasiado lejos. — Balbucea mientras lo observa poner un dedo en el sitio en el que se encuentran y otro en el punto al que se dirige. — ¿En dónde estudias? — Y se desconcierta más con la respuesta sin palabras, pues la distancia entre los dedos de Yoon se amplía y muestra que la universidad le queda todavía más lejos. — Estás loco.

El chico se ríe y saca una pequeña cuenta entre murmullos, se toma un tiempo durante el cual Joshua piensa que el pelirrojo necesita urgentemente un auto y además, se permite sorprenderse por el hecho de que el chico vaya diariamente al trabajo y no conforme llegue temprano. Teniendo que hacer un viaje de dos horas y media cada día, solo es capaz de mirar perplejo al muchacho de la coleta que se acerca un poco y le habla.

—. Ya revisé como volver a casa, no es demasiado complicado, si me voy hacia la ruta del este puedo tomar el tramo del autobús 312 y luego el 315, y una vez ese llegue a su parada final, puedo tomar uno más que me dejará a unos cuarenta minutos de mi casa y en la parada principal habrá otro que me acerca otros veinte minutos, no tendría que caminar mucho. — Murmura él en explicación al azabache. — Solo no tengo el dinero para tomar tantos buses, ¿podrías prestarme un poco?, te lo devolveré el lunes después del trabajo.

Joshua jadea con incredulidad y sacude la cabeza en negación. — Es demasiado lejos para que te vayas así, Hannie. — Vuelve a negar y lo toma de los hombros para verlo a los ojos, exagerando su preocupación. — Llegarás de madrugada, es peligroso y podría pasarte algo. No quiero que te vayas solo, ¿qué tal si te sucede algo?

La duda se asoma en la expresión del pelirrojo. — Es que… Las niñas no duermen sin mí, ¿qué tal si ellas están despiertas esperándome aún?, no tengo otra manera de volver si no hay servicio de subterráneo, además deben estar muy preocupados en casa.

Otra negación es emitida por el más alto. — Tranquilo, vamos a mi casa, queda mil veces más cerca y no necesitas poner en peligro tu vida para llegar al otro lado de la ciudad.

Incapaz de decir algo más, el joven de la coleta accede a sentarse en la parada del bus junto a Hong, ocasionalmente se queja o pone alguna excusa, pero al final, termina por recargar la cabeza en su hombro y guarda silencio a la espera del bus. Tan pronto están sentados hasta el final del vehículo que va prácticamente vacío, JeongHan termina por abrazar el cuerpo de Joshua y en cuestión de segundos se queda dormido, estando agotado y lleno; los veinte minutos del recorrido los descansa, hasta llegar al edificio.

Blomster ❞. ₊ [ JiHan ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora