Momentos después de recibir mi arma ambos me indicaron, una puerta por donde debía pasar.
Me sentía listo, tenía mi armadura y mi arma, conocia como usar todas las habilidades posibles de defensa y ataque, estaba listo para lo que fuera, pero no me sentía así.
Abrí la puerta y al pasar por esta un hombre escuálido de tez palida y ojos grices me recibio.
- Así que tu eres Raymond Brock hijo de Alex Brock y Julia Olstor, heredero del poder del rayo, uno de los elementos más poderosos.- Decia el hombre gris- Ahora dime, tienes algun miedo.
Esa pregunta me pegó de golpe, yo soy alguien que podría ser naranja por lo miedoso que soy, le temia a la oscuridad, a cualquier animal con veneno o dientes más grandes que mis dedos y a los espiritus. Pense que si decia que no el hombre simplemente me dejaría pasar, además, cómo un guardían podría ser tan miedoso.
-No.- Dije con convicción- No le temo a nada.
El hombre me miró.
- Perfecto, entoces no tendrás problemas entrando a la maquina de pesadillas.
- ¡La maquina de pesadillas!
- En efecto, si no tienes ningun miedo entonces no te tomara más de diez segundos entrar y salir.
La maquina de pesadillas se trataba de una caja negra de gran tamaño. Hasta ahora solo era una leyenda que las madres les contaban a sus hijos para que se comportaran , pero ahí estaba, la máquina de pesadillas.
Trague saliva y entre, pero nomas entrar la puerta se cerró de golpe y la habitación comenzó a inundarse. Mi primer instinto fue usar mis poderes para volar la puerta, pero si los usaba moriría. Decidí relajarme y dejar que lo que tenga que pasar pasé.
De un momento a otro me encontraba atado en una silla en completa oscuridad, no podía moverme, hice fuerza y me retorcía pero la silla, no cedía. Estaba asustado mis bombas latían a mil por hora y con la voz temblorosa dije
- ¡Ok ok ok! Si, tengo miedo a muchas cosas
El hombre gris respondió
- Ya lo sé, todos los ielema le tienen miedo a algo - Su voz parecía venir de todos lados - es lógica pura, pero al mentirme te ganaste una experiencia de terror completa. ¡ Qué comience la pesadilla !
Al terminar de hablar sentí como algo rozaba mi nuca, pero cuando mire hacia atrás no vi nada, luego sentí nuevamente que algo tocó mis piernas, pero nuevamente nada y los roces se convirtieron en toques, los toques en rasguños y los rasguños en golpes. No los podía ver, eran fantasmas. Sabía que la máquina de pesadillas termina con la simulación en el momento en el que el paciente superaba sus miedos.
Un flashback de mi pasado nuevamente asaltó mi mente
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La Leyenda de Los Guardianes
Fiksi IlmiahSe trata sobre gente con poderes y cualidades los cuales se determinan según el color de los ojos
