Mi rompecorazones favorito

Una mirada al pasado

Eran las 7:30 de la mañana y pedí a mis ojos que se abrieran, más cerrados se quedaron. Me quede dormida unos 5 minutos más hasta que mi padre llego a decirme que si no llegaba al colegio una regañiza me esperaría.

Abrí mis ojos como plato y me metí a bañar rápido, me cambie y tome un jugo, cogí las llaves del carro y conduje al colegio lo más rápido posible.

-¡Brooke! Mierda, apresurate o llegaremos tarde a química-Dijo Stephan, mi mejor amigo.

Llegamos al salón 1 minuto antes de que llegara el maestro. Me senté hasta el final del aula, Stephan se sentó a lado mío como de costumbre.

El profesor Owen, llegó y empezó a dar su clase. Saque mi cuaderno y empece a tomar nota, siendo sincera amaba la química, se me facilita mucho, esa es una de las tantas razones por las cual recibo tantas burlas.

El timbre sonó y todos salieron corriendo, la verdad es que no sabia la razón pero no le tomé mucha importancia. Recogí mis cosas y decidí salir del aula hasta que el profesor Owen me llamó.
-Brooke, ¿qué te ha parecido la clase?
-Bien, supongo-Dije recogiendo un mechón y poniéndolo en mi oreja.
-Estupendo. Bien... Quería pedirte un favor.
-Si, claro, dígame.
-Como eres una de las alumnas más sobresalientes quisiera que dieras tutorías
-¿Tutorías?-Pregunté sorprendida, siendo sincera soy un asco enseñando
-Sí, te daré créditos extras y así puedas ir por tu sueño y salir de aquí
-No entiendo, ¿de que me servirán unos créditos extras para ir a Italia?-El profesor Owen era una de las pocas personas que sabía que quería ir a Italia
-Podría sacar más fácil una beca e ir estudiar allá. ¿Que dices?
Una sonrisa se formó en mi rostro, no lo podía creer.
-¡Claro! Acepto.

Salí corriendo del aula, cada vez estaba más cerca de cumplir mi sueño. Opté por ponerme los audífonos y empecé a escuchar "The 1975".
Tenía que aceptarlo, nada podría quitarme esta sonrisa de la cara hoy.
Mis libros que traía en mis manos cayeron al suelo, al igual que yo provocando que mi IPod saliera volando, mis rodillas ardían nunca más optaré por traer short al colegio. Levanté la mirada y pude observar a un chico que me extendía la mano para poder levantarme, no quise aceptar la ayuda así que decidí levantarme yo sola pero descubrí que mi tobillo se había torcido, por lo tanto no pude hacer absolutamente nada, crucé mis brazos e hice un puchero.
-Anda, no seas orgullosa y acepta mi ayuda.-Dijo extendiendo su mano, de nuevo.
No quería aceptar la ayuda pero no tenía opción, así que agarré su mano y trate de levantarme.
-Veo que te has lastimado tu tobillo
-Que observador, enserio. Mereces un premio a la persona más observadora ¡oh! Espera, también mereces un premio a la persona menos cuidadosa.-Dije frunciendo el seño
El solo bajo la mirada, y sonrió.
-Perdona, ¿pero qué es tan gracioso?
-La manera en la que frunces el seño, ¿Qué? ¿Acaso no te has dado cuenta de lo hermosa que eres cuando te enojas, tifany?
-¿Tifany? Perdona, pero es no es mi nombre. Estás loco.
-Tienes cara de Tifany. Perdona a mi locura, por favor.-Dijo levantando mi IPod y mis audífonos.- ¿Acaso esto es tuyo?
-Lo es, gracias.-Dije tratando de levantar mis libros, el hizo lo mismo ocasionando que nuestras miradas coincidieran, mi corazón latía demasiado fuerte sentía que en cualquier momento se saldría. Aparté la vista y levante mis libros.
-Tienes una mirada encantadora, Tifany ¿Lo sabías?-Dijo dedicándome una pequeña sonrisa
-Gracias, pero ¡Por última vez, mi nombre no es Tifany! es Brooke.
-Bien... Tifany, te llevaré a la enfermería debido a que tus rodillas no se ven nada bien al igual que tu tobillo.
-Pero me es casi imposible caminar
-Eso se puede arreglar
-¿Com...-Dije mientras el intentaba cargarme
-Per... pero ¿Qué te sucede?-Dije algo sorprendida, debido al miedo de caerme rodee su cuello con mis manos
-Nada. Te llevo a la enfermería. ¿Hay algo de malo en eso?
Opté por no abrir la boca durante el camino.
Llegamos y me dejo en una camilla, el le informó a la enfermera lo sucedido y se fue.
La enfermera curo mis rodillas y me puso unas vendas en el tobillo, me dio algo para el dolor y me retiré. Fui directo a mi casillero y sin darme cuenta Stephan y yo ya estábamos en la cafetería. El me hablaba sobré "Kate Brown" La chica de sus sueños desde hace 3 años.
-¿Brooke?-Dijo moviendo mi hombro para que reaccionara
-Este... ¿Qué pasa?-Dije tratando de reaccionar
-¿Acaso has escuchado lo que he dicho?
-Claro...
-Que no. ¿En quien piensas?
-¿Tendría que pensar en alguien?
-Quizá en aquel chico que no deja de mirarte desde que entramos a la cafetería-Dijo señalando
Voltee y ahí estaba él, aquel chico que ni su nombre sabía y que me había ocasionado una caída. Tenía que aceptarlo, era guapo. Hasta ahora no me había percatado de que sus ojos color negro sabían ponerme nerviosa.