En algún lugar de Seúl - MINAYEON

4 de Diciembre

¿Conoces la ventaja de escribir mis pensamientos cotidianos en lugar de decirlos en voz alta? Mi escritura mejoró.

Mi hermana solía coleccionar diarios. De cuero y papel blanco. Páginas rayadas. Páginas en blanco. Ella compraba muchos, apilándolos en el piso de su habitación. A veces, ella también intentaba darme uno para que yo pudiera escribir mis malos días y sentimientos al respecto.

Ella me dijo que escribir ayuda. Así que seguí su consejo, convirtiendo los papeles en mis confidentes. 

Sé que la mayoría de la gente escribe para escapar de la realidad y dejar salir todas las cosas que los han estado molestando. Para aliviar el dolor que han estado embotellando. Eso es lo que también estoy tratando de hacer, excepto que también escribo para recordar y sentir. O para recordar cómo sentirse.

Y todos estos secretos, todas estas divagaciones están guardadas de forma segura, escondidas en una caja de zapatos, debajo de mi cama, fuera del alcance de manos curiosas.

Si solo pudieras leer esto ahora, leer todo lo que he escrito en este desgastado diario, no me sonreirías. No me hablarías. Me encontrarías espeluznante y acosadora. Me evitarías. Probablemente presentarías una orden de restricción contra mí.

Y tienes derecho a hacerlo. Entiendo, me refiero a una extraña que escribe sobre ti. Eso es espeluznante.

Pero espero que no lo hagas. Porque eres la única persona a la que me estoy aferrando en este momento. Porque eres la única que me hace creer que todavía hay algo por lo que vale la pena despertarse en la fría mañana. Porque quiero conocerte aún más.

Te quiero, Nayeon.

(De acuerdo, probablemente escribiré eso una y otra vez porque esta nueva pluma es muy suave).