Four Beings;

seguimos.

16-12-2019
Toldate: internado para mutantes.

El reloj marcaba las 8:30 a.m, obligatoriamente los chicos tendrían que levantarse para ir a desayunar, esto se avisaba con una campaña que aun por su pequeño tamaño, sonaba por todos los pasillos.

Como siempre, Yenna despertaba con su humor simpático y alegre, mientras Ceiza despertaba con su humor negativo pero en veces simpática.

-Buenos días, hoy es un nuevo día con nueva alegría.

-No mientas, en este lugar nunca hay alegría, Yenna, nunca.

Ambas chicas comenzaron a reír, sin motivo alguno, simplemente reían, se vistieron y saliendo de su habitación, llegando al comedor un rato después.

-bien, no hay lugar donde sentarnos, todo esta lleno y yo no me quiero sentar con personas extrañas.

-vamos Ceiza, no puede ser tan malo, mira podemos sentarnos con esos chicos de allá.

Yenna apunto a una mesa que se encontraba en una esquina, en ella ya habría dos chicos, pero no había problema con eso. Las dos se dirigieron a ella para después sentarse.

-Hola, perdón si los molestamos, pero no había otra mesa.- habría dicho Yenna con una sonrisa en su rostro.

-Hola, realmente no ha problema, por que se sienten aquí, digo tampoco tenían mas opciones.

Dijo uno de los chicos, estaba algo nervioso, y no sabia lo que decía.

-Mi amigo no sabe lo que dice, hace mucho no habla con chicas. Por cierto, soy Hunter y él es Luke.

-Soy Ceiza y esta chica de aquí es Yenna.

Un poco después de presentarse la meseta paso a dejar los platos con el desayuna en las mesas de loa chicos, hasta la ultima que era la mesa donde se encontraban Ceiza y Yenna.

- y bien...¿Que categoría son?- preguntó Hunter sin mayor importancia.

-¿Qué?, eso no se debe de preguntar ¿o si?- dijo Ceiza, ocultando su brazo en donde tenia puesto el brazalete bajo la mesa.

-Realmente no hay una regla que diga que es malo, así que yo comienzo, yo soy color naranja.-
Dijo Hunter mientras veía de reojo a los demás y mostraba su brazo con el brazalete.

-Bueno pues yo soy color amarillo, no es malo- dijo Luke, mientras también mostraba su brazalete.

-Yo soy... Verde, sí, lo sé, es muy patético ser de esa categoría- dijo Yenna algo apenada.

-Yo...soy color rojo- dijo Ceiza mientras mostraba su brazalete
-y sí, lo se, es la categoría mas fuerte.

Todos se quedaron en silencio el suficiente tiempo hasta que volvió a sonar la campana.

Todos los chicos se levantaron de las mesas y siguieron con su día, algunos salieron al patio, otros cuantos en sus habitaciones y algunos en el gimnasio.

Ceiza se habría apartado de los demás, yendo a con la consejera, la cual se habría vuelto una amiga para ella, llego, entro y se sentó frente a ella mirándola a los ojos.

-Hola Ceiza ¿que tal va tu mañana?

-va bien, conocí a unos chicos en el comedor, son un poco raros pero agradables.

-Y ¿cuales son sus nombres? Sabes que tengo que sabe con quien se relaciona cada chico que viene conmigo.

-cierto, creo que eran Hunter y Luke, y ya sabes que siempre estoy con Yenna.

La consejera Molly comenzó a anotar todo en una pequeña libreta, mientras veía de reojo a Ceiza tomar uno de los dulces que había en su escritorio.

- ¿Qué? ¿Esta prohibido tomar un dulce?.

-claro que no, toma los que quieras.

Molly solo sonrió con la actitud de Ceiza, según ella había cambiado bastante desde que llegó al internado.

- y bien, ¿sigues con los planes de escapar de aquí?

-Sabes que sí, no me he podido acostumbrar, este no es mi ambiente, tengo ganas de salir y divertirme, ir al cine o pasear por el parque, ya tengo 18 deberían dejarme ir.

- Ceiza, sabes que no puedes salir, yo también quiero que seas libre, pero va contra las reglas.

-Molly, por favor, ayudame a salir de aquí, te lo compensaré algún día.

-Bien... Te conozco desde que llegaste, y lo único que quiero, es que seas feliz, así que toma algo de ropa y pertenecías preciadas, nos vemos aquí a las 22:00h.

-Gracias Molly, iré a arreglar mis cosas, adiós.

-Adiós Ceiza.

La chica salió de la oficina y se dirigió a su cuarto, entro en el. Tomo su mochila, y comenzó a meter algunas cosas en ella, hasta que Yenna entro a la habitación.

-¿Qué rayos estas haciendo? ¿Vas a escapar?¿por que?.

- Yenna, este lugar no es bueno ni para ti, ni para mi, así que me voy esta noche; vienes conmigo o te quedas a seguir con tu miserable día a día.

Yenna solo asintió con la cabeza y comenzó a preparase para ir junto con Ceiza, cuando terminaron, solo les hacia falta esperar la noche.

Pasaron horas, la campana ya había sonado, y finalmente el reloj marco las 22:00 h, ambas chicas salieron sigilosamente de su habitación hasta la oficina de Molly, al entrar se encontraron con la sorpresa de que había dos personas más en su plan: Hunter y Luke.

Molly no les intentó dar ninguna explicación, simplemente salieron del internado por los pasillos donde no había cámaras, hasta llegar a la camioneta de ella.

Ya ahí todos entraron en el auto, trataron de ser lo menos visibles, al menos hasta pasar la seguridad de el internado. Unos minutos después se encontraban lejos de ahí.

- Bien chicos, ya salimos del internado, y olviden la idea de discutir por el hecho de que vienen mas de los que deberíamos.

- Tu me dijiste que me ayudarías a mi y a Luke, no que ayudarías también a Ceiza y a Yenna.

-Calla, a mi me dijo que me ayudaría a mi, y solo a mi, decidí traer a Yenna ya que me haría compañía, pero al parecer tengo mucha compañía.

-dije que olvidaran el discutir por eso, ahora solo intenten dormir, mientras yo busco algún lugar donde podamos pasar la noche.

- y ¿por que no en tu casa?- pregunto Yenna mientras veía por la ventana del auto.

- mi casa no es segura para ustedes, necesitan estar más alejados de esta ciudad.

Molly seguía conduciendo sin quitar la mirada del camino, en veces solo miraba de reojo a los chicos para ver que estuvieran bien. Paso un tiempo y todos los chicos estaban dormidos, Molly volteo a verlos y solo esbozó una leve sonrisa para después volver a poner la vista al frente.