Four Beings;

¿Aun Mas Problemas?.

20-12-19
Nowhere
7:50 a.m

-Buenos días, chicos...

-¿Molly?...

-Soy yo, idiota.

-No tienes que hablarme así, no es mi culpa que tu voz parezca de mujer, Hunter.

- Cierra la boca.

-Por mi, bien.

-Dios, nunca dejan de discutir, eso es odioso.

-calla, Yenna, nadie te preguntó.

-Emm, siento interrumpirlos, pero... ¿Esos no son los soldados de Kendrick?

-Mierda, Yenna, Luke y Ceiza, abrochen sus cinturones, vamos a aumentar un poco la velocidad.

-Olvidaste decir Molly, oh cierto, ella está muerta.

-No ahora, Ceiza.

El auto donde viajaban los cuatro chicos excedía los límites de velocidad, pero eso no era de importancia, lo importante era escapar de ahí.

De repente, todo se detuvo, el auto, los soldados, el tiempo.

-¿Qué mierda... ESTA PASANDO? Ceiza, ¿QUE HICISTE?.

-NO TENGO LA MENOR IDEA, HUNTER, NO LO SE.

-eh... ¿Alguien me explica por que no avanzan los segundos?

-Creo... Creo que detuve el tiempo, no lo se, nunca lo había hecho, Yenna.

-¡MALDITA SEA! ¿AHORA QUE?

-bien... Podemos escapar.

-no... No tengo idea de cuanto durará esto, no la tengo.

Justo después de decir eso, el tiempo volvió a su normalidad, los soldados habrían sacado sus armas de inmediato, comenzaron a disparar hacia el auto rompiendo la ventana trasera.

Hunter, dio la vuelta y detuvo el auto.

-Avanza, Hunter, ¡AVANZA!

-No... Es nuestro turno, nuestro turno de atacar.

Hunter se bajo del auto, avanzó algunos pasos y se puso de pie frente a los soldados.

Ellos comenzaron a disparar, pero los tiros fueron desviados por la telequinesis de Ceiza, la cual habría bajado del auto igual que Hunter.

Ambos chicos se vieron las caras y solo esbozaron una pequeña sonrisa para luego comenzar con la acción.

Luke y Yenna bajaron del auto enseguida, ahora el equipo estaba completo.

Mientras los soldados disparaban, Ceiza detenía todas las balas dirigiendo estas devuelta a ellos, Hunter se dedicaba a repartir golpes y romper todo lo que se atravesara, Luke arrojaba llamaradas hacia los enemigos, mientras Yenna hacia crecer plantas con espinas las cuales atravesaban los torsos de los soldados.

Al rededor solo habían cadáveres, sin embargo, más y más seguían llegando, parecía no tener fin, solo eran cuatro chicos contra más de 20 soldados armados. La presión y la gravedad del asunto lograron que Ceiza perdiera el control, ésta hizo que lo que fueron 37 hombres, solo fueran charcos y manchas de sangre.

Paso un largo rato, al parecer no venían más sujetos, los chicos habían logrado vencerlo, pero, ahora no tenían un transporte, su auto habría recibido impactos de balas en las cuatro ruedas, dejándolos varados en medio de la nada.

Hunter recogió del piso uno de los objetos con los cuales, el personas del internado podían retirar los brazaletes de los chicos.

-Por dios, ESO FUE TAN GENIAL.

-No lo fue, podíamos morir, Luke.

-Pero no fue así Ceiza, estamos bien, estamos sanos.

-Bien, debo admitir que fue algo divertido, pero, solo un poco.

-Asesinaste a todos esos soldados tu sola, FUE ASOMBROSO, y luego, Yenna atravesando sus torsos y, y Hunter destrozando todo... Fue fantástico.

-Paren, fue divertido, pero ahora vienen consecuencias, no tenemos transporte, y estamos bañados en sangre.

-Vaya, ahora eres tú el Aguafiestas, Hunter.

-Solo digo, ¿qué planean hacer?,¿caminar hasta encontrar un lugar seguro?

-Sería lógico, igual, no podemos andar por todas partes vestidos así.

-Ese es un buen punto, Yenna.

- y... ¿Qué piensan hacer?¿Robar una tienda?

-Pues... Es la única opción que creo posible.

-Eres un idiota, Hunter. ¿DONDE PLANEAS ENCONTRAR UNA TIENDA?

- emm, podemos caminar hasta encontrar una, chicos.

-Pues, no hay que demorar más, hay que comenzar a caminar si queremos encontrar una.

-Esto tomará mucho tiempo.

Los cuatro comenzaron a caminar por la orilla de la carretera, era un silencio incomodo, el sol daba de frente, era molesto, estaban sedientos y con demasiada hambre, cubiertos de sangre por todas partes. Era horrible.

El calor era insoportable, pero, no podían hacer nada contra el, Yenna no tenía la fuerza suficiente en el momento para cambiar el clima o hacer aparecer un poco de viento.

Todos estaban bien hasta que Yenna cayó al piso, estaba débil, necesitaba comer y descansar, los chicos optaron por mantenerse en un bosque, el cual se encontraba a un costado de la carretera.

Caminaron hasta un lugar poco visible de aquel bosque, se sentaron a descansar en el piso mientras veían caer el atardecer.