8 - Sueños y ganchos derechos

571 43 2
                                    

A los dos días, ya caminaba como zombi, otra vez por los pasillos. Llegué a mi casillero, lo abrí para sacar mis libros y de pasó me miré al espejo que tenía colgado en la puerta.

"Se tu misma y empieza con ese maldito reto. Tu puedes." Pensé.

De camino al salón mi cabeza iba repitiendo:
"Se segura de ti misma y de seguro que ya lo tienes". Una y otra vez.
Cuando ya me había sentado, vino el profesor a darnos la primera clase del día y unos anuncios primero.

—Oigan chicos... quiero desearles lo mejor en la época de exámenes que está por venir y además también deseo lo mejor para el equipo de basquetbol porque tendrán un partido este sábado ¡no olviden ir! ¡Es para todos! — dijo el profesor tan feliz.

—Profesor— dijo un alumno levantando la mano para hablar

—¿Si?

—¿Por qué está tan feliz?

—Le propuse casamiento a mi novia...

Ahí es donde deje de escuchar. No me interesaba para nada la vida personal del profesor pero no puedo negar que me daba curiosidad, aún así deje de pensar y me puse a dormir.

— ¿Estas seguro de que esto podrá funcionar?— dije por segunda vez a Zumitos.

—Si.— Dijo mientras se me acercaba.

—Qué haces?

Me pareció una voz conocida.

—Quien eres? — dije mirando hacia una puerta.

—No sé dime tú.

—Oye despierta...

Sentí que me sacudían salvajemente mientras yo quería descifrar quien era esa voz extraña en mi sueño.
Me desperté. A lo único que veo a mi lado es a Zumos tratándome de despertar para ir a comer a la cafetería.

—¿Que quieres? Estoy concentrada en mi sueño.— dije acurrucándome en mis brazos para seguir buscando a esa voz en mi subconsciente.

—Oye... no te vas a creer lo que escuché. — dijo sonriendo de ojo a ojo.

—¿Qué pasó? — dije en la misma posición anterior no queriendo saber nada del asunto.

—El señorito basquetbolista está defendiéndote en la cafetería.

No me lo podía creer. Deje a un lado mi sueño y fui directo donde estaba y me paré en la puerta para ver lo que pasaba.

—¡No te importa lo qué pasó esa noche! Solo la encontré y charlamos. Eso es todo— dijo Jeon enojado.

Veía como la furia se apoderaba de él mientras el otro chico sostenía un papel, aparentemente una foto.
Me acerqué para ver que pasaba y le saqué el supuesto papel de las manos. Vi lo que contenía, no lo podía creer.

—Oye... ¿crees que con esto te vas a poder hacer notar? Parece que tu cerebro es del tamaño de una nuez. — dije mirándolo fijamente y rompiendo la foto o papel.

—¿Por qué no le cuentas a la escuela que sales con el? ¿O acaso el papel de nerd te lo impide?

Venia a mi memoria todos los momentos malos y solitarios que pase y no me contuve más, como pude le di lo que se merecía.

—Si no lo hacías tú, lo hacía yo señorita Kim. La felicito por su muy buen gancho derecho.— dijo Jeon asombrado con un poco de risa. — En cuanto a ti... — pausó y miró para el piso.— no te vuelvas a meter con nosotros.

Y finalmente sonreímos fanfarrones, pero nuestro momento de gloria había terminado porque el rector ya estaba aquí para darnos nuestra lección de no darle su merecido a quien se lo merecía.

—Kim y Jeon a mi oficina ¡ahora!

(...)

Después de tener un sermón largo y extendido sobre "no golpes" "ser respetuosos" y "en esta escuela no se acepta esto" siguió el "llamaré a sus padres o tutores a cargo" y el bien recibido "castigo" que sería ejecutado la semana entrante porque según el rector debía consultar a la junta estudiantil sobre "el castigo adecuado" para nosotros.
Cuando salimos de su oficina por fin pudimos respirar.

—Sabes... nunca había visto a una chica hacer un gancho derecho. Me pareció sexy. — dijo Jeon y se me quedó mirando.

—Si te pasas conmigo, también conseguirás eso. — dije con una sonrisa victoriosa.

Y otra vez, como siempre, Zumos entro en escena corriendo hacia nosotros como un "buen estudiante" preocupado.

—¿Oye Megan estás bien? — dijo todo preocupado.

—Si estoy bien, gracias, pero creo que no voy a estarlo cuando llegue a casa. — rio nerviosa. — Sabes... hoy descubrí que me puedo defender sola no necesito a nadie ni nada.

Después de decir eso vi como Zumos y Jeon hubieran estado tristes por un momento pero cuando me di cuenta ya Zumos me había llevado lejos de Jeon. No me dio tiempo para agradecerle, al menos por lo que dijo allí en la cafetería.

When I'm with you ; jeon jungkook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora