Roles invertidos

- Humillación -

∼ Capítulo 8 ~

.

.

.

— Humillación —

.

Ajenos a todo acontecimiento, XiChen y Wanyin caminaban en un total silencio. Jiang Cheng debes en cuando dirigía miradas silenciosas al otro alpha, usualmente siempre había gente a su alrededor cuando se encontraba con el alpha Lan, pero ahora estando en completa soledad con él era un sentimiento extraño. 

Sin poder evitarlo, sus ojos evaluaron al mayor. El Lan era mayor que él, ya se encontraba alrededor de los 19 años, y aun así había logrado evitar cualquier compromiso. En cambio él, 15 años y su vida ya estaba sellada. 

Ante aquel detalle, no podía evitar preguntarse cómo el alpha de los Lan había logrado librarse de aquella pesada carga. Simplemente no lo entendía. 

Lan XiChen era apuesto, de eso no había duda, era amable y un gran cultivador. Además se sabía que tenía a muchos haciendo fila para querer estar con él. Gracias a la amistad que había entre ambas familias, sabía que el mayor de los hermanos Lan había recibido propuestas desde temprana edad de distinguidas familias, pero aun así este lograba salirse de todo compromiso. 

Un sentimiento amargo se plantó en él, preguntándose ¿Cómo es que él no podía hacer lo mismo?

— Joven maestro Jiang, Joven maestro Jiang… — llamo XiChen al distraído alpha, pero este siguió sumido en sus pensamientos. 

Al verse ignorado, XiChen se apresuró a llegar al joven Jiang, y sin pensarlo abrazo al chico por la espalda, deteniendo su avance en el acto. Aquello tomó desprevenido al de túnicas moradas, quien se sorprendió al verse entre los brazos del otro alpha, pero aún más al ver como a pocos pasos de él unas cuantas rocas de tamaño considerable cayeron justo por el lugar en el que él iba a pasar. 

Las manos del Lan bajaron la presión en el agarre una vez se apartaron del peligro, pero esto fue solo para girar al joven y quedar frente a frente, sin embargo las manos del mayor nunca abandonaron al otro, en cambio solo descendieron a la cintura del alpha menor.

— Wanyin, ¿estás bien? — cuestiono XiChen notablemente preocupado por el aludido. 

Jiang Cheng se sorprendió por ver esa expresión de angustia en el contrario, tan diferente a la expresión de calma y seguridad que está acostumbrado a ver en ese atractivo rostro. 

Estuvo a punto de responder, cuando la presión en su cintura llamó su atención. Sin decir palabra alguna, bajo la mirada tomando detalle de cómo aquellas manos se aferraban con firmeza a los costados de su cintura. Fue entonces que se hizo consciente de la cercanía que tenía con el contrario. Sin poder evitarlo, una tonalidad rojiza se hizo presente en sus mejillas.

XiChen al notar la dirección en la que miraba el menor, se percató de cómo sus manos aún seguían en el chico. Avergonzado, apartó sus manos de golpe y retrocedió unos pasos para alejarse. 

— Yo… me disculpo, joven maestro Jiang. Intenté advertirle del peligro pero ignoró mis llamados. 

— No, está bien. Fue mi culpa por distraerme en un lugar como este. Gracias por salvarme, maestro Lan, y lamento la molestia. 

— Oh descuide, no fue ninguna molestia — respondió con apacible sonrisa, Jiang Cheng solo aparto la mirada, manteniendo aún su semblante bajo.