In Flames || M. Shadows

Capítulo 22

*Narra Matt*

Esta algo rara, ultimamente siempre estaba rara. Estámos sobre uno de las torres más altas de la cuidad.
Mire fijo la oscura noche y recordé su admiración por la noche, le encantaba la noche. ¡como la extrañaba! la necesitaba tanto, es increíble pensar que jamás sentí esto por nadie... pero sabía que no podía estar con ella, que no debía estarlo, habia sido un error dejar que eso pasara, pero no me arrepiento, jamás podría arrepentirme.
Todo había vuelto a ser como antes. Yo jugando con las almas del mundo, llenando de odio y maldad a las personas y fingiendo que nada me importa.
Sonreí levemente y giré sobre mi mano el pedazo de vidrio roto con el que estaba jugando, derrepente me corte, solté el vidrio y mire mi palma. ¿Sangre? Nunca había sangrado al cortarme, levante la otra mano y con uno de mis dedos toque la herida. ¿Dolor? ¿Qué mierda esta pasando?
- ¿Qué es esto?- mire a Valary y ella me observo fijo.
- Eso eres tú 
- ¡No estoy para juegos, Valary! – le grite enojado. Ella sabe algo y no quiere decírmelo.
El cielo oscuro relampagueó. 
- ¿Qué quiere? – le pregunte. No me contestó - ¡¿QUE QUIERE?!
Rápidamente me acerque a ella, pero ni siquiera parpadeó. Me miró fijo a los ojos. Trate de leer sus pensamientos y recorde que ella no tiene pensamientos.
- Quiere la vida de ______ – respondio despues de un rato.
- ¡Maldita sea! 

Aparecí en su departamento, la llamé y nadie contestó. Golpee fuertemente la pared, provocando que quebrara.
-¡Te lo juro barba, juro que si le hiciste algo te vas a arrepentir!

Volvería con Valary, tenía que encontrarla y si es necesario hasta amenazarla para que me dijera en donde diablos esta ______.
La encontre cerca de una camilla del hospital.
- ¿Dónde está? 
- Ya sabes donde esta, Matthew 
- ¿Por qué la quiere? – pregunte.
- No lo se, solo la quiere.
- ¡Tiene que tener un maldito motivo! – le grite.
- ¿Acaso no te parece que haber estado contigo es motivo suficiente?

¿Que?  Eso es… ¿esto es un castigo? Un maldito castigo en contra de ella, por haberme hecho sentir eso que nunca tendría que haber sentido... pero esto no se queda así, quiere jugar sucio, entonces vamos a jugar sucio.
- ¡¿Quieres jugar amigo?! ¡¿Eso quieres?! – Pregunte mirando al cielo - ¡Entonces vamos a hacerlo, de igual a igual!
Cerré los ojos, respire profundamente y pronto comenzaron a llegar a mis oidos gritos de dolor, de miedo, de angustia.
Él toco lo que a mí me importaba, yo iba a jugar con lo que a él le importaba. 
- ¡¿Es lo que quieres?! – grite y reí con ganas – ¡Suelta a ______ y dejare de matar a tus hombres!
- Matthew.
Giré y lo encontré frente a mí.
- ¿Dónde esta? 
- ¿La quieres? 
- No estoy de humor – lo amenacé - ¿Escuchas a tus hombres? – pregunte y sonreí levemente - ¿Quieres verlos morir, uno por uno?
- Ellos no tienen nada que ver – dijo lleno de calma.
Como detesto que nada le provoque culpa, que nada le de miedo, que nada lo angustie. ¡Oh, Todo Poderoso no tiene alma!
- Quiero que dejes a ______ – dije sin dejar de mirarlo.
- ¿Qué me das a cambio de ella? – preguntó.
- Ya te dije que es lo que va a pasar si no me la das – le conteste.

Sonrió levemente y palmeó unas cuantas veces, entonces aparecimos en ese celestial lugar. El cielo. Mire a mí alrededor y allí la vi a ella acostada sobre un extraño mueble.
- ______ – la llame y quise acercarme a ella, pero él se puso en mi camino.
- No puede escucharte, ella ahora es mía 
- ¿Qué es lo quieres? – le pregunte.
- Hay algo que no sabes, Matthew– dijo y caminó hacia ______.
Se acercó y con cuidado colocó su mano sobre su vientre, lo mire extrañado ¿Qué diablos estaba haciendo?
- ¿Qué es lo que estas haciendo? 
- Habíamos dicho que no podías hacerlo, era un trato, un acuerdo.
- ¿Qué pretendes, hermano? – le dije soltando una risa nerviosa – Soy el diablo.
- Matthew...
- Suéltala, porque voy a destruir tu maldito mundo si no lo haces – lo amenacé.
- ______ está embarazada.