El camino de la perversión

Capítulo 3: EL TRÍO DE NARUTO Y LA BENDICIÓN CELESTIAL

Naruto y Hinata llegaron al reino celestial de los ángeles. Al llegar ella al ser la novia del elegido fue recibida como la misma reina del mundo. Ambos llegaron al lugar donde Ikaros se encontraba. Ella al ver a Hinata quedo atraída a la Hyuga. Hacía mucho tiempo que una muchacha tan hermosa había sido traída ante su presencia. Tendría grandes momentos de diversión con ella y su amo.

-Saludos my lady, mi nombre es Ikaros y seré su más leal confidente y sierva-se presentó Ikaros.

-No hay necesidad de eso, me gustaría que fuéramos mejor muy buenas amigas-le dijo modestamente la Hyuga.

En eso, Ikaros le robó un tierno beso y Hinata le correspondió gustosamente y lo disfrutó. Este era su primer beso con una chica y no desperdiciaría la oportunidad.

Naruto estaba con un hilo de sangre y tomó notas con furia para lanzar su propia versión del Icha Icha. En un lugar cerca de unas fuentes termales en la Aldea de la Hierba, Jiraiya tuvo un tintineo de su sexto sentido pervertido:

-Mis sentidos pervertidos detectan un aumento en la fuerza pervertida-pensó en voz alta el sanin.

Pero eso provocó que las chicas lo descubrieran.

- ¡PERVERTIDOOOOO! -exclamaron las mujeres.

-Mierda-maldijo el próximamente golpeado sanin.

Naruto tuvo también el presentimiento que un usuario de la perversión sufriría:

-"Tengo el presentimiento de que alguien sufrirá lo que es el dolor"-pensó Naruto sintiendo pena por la situación de su futuro maestro.

En una de las bases de Akatsuki, Nagato y sus seis Caminos del Dolor estornudaron al mismo tiempo.

Hinata e Ikaros se separaron. Hinata estaba terriblemente sonrojada:

-"Guau, ella es muy buenísima, estoy excitada con solo un beso, no me quiero imaginar cuando tengamos nuestro trio"-pensó Hinata emocionada.

Hinata babeaba ante lo que sucederá dentro de poco.

-Hinata, tiene una buena técnica, es digna de todo una Hyuga, pero conmigo perfeccionará su habilidad como buena esposa alfa que será-le avisó Ikaros sonriente.

-Será un honor aprender de la mejor-expresó modestamente la ojiperla.

Ikaros se sonrojó ante el comentario y sonrió.

-Pasen a la habitación mis señores-les ofreció Ikaros.

Los tres entraron a los aposentos que correspondía a cada líder del clan. Era una habitación verdaderamente hermosa. Había pinturas muy bellas. La arquitectura era sublime. El color daba alegría al lugar.

-Esta será su habitación. Aquí descansarán cada vez que deseen venir a este lugar-les indicó Ikaros.

Durante un tiempo, los tres platicaron para conocerse mejor. Mientras Ikaros los iba conociendo más, más les iba gustando los nuevos líderes del clan. Un grupo de ángeles trajo bebidas y postres a los tres.

-Que disfruten los presentes, mis amos-

Naruto y Hinata los probaron y estaban muy delicioso, pero en un rato empezaron a sentirse raros.

-Oigan no tienen calor. Uf-dijo Hinata muy sofocada.

-Sí, yo tambien tengo calor-se quejó Naruto.

Los tres empezaron a sudar y a sonrojarse por el afrodisíaco.

-Olvide decirles, lo que consumieron traía un poderoso afrodisiaco-avisó Ikaros.