Capítulo 1.

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Tomé mi cámara y la coloqué en la mochila. Tenía un trabajo muy importante; una escuela de alto prestigio me había contratado para unas fotografías de último año.
— ¡Annika! ¿Dónde está la maldita comida? — Exclamó mi padre.
Pasé molesta por el sucio pasillo y fui directo a la cocina.
— ¡Muévete, tengo hambre! — Volvió a exclamar. Saqué algunos huevos y una sartén para hacerle el almuerzo.
Él comenzó a mirarme.
— ¿Por qué te maquillaste?, ¿A dónde irás? — Preguntó molesto.
— Me llamaron para unas fotografías...
— No sé por qué no te consigues un trabajo de verdad y dejas esas tonterías de la fotografía — Comentó molesto.
Solo guardé silencio. Cuando peleó con mi padre, sé que nunca le ganaré una discusión. Por eso, he pensado en no casarme. No quiero tener un marido como él.
— Aquí tienes tu almuerzo — Dejé el plato en la mesa.
— ¡Maldición! — exclamó. ¿O través huevos fritos? — Golpeó la mesa con su puño.
— Lo siento, pero es para lo que me alcanza. Ya que lo demás te lo gastas en licor. Y si no quieres comerlos, dámelos entonces.
Él se levantó furioso de la mesa. Yo me coloqué frente a él.
— No te atrevas a hablarme así, o...— Yo interrumpí. — ¿O si no que?, ¿Me golpearás como lo hacías con mi madre? Recuerda que este departamento lo pago yo, igual que la comida y tus estúpidos medicamentos. Si no te parece, entonces lárgate. Recuerda que ya no te tengo miedo.

Me dirigí a mi habitación y tomé mi mochila. Salí del pequeño departamento con dirección a la escuela.
Mi madre murió por culpa de mi padre. Él la golpeó  varias veces en la cabeza, eso le provocó una muerte instantánea. Solo tenía diez años cuando pasó eso. Pero, pude superarme y conseguir un trabajo que me gusta. Lastima que mi padre, por tantas drogas y alcohol, no pueda mantenerse solo. Ahora yo tengo que mantenerlo.
Varias personas dice que no tengo que odiarlo, pero, ¿cómo hacerlo? después de todo lo que hizo, de todo lo que ocasionó...

                             ✖️

Llegué rápidamente a la escuela. La directora me llevó al lugar donde estarían los alumnos. Saqué mi cámara y comencé.
Al terminar, la directora pagó, y yo le dije aproximadamente cuando estarían listas sus fotografías.
Salí del lugar, y por casualidad, me topé con un viejo amigo de la infancia.
Ambos salíamos de trabajar, y acordamos un lugar para comer y beber un poco.
— Platícame, ¿cómo te ha ido? — Preguntó mientras comía un bocado de su platillo.
— Me va bien. La fotografía siempre me ha gustado desde niña.
Él sonrió encantado.
— Eso me alegra mucho, Annika.
— ¿Y tú? Cuéntame, ¿todavía estás con Annie? — Pregunté sin ninguna gota de pena.
— No, tuvimos varios problemas. Ya no me casaré con ella.
— Es una pena — Dije consolándolo.
Pasaron varias horas, hasta que noté que ya había oscurecido.
— Bueno, me la pasé increíble. Como en los viejos tiempos. — dije contenta.
— Igual yo. Hace mucho que no me divertía — Dijo entre risas.
Él me acompañó hasta la salida.
— ¿Quieres que te llevé? — Preguntó.
— No te preocupes, no vivo tan lejos.
Nos despedimos. Era un momento muy agradable. Por un instante, me hizo olvidar todos mis problemas.

Subí por las escaleras del edificio, y entré al departamento.
— ¡Annika! — Exclamó mi padre.
— ¡Si, en un momento te llevo tu medicina!
— ¡No es eso, un chico tocó la puerta y te dejó un paquete! — Dijo
Fui hacía la mesa de la cocina, y lo vi. Venia con un pequeño sobre.
— ¿Te dijo algo más? — Pregunté confundida.
— ¡No! ¡Y muévete que ya quiero dormir!

Fui a mi habitación, me senté en mi cama y abrí el sobre. No tenía nada importante, solo un pequeño escrito: abrir la caja.
Era todo lo que decía. Hice caso, y dentro de ella yacía un casete.
Fui a la sala, y con mucho cuidado, coloqué el casete. Encendí el televisor.
—  < Hola, mi nombre es Claire Kozlov, y usted fue seleccionada para un experimento social. No se preocupe, no es peligroso. Pero si será emocionante y dinámico. Si usted aceptó, por favor de mandar un mensaje por el correo que se encuentra en el fondo de la caja. Tampoco se preocupe, tendrá asilo y nosotros le daremos los boletos para el viaje. Al ganador de este experimento social, se le dará un millón de pesos en efectivo. Fin del aviso. >
Quedé algo impactada. ¿Un experimento social? Además, ¿por qué fui seleccionada? Bueno, tal vez por que soy la más jodida de este lugar. No quisiera aceptar, pero, la oferta es tentadora. Con ese dinero podría comprar varias cosas para la casa. También para mi trabajo. Y bueno, también me serviría de distracción.
Volví a mi habitación y encendí la computadora.
En la caja se encontraba una tarjeta con el correo. Lo tomé y mande un mensaje.
< Buenas noches, acepto su solicitud >
Presioné en enviar. Solo era cuestión de esperar.

                                   ✖️

Habían pasado varios días desde la llegada del paquete. Fui a la escuela a entregar las fotografías, y regresé al pequeño departamento.
Mi padre estaba dormido, no era de esperarme. A los pocos minutos tocaron la puerta. Al abrir, era un mensajero.
— ¿Es usted la señorita Annika Ivankov? —Preguntó.
— Si, ¿que necesita?
— Le llegó este paquete. Necesito que firme aquí por favor.
Él chico se fue, y yo me quedé con el paquete. Era más grande que el anterior.
Lo abrí con rapidez. Venía un traje completamente blanco, una credencial y un boleto de avión.
Comencé a leerlo. El lugar donde tendría que estar seria...¡¿Alaska?!


Espero y les haya gustado el primer capítulo. Voten por favor 🌟

Proyecto 001  ◾️Historia corta (completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora