Día 5: Entrenamiento

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Vlad encontró a Danny en la sala de televisión descansando en el sofá mientras Maddie escupía y le silbaba desde el suelo. Ella normalmente no estaba tan furiosa. ¿Por qué iba a...? Ah, sí, estaba en medio de su espectáculo.

Vlad todavía no tenía idea de por qué la gata estaba tan obsesionada con eso... Oprah. No importa. Danny estaba tumbado sobre el sofá. Primera lección, de quién es este sofá. "Muévete", advirtió.

Danny levantó la vista y parpadeó; estaba tan acostumbrado a que le ordenaran que no respondió al principio. Usualmente es Jazz quien le dice que se mueva del sofá. Si ella hubiera sido la que le hubiera preguntado, él se habría encogido de hombros, tal vez le habría sacado la lengua. Pero había una gran diferencia entre Vlad y Jazz. Jazz aún no llevaba un látigo con ella.

Danny se movió y subió las extremidades debajo de él, sentado a un lado del sofá con los pies y las patas debajo de él. Maddie aprovechó la oportunidad y también se levantó de un salto. Se sentó en el otro extremo del sofá, dejando espacio más que suficiente para que Masters se sentara entre ellos.

Vlad se tumbó en el sofá, deslizando los brazos hacia atrás y las piernas delante de él. Ah, a él le gustaba este sofá. Sinceramente, también a su gata. Posiblemente a su gatito también. Alcanzó el control remoto y comenzó a cambiar canales, buscando algo menos... excesivamente saludable. Terminó con una película que había visto antes, dejando que el canal permaneciera antes de decidir que esto era aceptable.

Maddie asesinó una advertencia. Ese era su espectáculo, cámbialo de nuevo. Vlad se acercó y la acarició detrás de las orejas. Ella se movió de debajo de su mano y la agarró con sus patas, royendo sus dedos. Sabía que no iba a recuperar su show, pero lo menos que podía hacer era pasar un buen rato jugando con él. Mientras ese gatito desnudo gigante no llamara la atención de su amo...

Danny miró y resopló. Si mordiera a Vlad así, lo habrían echado de la cama. En realidad, tal vez no. Quizás debería intentarlo. Sintiéndose un poco abandonado, Danny se apoyó contra el costado de Vlad. La película era un poco más interesante que Oprah, pero estaba demasiado juguetón para simplemente relajarse y escuchar.

Pasaron los minutos y Vlad siguió acariciando a Maddie, acariciando sus mejillas y frotando debajo de su barbilla. Danny sintió una chispa de celos, aunque no estaba pensando con la suficiente claridad como para considerar sus implicaciones. Se inclinó un poco más, luego un poco más hasta que "cayó" en el regazo de Vlad. Levantó la vista inocentemente, la parte superior de sus hombros descansaba sobre las rodillas del mayor.

Vlad bajó la mirada, actuando como si no hubiera esperado tener un montón de ansiosos gatitos en algún momento. "¿Sentirse excluido?" preguntó. Le dio a Maddie un último toque antes de mover ambas manos hacia la mascota mucho más interesante en su regazo. Las manos fueron al vientre de Danny, frotando la piel lisa allí. Sus dedos le hicieron cosquillas en el ombligo de Danny antes de rascarle el pecho, se desplazó hasta juguetear con sus pezones, descendió para extenderse sobre su barriga y frotar.

Maddie resopló. Vlad extendió la mano, distraídamente poniendo su mano sobre su pelaje. Ella no estaba impresionada. Se levantó y saltó del sofá, alejándose para encontrar algún tipo de venganza. Tal vez zapatos. Vlad la ignoró tan pronto como se fue, enterrando esa mano en el cabello de Danny mientras seguía frotando la barriga del niño.

Danny se extendió, arqueándose hacia atrás y mostrando su barriga y pecho. Él gimió y gimió suavemente mientras se movía un poco. Las caricias lentas se sentían mucho más íntimas cuando se dio la vuelta para él. Su pie se movió un poco mientras los dedos de Vlad bajaban por su barriga inferior, trazando sus caderas y haciéndole luchar para mantenerse quieto para que no se saliera del regazo de Vlad.

Cuidados y Entrenamiento (Traducción) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora