Este fuego nunca se extinguió. Aunque sus ojos no estén, aunque no pueda admirar su sonrisa, y su alma no me tranquiliza la piel.
Solo los recuerdos me mantienen con vida.
Y este es mi intento de sacarlo de mi ser,
quizá logre apagar esta llama,
qui...
Va tan de prisa que solo es un destello ardiendo al pasar por mis ojos, yo lo trato de alcanzar pero siempre va un paso más allá, y entonces olvido contemplar(te) la orilla de la playa, el brillo máximo de una estrella, el ocaso aparecer o sucumbir ante la aurora, la vida resguardada en una mirada, y mi existencia.
Corre y nos hace perder, vuela y arrasa con todo a su paso. Y en el momento que me detuve a tomar aire por la ardua carrera,
Me di cuenta de lo que estábamos desaprovechando, y descuidando.
Quizá si lo hubiese notado antes, habría tomado más fuerte su mano y él no tendría que pedirlo.
Le confesaría una y otra vez mis sentimientos más puros, sin asumir errónea y cobardemente que tenía más tiempo de hacerlo.
Entrego mi fortuna, por una tarde más para amarte como pude y no lo hice antes.
Ahora mismo nada de ello importa, por más que ruegue el tiempo no perdona.
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