III. The Other Hawkins

717 46 6
                                    

3:00 pmPalace Arcade

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


3:00 pm
Palace Arcade.

Después de clases, Raven manejó por las calles de Hawkins buscando algo divertido qué hacer. El pueblo no parecía aburrido pero tampoco daba la idea de que algo divertido para hacer era fácil de encontrar.

Condujo por unos minutos más hasta que vio un lugar que llamó su atención en particular: Palace Arcade. Detuvo su Camaro y observó a sus alrededores encontrando niños de entre doce y quince años de edad. ¿Pensarían mal al verla llegar? ¿El encargado la dejaría pasar?
No había ningún letrero que prohibiera la entrada a quienes tuvieran diecisiete años, obviamente. Se estacionó en la parte de atrás y bajó del auto. Por alguna razón, su corazón se aceleró. Presentía que algo pasaría, ¿Qué era ese algo? No lo sabía pero estaba segura de que sucedería.

Entró en el arcade y sus oídos se llenaron de los gritos de emoción de los niños, sus ojos bailaban de máquina a máquina, sus fosas nasales se inundaron del delicioso y característico aroma de palomitas caseras baratas.

Se dirigió a las casillas para comprar unas cuantas fichas y caminó entre los pasillos buscando algún videojuegos que atrapara su atención. Caminó por unos minutos hasta que se encontró con Dig Dug. Observó el monitor y vio los scores. Si que eran altos y de buen puntaje.

¿Que no tienen nada qué hacer éstos niños? pensó.

Al acercarse al monitor del videojuego que atrapó su atención leyó el nombre que se encontraba en primer lugar: MadMax. Y se preguntó quién sería. Sea como fuera, ese nombre sonaba bastante cool. ¿Qué nombre usaría al jugar? Quería algo que sonara igual que MadMax pero su cerebro de adolescente agobiada por los encuentros con dicho rubio y el presentimiento de que algo sucedería no daba para más.

—Disculpa, ¿Vas a jugar? —una voz levemente grave pero que definitivamente identificó que pertenecía a una niña la distrajo e hizo que se girara a ver quién era. Frente a ella se encontró con una niña pelirroja de ojos azules.

—¿Tú sabes quién es MadMax? —preguntó Raven con curiosidad.

La niña pelirroja sonrió y se mostró orgullosa—. Yo soy MadMax. Me llamo Maxine pero me dicen Max.

Raven sonrió emocionada y la tomó de las manos asustándola—. ¡¿Crees que podrías enseñarme a jugar?! —preguntó nuevamente.

—Si, claro. ¿Tienes alguna ficha? —después de insertar la moneda, Raven hizo su primer intento por jugar Dig Dug. Después de perder innumerables veces y de escuchar la risa burlona de Max, quien la observaba y comía palomitas de maíz, se rindió—. Eres pésima —Raven suspiró y se quitó de los controles para darle espacio y oportunidad de que Max le enseñara. Raven sólo se limitaba a observar cómo la adolescente jugaba tratando de grabar en su memoria todos los movimientos que hacía en los controles y, de vez en cuando, hacía esos sonidos de emoción o sorpresa.

𝐈𝐍 𝐓𝐇𝐄 𝐖𝐎𝐎𝐃𝐒 𝐒𝐎𝐌𝐄𝐖𝐇𝐄𝐑𝐄 » Billy Hargrove [Pausada, En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora