I

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Era el día de la coronación de la princesa Elsa y todo Arendelle estaba más que emocionado por ver a la heredera al trono después de tantos años.

Elsa estaba en su habitación practicando la pose de su padre al ser coronado, ello implicaba sacarse los guantes.Agarró el cetro y empezó a congelarse, estaba nerviosa no quería dañar a nadie y mucho menos que descubrieran sus poderes, principalmente Anna.Sin embargo ansiaba ver a su hermana después de tantos años. Lo que había pasado con sus padres hizo que se aísle más de ella.Llegó al extremo que Anna pensó que ni siquiera había visitado la tumba de sus padres, ello lo sabía porque se lo gritó enfadada a la puerta de su habitación.Aquello no era verdad, ella solía visitar la tumba de sus padres de noche a  llorar sin que nadie se dé cuenta.Se preguntó dónde estaría Anna cuando una voz interrumpió sus pensamientos.

-Princesa,ya es hora-dijo Kai sonriendo, él la había visto desde pequeña y era uno de los sirvientes más leales de su padre-lo hará bien

Elsa salió entonces hacia la iglesia. Mientras tanto la princesa Anna salió disparada apenas abrieron las puertas estaba cantando y corriendo hasta que algo la empujó en el muelle. Casi cae al agua.

-¡Cuidado! -dijo recuperando el equilibrio

-¡Lo siento!Le pido disculpas-dijo una voz masculina

Estaba por ver quién la había hecho tropezar cuando sonaron las campanas

-La coronación, voy a llegar tarde-pensó y salió disparada hacia la iglesia.

El joven tampoco la vió, solo supo que tenía que tener más cuidado cuando pasee a caballo por las calles.Acababa de llegar de las islas del Sur pues su padre lo mandó a la coronación de la princesa ya que tenía que cumplir sus deseos.Recordó lo que le dijo su padre"Hans ya sabes lo que tienes que hacer". Dudó en ir, mejor era decirle a su padre que falló. La verdad era que en el fondo él sabía que no lo iba a obedecer.Cabalgó sin rumbo cuando se vio llegando hasta el lugar de la ceremonia.No tenía nada que perder así que decidió entrar.

La ceremonia de coronación fue breve, la ahora reina llevaba guantes y solo se los sacó cuando el cardenal estaba otorgándole el título y en menos de cinco segundos se los puso de vuelta.Cuando Hans la vio por primera vez se quedó sorprendido por la apariencia de la reina, había rumores de su belleza pero ninguno le hacía justicia. Simplemente era muy bella.

Después, comenzó el baile en el castillo. Anunciaron la entrada de Elsa y Anna poniéndolas una al lado de la otra al frente de la sala.

-Hola

Anna miró a sus espaldas-Hola a mí? Por supuesto que es para mí...hola

-Te ves muy linda-dijo Elsa

-Linda yo?gracias-respondió su hermana nerviosa -me refiero tu te ves te ves más linda

-Gracias...Mmm¿Qué es ese delicioso olor?

-Chocolate-dijieron al unísono, ambas rieron

Elsa estaba a punto de decirle algo cuando se les acercó el duque de Weselton ofreciéndose como pareja para el primer baile de la reina.Sin embargo, ella se excusó y de casualidad mandó a Anna a bailar con él.

-Lo siento-murmuró

A Elsa le causaba gracia ver a su hermana intentar bailar con el duque "soy bailarín de flamenco" de Weselton.En ese momento se le acercó un pelirrojo como de su edad o tal vez unos años mayor.

-Alteza, me concede el siguiente baile, por favor me haría ese honor-dijo y cuando levantó la mirada ella vio los ojos esmeralda más lindos que había visto.

Aquella propuesta tan inesperada la tomó de sorpresa, se puso roja porque no sabía que decir, ella no sabía casi nada de baile y no pensaba que...ella no era el tipo de persona que sabe cómo socializar y la mayoría de veces entraba en pánico.

-Este...creo que...-No sabía por qué no lo podía rechazar tan fácilmente como lo hizo con el duque-Me temo que no sé...

-El siguiente baile es el más especial de la noche, por favor formen parejas para que disfruten de esta maravillosa pieza-la interrumpió el que dirigía la música

-Por favor, majestad-dijo el pelirrojo sonriendo estirando su mano hacia ella.

Elsa dudó al tomar su mano, finalmente lo hizo devolviéndole la sonrisa.

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