-Capitulo uno-

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—Bienvenida de nuevo.

Escuchó la voz de Alex cuando apenas comenzaba a abrir sus ojos. Giró la cabeza y le miró, estaba al otro lado de la sala, de espaldas a ella, mirando un monitor.

—Tus signos son normales. Sin embargo tus respuestas y tus ondas cerebrales andan por debajo de tus estándares comunes.

La chica de Kryptón, hizo acopio de todas las fuerzas que poseía y se sentó en su cama, adolorida. Se llevó una mano al cuello estirándose y después tomó un jugo que se encontraba en la charola al lado de su cama. Por la cantidad de comida en ella, supuso que el contenido de la misma ese sería su desayuno.

—Probablemente el ser una humana afecte en eso. —Exclamó dejando escapar un tono divertido en sus palabras, para después comenzar a beber el jugo. —Estoy bien Alex. No te preocupes por mí, puedes comenzar las pruebas necesarias cuanto antes.

—Ya hemos hecho las que necesitan ser hechas en ti de forma "humana" a decir verdad. —Hizo las comillas con sus dedos antes de tomar su tabla con los que suponía eran sus resultados. —Agradece a Lena, ella se encargó de realizar la mayoría antes de irse. Por cierto, también deberías regañarle por prácticamente no haber dormido. No es bueno en...

La mayor de las Danvers mordió su lengua y cerró los ojos con fuerza conteniendo las palabras que seguían la oración. Rápidamente se dio la vuelta pretendiendo olvidar algo, pero su hermana, no era tonta, sabía que le ocultaba algo.

—¿En...?

La miró reflejando su confusión en su rostro con claridad, en intención de hacerle hablar, pero su hermana, solo volvió la vista a su tabla garabateando algunas cosas. Parecía buscar una excusa para cubrir su resbalón.

—En ningún tipo de condiciones, ya sabes. Es decir, no es sano no dormir, ni siquiera para un kryptoniano, imagina para un humano.

La rubia le miró dubitativa por un momento antes de aceptar que no conseguiría sacarle más información por ahora. Cuando se sintiese completamente bien, utilizaría sus métodos para saber la verdad si no le decían nada antes.

—Si, hablaré con ella... —Una diminuta sonrisa no pudo evitar posarse inconscientemente en su rosto ante el pensamiento de verla. Fue entonces cuando notó su extraña ausencia. Si era sincera, hubiese deseado verla al despertar. —¿Fue a L-Corp?

—No en voluntad propia, pero si. Fue necesaria su presencia ahí, después deberá ir a CatCo... Pero después de eso estoy segura de que volverá para llevarte a casa.

—Entonces ¿Ya puedo irme?

Sus ojos brillaron ante la idea de dejar la enfermería de la DEO. Sentía una gran angustia al estar ahí sin poder hacer nada útil. Aún sin poderes, le apetecía salir a investigar como volver a su tierra. No es que esa no le agradece, al contrario, sin embargo debía volver a donde realmente pertenecía. A esa donde ella misma se había jodido la vida y Lena le odiaba... Pensándolo mejor, probablemente podría pasar un día tranquilo antes de dedicarse al completo a intentar volver de ese mundo de sueños maravillosos.

—Podrás irte con Lena cuando ella vuelva por ti. —Exclamó su hermana sonriendo sabiendo que había sonado como si la rubia fuese una niña. —Pero si a lo que te refieres es irte a investigar todo... Si, puedes tomar tu traje, vestirte y deambular por los pasillos, pero cuando llegue Lena debes irte con ella ¿De acuerdo? Te extraña y está preocupada por ti. Seas nuestra Kara o no, se lo debes por ahorrarte un día más de pruebas.

—Lo sé, me gustará saber como es la vida de esta Kara, con ella viviendo mi sueño...

Su tono de voz sonó irónico y a la vez increíblemente triste. Llevó una mano a su hombro haciéndose pequeña envolviéndose a si misma, conteniéndose.

What I should have done. [Supercorp]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora