- siempre has trabajado en la primera planta de la fábrica y hoy, jajaja... No, hoy trabajarás en el sótano. - le dijo uno de los hombres.
Juan se pasó de ellos porque vio que contestarles nos servía de nada, por eso se quedó callado. Cuando giro para ir a limpiar las máquinas, vio que también había niños de su edad allí.
- Hola-Dijo Juan, - yo vengo de la habitación oscura y no sé qué hacer, ¿Me lo podéis decir?.
- no eres el único- le respondió Andrés, todos venimos de allí, por eso tienes que ayudarnos que sino te matarán como el resto.
- el resto - habló Juan con miedo.
- Es que no sabes las normas de aquí o que, le contesto Mario.
- Mira, yo vine aquí atraves de la máquina del tiempo, la inventé, yo soy el futuro y....pensaba que si viajaba al pasado, podía al menos saber lo que sucedía.
- Es del futuro dice, jajajja.... ¿Qué futuro? Se nota que te han pegado muy bien.
- No, se lo juro, vine del futuro. Se lo puedo mostrar, la máquina está en la casa de Juan, un chico, pero yo también me llamo Juan es casualidad.
Mario y Andrés murmuraban entre ellos y le dijeron que les tema que mostrar la máquina para poder creer y si eso fuera verdad, pues lo tenían que llevar con él.
- claro, os la enseñaré, pero primero tenemos que salir de aquí.
Mario, Andrés y Juan salieron a escondidas de la fábrica y fueron a la casa de Juan.
