Gato se despertaba algo aturdido por los pocos rayos de sol que salían desde una pequeña ventana. No sabía dónde estaba pues estaba todo oscuro, y fue hay que se dio cuenta que tenía los ojos vendados con una venda. Intento quitársela con su pata pero descubrió que su pata no le reaccionaba. Se quiso levantar ya que se encontraba sentado, pero un gran dolor sintió en su cintura y recordo lo que había pasado. Y fue hay que descubrió que estaba atado a cuerdas sentado en una silla. Con sus garras intento cortarlas aunque era difícil ya que sus patas estaban atadas detrás de su espalda. Intento de mil maneras desatarse pero fue inútil. Pero cuando intento por última vez desatarse chocó su cabeza con alguién que tenía detrás de el. ¡Era Kitty!. Gato tenía los ojos vendados pero sabía que era ella. Podía escuchar su respiración y sentirla al lado suyo, al parecer aún seguía inconsciente. Gato intento mil veces despertarla, pero fue inútil. Así que se rindió y empezó a intentar liberarse de aquella silla. En cambio Kitty se despertó de golpe muy asustada al escuchar un gemido de dolor. Ella tenía también los ojos vendados pero reconocía la voz de Gato. Lo escucha gemir de dolor y de cansancio. Ella muy preocupada solo quería ayudarlo, le tocó su pata que estaba atado al lado de la suya, y mientras tocaba la pata de Gato se preocupó más ya que nota algunas heridas que Gato se estaba haciendo por hacer tanto esfuerzo por intentar desatarse, que lo único que conseguía era quedar exhausto y hacerse más daño. Con su espada que tenía en su cintura, intento cojerla para intentar liberar a Gato, pero algo afilado que volaba en dirección donde estaban ellos, corto las cuerdas y tanto los dos calleron al suelo. Gato por el cansancio y sus heridas, que la más grave era en su cintura. Y Kitty pues todavía le hacía efecto el tranquilizante de aquel dardo, impidiendole moverse con libertad y con algunos mareos. Una risa malvada se escuchaba en el lugar y Gato con algo de dificultad y con ayuda de la pared apoyándose en ella, se levantó y puso su pata en su espada después de quitarse la venda de sus ojos
Yo que tu no lo haría -Dijo el ser con mucha maldad al ver las intenciones de Gato
¿Porque no? -Dijo Gato viendo esos ojos amarillos que aparecían de la nada mientras sacaba más su espada
¿De verdad te olvidastes de mi, hermano? -Dijo el ser con maldad
Gato no podía creer lo que había escuchado. La espada que tenía media sacada la soltó de golpe cerrándose de golpe y quedar Gato muy pálido viendo a aquel ser que aparecía de las sombras para dejar de ocultarse y por fin verlo entero. Era un gato amarillo como sus ojos y rayas negras por al rededor de su cuerpo. Gato al verlo sintió mucha ira y tristeza al ver a aquel Gato y muy sorprendido. Jamás penso que fuera el quién estuviera haciéndole eso. A el y a su querida Kitty
¿¡Marc!? -Dijo Gato aún muy pálido sin saber que hacer o como reaccionar
Parece que aún te acuerdas -Dijo Marc mientras sonreía siniestra mente
¿Por que me haces esto? -Dijo Gato intentando sacarle alguna información a Marc
¿Es que no es obio? Después de lo que me hicistes solo te estoy pagando con tu misma moneda -Dijo sonriendo alegremente
¡Yo confíe en ti! -Dijo Gato muy enojado mientras sacaba su espada apuntando a Marc
¿De verdad? ¿Igual como confías te en Kitty? -Dijo eso último riendo siniestra mente
¿A que te refieres? -Dijo Gato algo extrañado
¿Te acuerdas de aquel libro que encontramos? Pues resulta que ese libro tiene un secreto oculto repartido por toda la ciudad con solo sus letras para guiarte a un tesoro. -Dijo alegremente al acordarse de aquello.
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Eres la luz detrás de mis pesadillas
RandomNoche tras noche, a Gato siempre le aparecen apariciones de aquella gata que nunca conocío en su vida. Hasta que una de esas noches todo cambiará para siempre. Aún se pregunta ¿Quien es aquella gata de mis sueños?