El fuerte empujón a la puerta sonó en toda la casa, una infectada salia corriendo hacia el grupo que estaba en la puerta mientras un disparo se escuchó haciéndola caer, entraron a la casa inspeccionando por si acaso no había algún infectado oculto y una vez que estuvieran seguros se acomodaron en la sala para dormir.
Stephanie miraba por la ventana, el calor era insoportable a pesar de la hora y las provisiones comenzaban a acabar, necesitaban encontrar más.
— ¿Estas bien? - Era Elena que se acercaba hasta ella y le agarró su mano.
— Me acordaba de María —respondió la chica - Aidan está destrozado, Tomás está igual.... Y no puedo dejar de pensar en que algo similar nos pueda pasar — señaló hacia el grupo donde Aarón y Aidan tenían una pequeña conversación, Amanda recostada de Mathias los miraba sin decir nada los veía felices a pesar de la pérdida de Aidan; mientras que Tomás solo te observaba el enlatado que estaba comiendo. Un par de camiones se escuchaban pasar afuera de aquella casa.
— Es... Un riesgo el cual todos tenemos que vivir, yo no sé si mi hermano esté con vida... Pero estar contigo, es otro motivo diferente y me gusta... — comenta Elena observando también la ventana.
— A mi también me gusta y no quiero que tomemos distancia — responde Stephanie, le lanzó una pequeña sonrisa y se apartó de la joven — ¿Creen que en la frontera vuelva a pasar lo mismo del puente? — preguntó Stephanie acercándose a los chicos.
— Pues esperemos que no, la infección no esta siendo contenida — respondió Aaron — lo mas probable es que haya paso¿tu que piensas Tomás? — se dirigió al joven que observaba aún la lata.
— Que somos unos idiota en pensar que todo estaría bien — respondió de mala gana — ¿no se han puesto a pensar si ha sido buena idea llegar hasta acá? — tomó un papel que parecía una fotografia, Mathias supuso que era de algún familiar lo que le hizo pensar en su familia.
— Ahora más que nunca tenemos que estar unidos no podemos quebrarnos — responde Aarón.
— ¿Y si llego a casa y no tengo familia ? Vaya que pareciera que estamos perdiendo el tiempo... — soltó Mathias de pronto, la verdad nunca había hablado de eso, de su familia de su país de sus hermanos todos guardaron silencio por un momento.
— Nos tendrás a nosotros, Matt ahora nosotros somos una familia - respondió Aarón, el chico no dijo nada, luego de un rato Mathias se levanto y caminó hasta la ventana; el fuego consumía algunas casas a la vista, pudo visualizar su reflejo en el cristal, no se reconocía tenía el cabello largo y la barba creciendo, sin mencionar alguna que otra herida en su cara, se volteó y miró al grupo que estaban sentados sin decir nada, tal vez era hora de ir viendo la realidad. Puede que ellos ahora sea su familia, se han mantenido juntos a pesar de las circunstancias, y sobre todo por la pérdida de María ahora debían estar más unidos.
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Crónicas Z: La Infección
HorrorEn el año 2017 un virus se propagó por todo el continente latinoamericano, dejando así a la humanidad casi extinta, sólo unos pocos sobrevivientes se verán forzados a luchar con estas criaturas.