Dinamita.

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ZamyRose22, con cariño para ti

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ZamyRose22, con cariño para ti.

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-Hola bonito.

¿Por qué no podía tener una noche de vigilante normal? Mes y medio atrás había sido el loco con máscara de cerdo que trato de abrirle la cabeza, el fin de semana pasado fue la anciana travestida que quiso robarle los ojos, hoy era aquel niño alien quien lo saludo con un tono grave que delató la sorpresa de Damian aun a través del antifaz.

-¿Quien se supone eres?- Robin utilizó su dedo índice para alzar el mentón del chico que recién había atrapado, este lo veía con una expresión de regocijo y victoria, casi como si no estuviera amarrado y a merced de un ex asesino quien tenía muy poca paciencia.

-¿La "S" en el pecho no te da una idea de quién soy?- volvió a ronronear pero esta vez con galantería- soy Superboy pero tú puedes llamarme a cualquier hora.

-¿Y qué se supone estás haciendo aquí?- Robin trataba de ignorar el descarado coqueteo del otro pero le era complicado cuando este no paraba de comérselo con la mirada.

-Ver lo lindo que eres ¿por qué no te acercas un poco más? No muerdo.

-Eres desagradable y estúpido- Damian mantuvo su expresión sombría y asqueada mientras trataba de llamar a su padre con suplicante telepatía pues no quería estar a solas con ese muchacho atrevido- ¿Te das cuenta de tu posición?

-Estoy más interesado en las que tú puedas hacer.

Eso había valido un sorprendentemente rápido sonrojo por parte del petirrojo; tan impactado por el comportamiento que sencillamente soltó la cuerda y se alejó tres pasos para que el alien no lo mirara con tan poca distancia. Al demonio el asunto de ahuyentar al molesto intruso, Robin no trataría con una persona tan poco educada ese era problema de Batman.

No le sorprendió ni le importo que Superboy empezará a caminar detrás de él cuando tomó la decisión de irse, lo escucho reír y decirle algunos patéticos cumplidos más sobre "lo bien que le quedaba su traje", de "el elegante caminar que tenía" o peor aún del "bonito perfil que tenía". El superchico aun estaba sujetado en todo el cuerpo por las cuerdas que usó Robin para derribarlo cuando lo vio merodeando los tejados de laboratorios S.T.A.R.

Como el "super-imbecil" (manera en que Robin lo bautizó) tenía la capacidad de volar las ataduras no le afectaban más que en el aspecto insulso que mostraba.

-¿Qué demonios quieres?- le preguntó bastante enojado de que aún le persiguieran a pesar de haber saltado por dos edificios buscando alegarse- deja de fastidiar niño, si quieres que te cambien el pañal entonces vete con tu padre y deja de molestar.

-Vaya! Qué carácter tan desagradable- se quedó levitando frente al chico maravilla quien por fin detenía su caminata- ¿que Batman no te dijo que es de mala educación gritarle a la gente?

De historias y otros cuentos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora