Silencio Oscuro

"El padrastro"

Parte I

Aquel día como muchos otros marcarían mi vida...yo tenía tan sólo 12 años recién cumplidos mi hermanito tenía 6 años era la primera vez que mi madre volvía a tener una pareja estable desde hacía un año.

Fue cuando nos separó de mis abuelos la primera vez, ella viajó a Buenos Aires en busca de un trabajo y se encontró a un monstruo.

Era de noche y vivíamos en Capital Federal de la provincia de Buenos Aires.

En una habitación muy pequeña, era una pensión donde habitaban 4 familias más, compartíamos los baños y la cocina.

Los dueños también vivían ahí era una pareja ya un poco mayo, la señora era enfermera y trabajaba en el hospital, el señor no hacía más que estar en casa. Tenían dos hijos, uno del que no quiero recordar el más pequeño que tendría unos 13 años era la persona más infantil y malvada que había conocido. Se metía mucho con mi hermano y por eso no lo aguantaba mientras más lejos mejor.

El otro tenía 18 años y se llamaba Bruno, el estaba estudiando en el mismo colegio donde iba a ir yo, sólo que él estaba terminando. Se podría decir que no encajaba en la familia era muy educado siempre saludaba te preguntaba qué tal todo, era muy amable, simpático y encantador. Pero sólo se le podía ver muy fugazmente porque estaba con sus amigos.

En aquella habitación tan diminuta, sólo había una cama grande y otra pequeña en la grande dormía mi madre con su pareja y en la otra dormía mi hermano que nos íbamos turnando la cama todos los días. Y yo dormía en un colchón justo en la continuación de la cama grande pero en el suelo.

Llevábamos un mes ahí y aquello parecía normal, hasta que una noche...

Estabamos durmiendo todos y ese día me tocaba a mi en el colchón como de normal nos acostamos.

De repente empecé a sentir como unos dedos grandes de metían en la camiseta del pijama me estaban tocando los pechos, y me apretaba los pezones. Yo me gire y el rápidamente se quitó. Mi cabeza empezó a darle vueltas como ¿Qué hago ahora?, ¿Levanto a mi madre?, se molestará o me dirá que es cosa mía.

Ella estab ciega por él, se veía que le quería. Bueno hasta aquel entonces todavía se llevaban bien. Pero el en algunas ocasiones le gustaba beber mucho vino los fines de semana, durante la semana era trabajador.

"No todo es lo que parece" Cierto...

Una tarde al regresar del colegio llegue como siempre y mi hermano estaba jugando pero mi madre, estaba en la zona de lavandería - Hola mamá!- Ella se giró y vi que estaba llorando -,,¿Qué te pasa, porque estas así?- Nada no pasa nada, me hizo a un lado y siguió a lo suyo. Le pregunté a mi hermano pero el no sabía nada.

Entre en la habitación y su pareja «Juan B.» no estaba.

Paso el rato y cuando volvió Juan parecía que no había pasado nada no entendía y lo dejé ya me contará...

Juan B. Tenía muchos más años que mi madre en aquel entonces unos 47 aprox. Trabajaba en la construcción era albañil se levantaba todos los días a las 4:30 am para salir de casa a las 5 y no regresaba hasta las 19 pm. Le gustaba comer bien y kso fines de semana solíamos ir de camping. Los parques de Capital eran muy atractivos la gente solía llevar el mate unas galletas y sándwiches, a pasar el día.

El tenía cuatro hijos, una chica y tres chicos, cada uno de ellos era un personaje pero por otro lado no aceptaban a mi madre como su pareja y siempre había discusiones por el mismo tema, poco a poco se fue haciendo habitual.

Ya llegaba mi cumpleaños iba hacer 13 años el 04/04/1993, yo no pedía mucho era consciente de la vivienda donde estábamos y el trabajo de mi madre ella trabajaba limpiando casas, y el sueldo no era precisamente para darnos todo lo que queriamos. Entre ellos yo no pude hacer viaje como fueron todos mis compañeros ese año.

Un sábado teníamos comida familiar y venían los hijos de Juan prepararon todo y nos juntamos, por la tarde yo solía a dar un paseo con mi hermano, me lo llevaba al parque y esperaba a que llegará mi madre a pasar el resto de la tarde y volver con ella a casa.

Esa tarde esperabamos los dos sentados en los columpios se nos pasaban las horas y no nos dábamos cuenta. La noche iba atrapando la tarde y me di cuenta que mi madre no iba a ir por nosotros.

Agarré a mi hermano de la mano y nos volvimos a casa, podía notar que algo no iba bien. Fuimos a paso más acelerado y llegamos por fin al portal. Entramos y corrimos hasta la habitación se podían oír unos gritos y golpes pero me daba miedo entrar, así que deje a mi hermano sentado fuera y le dije que no se moviera.

Yo abrí la puerta de golpe (plas) y la escena fue la siguiente:

La habitación estaba revuelta de cosas y en la cama estaba tumbada mi madre con los brazos cruzados en la cara intentaba protegerse. La camiseta no la llevaba puesta y pude ver unos moratones en ese momento.

Juan estaba sin camisa y con el pantalón desabrochado están de pie frente a mi madre y tenía la mano izquierda hecha un puño y la derecha la tenía levantada, sujeando un cinturón de cuero. Estaba azotando a mi madre, pero ella no hacía nada por defenderse era como si le debiera algo o no se que explicación pueda tener eso, sólo se que fue desagradable.

Cuando se abrió la puerta él se giró y bajo la mano su cara le cambió derrepente como si fuera la persona más sumisa -Perdóname, no quería pegarte- dijo él. Cuales palabras las estuve escuchando durante cinco largos años...

"Violencia de género o maltrato, tienes muchos sinónimos pero todos ellos van a lo mismo, en mi caso le tocó vivir esa experiencia a mi madre y fue en reiteradas ocasiones. Doy gracias por acabar con esa relación, pero el daño emocional que queda no se puede arrancar de tu ser, se queda metido como una flecha y cuando intentas quitar comienzas a sangrar."

Continuará...