Capitulo 38

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—Estas bromeando ¿cierto? —pregunte boquiabierta con la vista fija en aquel arnés. No puede ser, alucinaciones mías seguro son.

—No, esto es serio. Sabes perfecto que no puedes ir a un Internacional sin un Axel triple bien ejecutado. Asi que mejor deja de cuestionarme como a una de tus amigas y hazme caso como lo que soy. Tu entrenadora. —coloque los ojos en blanco. —Mira Nicci, ahora puedes odiarme, detestarme, aborrecerme. Pero cuando estés en la cima de la gloria, disfrutando el triunfo bien merecido, me amaras.

—Procura que eso pase ¿vale?

—Vale pero tu dame un Axel triple completo. —respire hondo. El orgullo vale mas que mil palabras. Coloque el arnés ya puesto en mi espalda y empecé a patinar, en busca de un salto perfecto. Creía que lo lograba pero pude darme cuenta que estaba equivocada cuando vi casi el hielo enfrentarse contra mi, en una batalla de pelea o triunfo.

— ¡Joder! Es que no puedo. Aunque lo intente y lo intente, no puedo. —explote en frustración.

—Si ¡Si puedes! Confía en ti como yo lo hago. ¿Cuál es tu punto en la mira? —ella y sus preguntas personales. Esa respuesta es tan sencilla, que la puedo contestar sin pensar con los ojos cerrados.

— Ganar. —respondí simple.

—Bien, céntrate en eso Nicci. Enfócate en lo que quieres. No pienses que es imposible, por una vez en tu vida no pienses, no calcules. Acciona. No sirve de nada cariño pensar, soñar, anhelar sino hay acción en el proceso. Acciona por lo que quieres. —un silencio se hizo parte de mi. —Asi que mejor ve dejando ese miedo que tienes, y salta como si dependiera una competencia de ti. Anda, ¡Ahora! —respire y exhale unos microsegundos para luego ponerme en posición de nuevo. Calcular la distancia y con el arnés puesto ya, saltar lo mas alto y fuerte que pude. El aterrizaje fue perfecto. Un Axel triple bien ejecutado, por primera vez.

— ¡Lo hice! ¡Lo logre! —grite llena de emoción y orgullo por mi. Me lance hacia Rose en un abrazo lleno de felicidad.

—Lo se, lo observe con mis propios ojos. Un jodido Axel triple perfecto. Todas tus rivales van a estar envidiosas de verte volver con el triunfo en tus manos. —sonreí.

—Espero ganar.

—Vas a ganar Nicci, yo no entreno decepciones o fracasos. Yo entreno ganadores, reales triunfadores. —explico aquella señora. Su respuesta me dejo boquiabierta, sin palabras. El perfeccionismo en el mundo, podía ver claramente como ella era amante de la perfección. Y lo se porque yo también lo he vivido.

Sin pensar mucho mas y recordando que tenia una cita que me estaba esperando, me despedí rápidamente de Rose. Junte mis cosas y en un suave trote de unos quince minutos había llegado a aquel dicho lugar.

—No puedo creer que me hayan mentido en la cara todos estos años. Es que es indignante. —hable decepcionada ante la situación pasada ayer. Nos encontrábamos en el Café Estefanía junto a René, luego de lo sucedido necesitaba contarle a alguien toda esta jodida historia que me tiene frustrada y estresada. Y ahí como siempre, estuvo René allí.

—Lo se, es terrible. Pero ahora mas que nunca tienes que ser estratégica y calculadora, como los fueron tus padres.

— ¿A que te refieres?

— Piensa cariño. Desde aquel incendio quedo un punto sin resolver, una pieza que aun falta del rompecabezas.

— ¿Y cual seria esa pieza?-pregunte sin entender su punto.

— El asesino de tu hermana. Si analizamos, ella no murió por el incendio, alguien la mato. Y tuvo que tener algún punto en contra de ella, para que le calculara dos disparos. Tu deber es averiguar quien jodidas cometió el crimen. —abrí los ojos sin poder creérmelo.

— ¿¡Pero tu que crees¡? Que soy detective del FBI. —el y sus locuras de película.

— No pero se que alguna pista debes tenes. Anda, dime algo que te haya llamado la atención. Que te haya parecido raro. —vale hagamos el intento. Unos segundos de silencio hicieron parte. De todos los recuerdos, el que concordaba con la situación era el de... ¡Liam!

—Liam. —murmure desconcertada.

— ¿El psicólogo? —asentí rápidamente. Al ver su cara de confusión completamente, explique:

—En el campamento le había podido ver un tatuaje en el hombro derecho.

—¿Cómo era ese tatuaje?

— Un sol con una "E" dentro. Al principio no le di importancia porque no sabia lo que significaba pero mira si esa "E" puede ser...

—La inicial del nombre de tu hermana.-completo la frase que iba a decir. Asentí. —¿Pero que tiene que ver el sol?

—Nuestro segundo nombre es Solazzari, Nicole Solazzari Collins. —abrió la boca completamente René junto a sus ojos fuera de su orbita. Sin poder creérmelo, podría estar en lo cierto.

¿Sera que Liam tenga algo que ver con mi hermana? ¿Tan retorcido seria para fingir delante mío que no le dio dos disparos fríamente a mi hermana? ¿Sera que siempre tuve al diablo en frente mío y nunca lo supe?

Apariencias Engañosas •Completa•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora