Armentum【myg+pjm】

〖02〗

"Aprende de la Luna, aunque este sola, nunca deja de brillar".

Suaves cosquillas sentía en su húmeda nariz, provocando que un involuntario estornudo lo despertara de golpe. Gruñendo intento colocarse de pie, pero el suave peso en su costado se lo impidió, cayendo recién en cuenta de la presencia de Jungkook, quien dormía abrazado a su costado, con su cabeza bajo su cuello.
Dándose cuenta del motivo de su estornudo comenzó a olfatear el cabello del pequeño vampiro, sintiendo aun ese aroma característico de él. Recordaba como ese aroma a humano, junto con el inconfundible olor de la sangre, lo había llevado hasta Jungkook el día que lo conoció y salvó.

Recordar el rostro pálido del moribundo chico le estrujaba el corazón.

-Hola... -El suave murmullo del vampiro a su costado lo sacó de sus recuerdos, enterneciéndolo al ver como bostezaba y restregaba sus ojos.- Hyung, su pelaje es muy suave...

Rodando los ojos se puso de pie al fin, y es que a petición del pelirrojo tuvo que dormir en su forma lobuna. Aunque jamás podría molestarle el estar en sus cuatro patas, menos ahora que debían dormir en el duro suelo de aquella cueva.

Luego de ver como el chico rebuscaba quien sabe que en la mochila, salió de la cueva estirando su cuerpo mientras daba un gran bostezo, para posteriormente sacudir su pelaje.
Su vista rápidamente se fijo en un pequeño conejo bushmeat*, y sin pensarlo se lanzo hacia él, escuchando el tronar de los huesos en el momento que su hocico lo tomo por el cuello.

Y sin mas, comenzó a comer.

-¡Yoongi hyung! ¡No haga eso! -Los exagerados gritos de Jungkook le causaron gracia, girando hacia el menor se sentó, batiendo su cola tal cual un cachorro que acaba de hacer una travesura.- Odio cuando hace eso, recuerde que también es humano.

Lo sabia perfectamente, pero tanto tiempo compartiendo con su lado animal lo acostumbraron a comer así, como un animal que en el fondo era.

Haciéndole caso omiso al molesto vampiro continuo con su desayuno, escuchando de vez en cuando los murmullos malhumorados del menor, que sólo lograban ponerlo de mejor animo. Le divertía hacer enfadar al pequeño cazador.

Una vez termino de comer se acerco a Jungkook quien ya lo esperaba con un pequeño recipiente con agua, del cual no dudo en beber aún en su forma lobuna, transformándose poco después en el humano de cabellera negra que era.

-Esta cubierto de sangre. -Comento Jungkook, haciéndole entrega de unos pantalones, una playera negra y zapatillas, cubriendo su nariz para evitar que el aroma de dicha sustancia rojiza lo alterara.

-Si, iré a darme un baño al lago, no te alejes de la cueva. -Ordenó viendo al menor con seriedad, quien solo asintió con una mueca molesta en su rostro.

No le gustaba estar quieto en un solo lugar, era demasiado curioso, pero sabia que el alfa solo lo hacia para cuidarlo, en especial al estar en un territorio que Jungkook no conocía.

Una vez en la orilla del lago, Yoongi dejo el pantalón, la playera y las zapatillas un poco apartados de este, para evitar mojarlos, y sin esperar más se zambullo en el agua.
El frío de esta le calo hasta lo más profundo de sus huesos, dejando escapar un suspiro de satisfacción hundió por completo su cuerpo, saliendo segundos después completamente mojado.
Pasando sus manos por su rostro aparto los cabellos que se habían pegado a este, peinándolos hacia atrás para despejar su vista y dejar vagar esta por los alrededores del lago y del bosque.

Nunca se cansaría de repetirlo, amaba ese ambiente de paz y tranquilidad que solo la naturaleza podía darle. Ya una vez junto a su familia de panteras y vampiros habían intentado vivir con los humanos, en la civilización, rodeados de edificios y contaminación. Pero no pudieron, simplemente la toxicidad de la urbanidad era demasiada.