IMAGINA SHAWN MENDES

Mr. Mendes

Hora de la salida, iba hablando con Josh sobre cómo haríamos la canción, lo cual al final quedamos con que vendría a mí casa, pero primero íbamos a ir a buscar su guitarra.

Vamos a buscar mi hermoso Ferrari, le quitó la cadena y me subo. El coloca su skateboard en el piso y se coloca su casco. Luego de eso nos fuimos rumbo a su casa.

Cuando llegamos no había nadie, así que directamente fue y la busco. Mientras yo lo esperaba en la sala. No duro ni cinco minutos y ya estaba bajando las escaleras con esta en hombros. Salimos de su casa, estábamos a penas saliendo cuando pasó algo y caí de la bici, el se detiene y va rápido donde estoy.

___(apodo) ¿Estas bien, te lastimaste? –pregunto preocupado–

Si estoy bien solo es un golpecito –le quitó importancia–

Me levanto con ayuda de él, me limpio del sucio, cuando un carro pasa cerca de nosotros y se detiene en una casa. Miro aquel lugar y de la nada veo al Señor Mendes bajándose de este con un ramo de flores.

Abro mis ojos con asombro, Josh me miró extrañada, lo agarro del brazo y lo arrastró hasta de tras de una camioneta.

¿Ahora que bicho te pico? –exclamo–

Shhh –lo mando a callar–

A mí no me chites –dijo con molestia–

Cierra la boca y mira –le agarro del mentón y le muevo la cabeza en dirección de aquella casa–

¿El Profesor Mendes? –pregunto con asombró. Asiento– ¿Que hacemos espiando al profesor de música? –me miro sin entender–

¿Que no vez lo que tiene en las manos? –susurro–

Un ramo de flores ¿Y? –le resta importancia–

Ay diosito ayúdalo por favor –digo mirando al cielo unos segundos, después vuelvo mi vista al frente–

¡Todavía no entiendo que hacemos aquí! –exclamo en un tono fuerte. Le doy un golpe en la nuca– ¡Ey! –se toca con una mano la sona golpeada–

¡No grites menso! –exclamo yo en un susurro–

Me quedo observando, el profesor solo estaba al frente de una casa esperado, debes en cuando miraba su reloj con impaciencia. Segundos después de la puerta salió una mujer, un tanto grande para él.

No si, ya tiene una Sugar –digo con asombro Bassett. Trató de contener una carcajada, ya que la cara de menso que puso fue épica–

Te pasas...–no quitó mi vista de la escena de al frente–

Yo solo digo lo que ven mis ojos y lo que interpreta mi cerebro –aclaro–

¿Tienes cerebro? –le dijo con asombro, obvio era falso–

Me haces bullying...–se cruza de brazos y hace un puchero–

Lo ignoro y sigo viendo en aquella dirección. El Profesor le había dado las flores y está sonrió, le dijo algo y logramos escuchar en todo el silencio un "gracias hijo...".

Aaaah ahora todo tiene sentido es la mamá –infomo mi acompañante–

Mejor vámonos –voy y agarro mi bicicleta. El imita mi acción y agarra su skate–

Nos vamos de ahí, no antes sin dar una última mirada.

....

Había llegado el viernes, estaba un poco nerviosa, no me gusta cantar en público se me hace muy incomodo que la gente te mire fijamente. Pero no me quedaba de otra era eso o tener mala nota y apenas estoy empezando el año así que no gracias.